La niña nueva

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Hola mi nombre es Callie, bueno en realidad así me dicen aquí, nunca he sabido como me llamo en realidad, aunque realmente ese es mi nombre, es complicado, lo sé, yo tampoco lo entiendo y bueno tengo seis años, creo que es normal no entender muchas cosas a esta edad.
Vivo en Saint Angelo, se preguntarán donde esta, es una casa para niños sin papas, esta al norte de Italia; aquí viven muchos niños y niñas que llegaron cuando eran bebes (como yo), o poco después, niños a los que sus papas no los quisieron o niños que se quedaron sin sus papas por algún accidente (mi caso). Mis días aquí son bastante aburridos, el colegio está aquí mismo, pero no me gusta, la verdad solo me gusta la clase de música, no tengo amigos aquí, bueno si un par, pero no sé, estar aquí es como estar triste siempre, a veces me gustaría tener alguien a quien llamar mama o papa, pero sé que eso jamás pasara... pero bueno... en realidad todo esto era solo para que entendieran el verdadero motivo de esta historia; hoy por la mañana oí un rumor, escuche a una de las hermanas (si, para el colmo todo esto esta manejado por religiosas) decir que algunas personas vendrían a ver a los niños para adoptar uno y tal vez sea mi oportunidad, así que es mejor que vaya al salón, es casi hora de la visita.
Madre Superior (MS): Niños, hoy tendremos la visita de algunas personas que viene a verlos para adoptar a alguno de ustedes, recuerden que... (tocan la puerta desesperadamente)
CA: -La madre superior estaba muy concentrada diciendo las cosas que generalmente dice hasta que alguien interrumpió tocando a la puerta principal, ella sale y lo que veo cuando abre me parte el corazón... Es un día lluvioso y aun estando dentro del salón se siente el frio cuando la madre abrió la puerta un ventarrón de aire entro haciendo temblar a mas de uno, pero lo que a mi me hizo temblar no fue en si el aire o el frio si no lo que vi... una niña parada frente a la puerta, mas pequeña que yo, una niña de piel blanca como la nieve, cabello rubio y unos hermosos ojos azules como el océano, por un momento pensé que venia con las personas de las que nos estaban hablando, pero no, estaba ahí sola mojándose y llorando, la habían abandonado aquí como a muchos otros niños, eso me hizo sentir muy triste ¿Cómo alguien podría abandonar a una niña? Y a una niña tan bonita...en fin, la madre inmediatamente la cargo y entro con ella en brazos, tras cerrar la puerta dejo a otra madre encargada de nosotros mientras ella desaparecía con la niña en brazos, cundo termino de entender la situación solo puedo pensar "bienvenida a la casa de niños sin papas": desde ese momento a mi me fue imposible concentrarme en lo que nos decían, tenia una inmensa curiosidad por ver a esa niña, así que cuando los señores que querían adoptar a alguno de nosotros llegaron, yo Sali del salón sin que nadie se diera cuenta y me dirijo a la oficina de la madre superior, debió haber llevado ahí a la niña para secarla y cambiar su ropa, y no me equivoque, cuando llego abro suavemente la puerta y las veo, el llanto de la niña me rompe el corazón, he saciado mi curiosidad y se que si me ven me meteré en problemas, así que decido irme de ahí pero cuando cierro la puerta hace un ruido muy extraño y solo puedo cerrar los ojos mientras escucho gritar a la madre.
MS: ¡¡¡Callie!!!
CA: (entrando) si madre?
MS: ¿No deberías estar con los demás?
CA: Yo... -intento responder, pero me pierdo en la cara de la niña, es mas pequeña que yo y no entiendo como alguien la ha abandonado, pero bueno muchos aquí están por eso-
Ms: ¿Callie?
CA: Lo lamento, es solo que...nada
MS: Bueno (mientras la niña se calmaba un poco) ahora sabes que esta pequeña estará con nosotros, ¿tienes alguna idea para su nombre?
CA: (Con cara de ilusión) ¿en verdad puedo nombrarla yo?
MS: Adelante, inténtalo.
CA: -Me quedé pensando un buen rato, y dije el primer nombre en el que pensé cuando la vi- Arizona...
MS: ¡Me agrada! A partir de hoy esta pequeña se llamará Arizona.
CA: ¿Cuántos años tiene?
MS: (Mirando una nota) al parecer tiene cuatro años...
CA: Es muy pequeña...
MS: Pero mi niña, si tu tan solo tienes seis años...
CA: Ya, pero ella es más pequeñita..
MS: En eso tienes razón, ahora jovencita deberías ir con el resto de los niños, yo la llevare mas tarde a las habitaciones de las niñas...
CA: ¿Puedo ir con usted?
MS: ¿Por qué tanto interés en la pequeña?
CA: (encogiéndose de hombros)
MS: Bien, vamos...
CA: -comenzamos a caminar a la habitación de niñas en el área prescolar donde hay mas niñas de su edad y mas pequeñas, cuando llegamos la madre recostó a Arizona en la cama y le dio que estaría bien, que ella la cuidaría como si fuera su hija, y la verdad es que la madre superior es lo mas cercano que tenemos a una mama así que yo creí en sus palabras, después solo dije -yo seré tu amiga, así no te sentirás tan solita...- pude notar como ella sonreía levemente entre tanta tristeza y llanto, hasta que finalmente se durmió-

Tu mi única certezaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora