El hijo de las llamas #1

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Primera parte: La leyenda de Altair

Hace mucho tiempo, existían un grupo de seres divinos de los cuales se encargaban de hacer posible la realidad misma, creando la vida en distintos planetas junto a la vida de los mismos, como de mantener el equilibrio de la vida misma.

Estos seres eran conocidos como dioses primordiales, cada uno con habilidades tanto creativas como destructivas. Cada uno de ellos controlaba una fuerza elemental y un poder inmenso. Se podría decir que estos dioses eran los reyes de su propia realidad.

Entre estos dioses, había uno que destacaba más entre los demás dioses y era conocido como Altair, el dios del fuego destructor, Altair era conoció como el más poderoso entre todos los dioses primordiales, su poder era tanto que incluso era temido por sus propios compañeros y hermanos.

Sin embargo, a pesar de su puesto y poder, Altair era un dios que apreciaba más la vida que cualquier otra cosa, por lo que nunca busco causar el caos y el terror.

Un día, mientras sus hermanos discutían sobre cuál de ellos era el más poderoso, Altair decidió tomar una acción que cambiaría para siempre el destino de su vida. Por lo que usando sus poderes el empezó crear y dar vida a su nuevo mundo.

Altair logro crear un mundo lleno de maravillas y criaturas diversas en tan solo 20 días, Siendo estas unas tierras que eran un refugio de paz y armonía, donde las plantas crecían exuberantes y los animales vivían en perfecta coexistencia.

Pero no todo podía ser felicidad para Altair, porque cuando los demás dioses primordiales descubrieron el mundo que Altair había creado sin su consentimiento, se llenaron de ira y envidia. No podían soportar la idea de que su hermano hubiera creado algo tan hermoso y significativo por lo que vieron a este nuevo mundo como una amenaza a su dominio y poder.

Los dioses se reunieron y trataron de destruir el mundo de que había creado Altair. Utilizando sus poderes para crear terremotos, incendios y tormentas devastadoras. Sin embargo, Altair defendió su creación con todas sus fuerzas. Utilizando su poderes para contrarrestar los poderes de sus hermanos y protegió a su mundo y todo ser vivo que existía en el de la destrucción.

Esto causo nuevamente la furia de los dioses primordiales, lo que llevo a que se desencadenara una guerra entre Altair y sus hermanos. Los dioses primordiales cayeron en la guerra, pero Altair también cayo junto con ellos, pero Altair usando sus ultimas fuerzas creo unos artefactos para que sus creaciones se defendieran de futuras amenazas, sabiendo que en algún momento otro dios primordial buscaría hacer destruir a su bella creación.

Pero estos objetos solo se le otorgarían a aquellos que sean merecedores de estos, los cuales llamaron los 7 anillos elementales y las armas legendarias, cada arma y anillo estaba conectado a un elemento, elemento que representa tanto a Altair y sus hermanos caídos. Los cuales se encuentra a día de hoy en un descanso eterno que seguirá durando hasta el día que los futuros salvadores aparezcan para proteger a este mundo de una inminente amenaza que se aparecerá en este mundo.

Fue gracias al amor por la vida y la creación que tenia Altair, fue que el mundo que el mismo había creado pudo florecer y convertirse en un refugio para todos aquellos que buscaban la paz y la belleza. Los primeros habitantes de ese mundo sentían tanto amor y aprecio por su dios que decidieron llamar a este mundo con el mismo nombre de su deidad caída "Altair"

Segunda parte: Vida en el bosque

El sol se hundía lentamente en el horizonte, pintando el cielo con pinceladas de tonos dorados y ambarinos. Un padre, cuyas manos estaban marcadas por la laboriosa vida en el bosque, regresaba a casa tras una agotadora jornada.

Touhou El hijo de las llamasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora