Capítulo 13: La ansiada libertad

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          Lumiere: ¡Escúchenme! ¡Gente de todo el mundo! Sabemos lo que planea la élite y lo que significan esas luces rojas ¡No se alarmen! No vamos a permitir que se salgan con la suya y sigan lastimando gente... ¡Están muertos de miedo y este es su último recurso!

          La señal de ese canal fue interrumpida y al desaparecer la estática, un general del ejército que se encontraba en otra parte del mundo apareció en la televisión.

          General: ¡Los terroristas están en Enthem y serán cazados! En cuanto al resto, más les vale quedarse en sus casas hasta nuevo aviso, todo aquel que salga será asesinado... decidieron hacer caso a criminales y ahora pagarán las consecuencias, a partir de este momento, toda orden dada por cualquier miembro del ejército deberá ser obedecida al pie de la letra, tenemos permiso del gobierno para encargarnos de la situación y les aseguro que así lo haremos... ¡Permanezcan en sus hogares y déjennos trabajar!

          A pesar de que Lumiere fue expulsada de la transmisión, el grupo entero y los civiles de Enthem escucharon ese mensaje a través de las pantallas que se encontraban a lo largo del centro de la ciudad.

          Civil: ¿Permanecer en nuestras casas? ¡Piensan matarnos de hambre! ¡De esa manera no es tan evidente y no tienen que ensuciarse las manos!

          Lumiere: Saben que estamos aquí, aunque eso no es problema ya que podemos trasladarnos a cualquier lugar del mundo.

          Johann: Estoy seguro de que dentro de poco enviarán refuerzos, por el momento los civiles deberían volver a sus casas hasta que pensemos en algo.

          Civil: No piensan abandonarnos ¿Verdad?

          Etoile: Por supuesto que no, pero en este lugar corren peligro, así que regresen a sus hogares y les prometo que dentro de muy poco nos volveremos a comunicar.

          Sin más opciones, los civiles regresaron a sus casas y el grupo permaneció donde se encontraba, no pensaban escapar, querían demostrarle a la élite que no les tenían miedo... como era de esperarse, no pasó mucho tiempo para que más soldados llegaran al centro de Enthem, aunque en esta ocasión venían mejor armados, protegidos y con tanques blindados. Los niños de Sekthor se asustaron y comenzaron a llorar, pero Etoile los tranquilizó diciéndoles que todo estaría bien.

          Lumiere: No importa cuántos sean ni qué tan armados estén, ya no representan una amenaza porque en estos últimos días hemos desarrollado increíbles habilidades y nuestra conexión con el todo es cada vez más grande.

          Etoile: Recuerden lo que han aprendido y estaremos bien.

          Los tanques abrieron fuego desde lejos, ese ataque tan cobarde y realizado desde una distancia segura para ellos era señal suficiente de que tenían mucho miedo de lo que pudiera pasar... estaban muy confiados y creían que con ese disparo habían acabado con todos, sin embargo, cuando el humo se disipó, pudieron notar que no les habían hecho ni un rasguño... una barrera de energía los protegió.

          Mujer: Hay que caer realmente bajo para atacar desde lejos y con un tanque a un grupo de personas dentro del cual hay niños.

          Hombre: La energía del tercer ojo nos protege de semejante aberración.

          Una vez más, tanques y soldados arremetieron con todo lo que tenían pero no consiguieron romper la barrera de energía que estaba protegiendo al grupo.

          Lumiere: Suficiente, no pienso seguir observando... es hora de mostrarles lo que una mente despierta y conectada es capaz de conseguir.

          Estrellas, constelaciones, meteoritos, sean mis guías y llévenme a la victoria ¿Piensan que esto es únicamente posible dentro de un simulador? Estos elementos siempre me han acompañado y una vez más acuden a ayudarme en forma de energía... representaciones hechas de luz cuyo poder es tan grande que hace explotar todos los tanques, dejando solamente vivos a los soldados que van a pie.

Velo de sombras (El despertar # 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora