¿y si te dijera te quiero?

Dudas

Yo estaba super contenta. Habíamos alquilado unas bicicletas y yo iba en cabeza.

ESP-¡Hey! Por ahí no es

Me reí. Di la vuelta y seguí a Omar.
¡Era increíble estar con el, y sobretodo que me estuviese llevando a un sitio especial!

Por fin, tras una hora y media en bicicleta, llegamos a el sitio más bonito que había visto en mi vida. Estaba exhausta por la carrera en bici. Pero un sin fin de emociones inundaba mi cuerpo.

Me di la vuelta. Omar me miraba con una sonrisa la mar de dulce, pero se giró en seguida. ¿Le había notado cifra vergüenza? ¿Se había puesto un poco colorado?

Volví a mirar el paisaje. Era una llanura verde y frondosa. Con amapolas rojas y margaritas blancas. Al fondo se podía divisar un pequeño arroyo al que nos dirigimos para refrescarnos. El sol daba fuerte y hacia mucho calor.

ESP- ¡Hey! Me has mojado... ¡malvado!-

Esto lo dije entre risas. Omar me había salpicado con agua fresca. Bueno más bien inundado ya que con las dos manos me había tirado el agua sobre la cabeza.

ESP - Esa era la idea, guapa.- de repente se puso colorado. Se le había escapado el piropo.

Hice como que no lo había oído pero le dediqué la mejor de mis sonrisas. El si que era guapo. Y estaba tan...

No me dio tiempo a terminar de pensar ya que de repente me vi sumergida hasta los hombros en el arroyo. Y Omar, entre risas, se alejaba.

Salí corriendo del agua y fui a por el. Yo casi no tengo fuerza así que se dejó llevar un poco hasta el agua y cuando estaba dispuesta a empujarle me cogi en brazos y se tiró al agua.

Nos estuvimos riendo un buen rato mientras jugábamos en el fresco arroyo. Fue cuando salimos de este cuando el chico me sorprendió diciéndome algo insólito.

ESP- Oye Meri, yo ya te conocía de antes...

ESP - ¿mmm? no entiendo... explicate.

ESP - A ver. Un día vi un tweet tuyo y me sorprendió la gracia que tenias.

Hizo un parón para observarme. Yo no daba crédito a lo que oía. ¿Me estaba vacilando?

ESP - Bueno luego vi un video tuyo en la escuela de arte bailando... cantando... pintando... y todo lo que sabias hacer.

Hizo otro parón. Yo seguía sin hablar.
ESP - Desde entonces quería conocerte... y bueno cuando me enteré de que estabas aquí y de que habías conocido a Javi... no pude evitar ir a verte.

Se giró. Estaba muy colorado. Así que, para evitar un silencio incomodo empece a hablar.

ESP - Me parece que es muy bonito lo que estas diciendo, Omar. ¿Los chicos lo saben?

ESP- Sí. Suelen reírse fe mi y bromear sobre esto.

Se rió. Y yo con el. Aunque no estaba segura de que fuese verdad.

ESP - Oye... ¿No me estarás vacilando?
Sonrió y se encogió de hombros.

ESP - No.

ESP - No te creo.

ESP - Ya te lo demostraré.

ESP - ¿Cuándo?

ESP - Espera y verás.

Sonreí y me puse al sol. Se puso a mi lado y ahí nos quedamos los dos. Tumbados bajo el ardiente y lejano sol.