Una chica llamada Enjel la cual entra a la U.E Acuarelas, la cual es una especializada para enseñar a las personas a utilizar sus poderes en clases, claramente aprendiendo también cosas importantes... pero entra con una advertencia de su madre; no s...
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— Enjel, hija, tienes que entender que si no haces las cosas bien, ese hombre nos va a separar para siempre...
— Mhm, ya lo sé, ahora déjame irme, ¿sí?
— Está bien...recuerda, buena cara, buen comportamiento.
— Sí, mamá...
La peliazul salió sin ánimos de su casa, obviamente no iba a obedecer a su madre, estaba bastante cansada de aparentar ser alguien que no era.
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Una media hora después, llegó a su horrible destino, la U.E Acuarelas, recién entró, notó algo, dos chicas, desde lejos se les veía lo creídas. Enjel bajó la mirada por un momento, para revisar si los cordones de sus zapatos estaban bien amarrados, recién levantó la mirada, se encontró con las dos chicas que había visto, una de ellas era absurdamente linda, la otra chica también, pero no se comparaba.
— Dios, cómo se nota que eres nueva, ¿sacaste tu ropa de un basurero?—Dijo la peliblanca provocando que ella y su amiga se rieran maliciosamente.—
— Hmm, amiga, ¿eso qué? ¿A ti en que te afecta cómo me vista? Busca algo bueno que hacer.
— ¿Quién te crees?—Preguntó la amiga de la peliblanca.—
— ¿Quién te crees tú?
— Hmm, ¿acaso sabes con quién estás hablando?—Añadió la otra chica.—
— No lo sé y no me interesa, listilla.
Enjel se fue rápidamente de ahí. "Que bien, chica, es tu primer día y ya estás peleando" se decía a ella misma murmurando.
Finalmente, empezaban las clases, Enjel se perdió unas tres veces, pero terminó encontrando su salón, y para su mala suerte, las dos chicas estaban ahí mismo, en su clase.
