ℝ 𝔼 𝔻 𝕍 𝔼 ℕ 𝕆 𝕄

ɢᴏ ꜰᴜᴄᴋ ʏᴏᴜʀ ꜱᴇʟꜰ

Fucked and drank all night
Acted all alright
Had no need to fight
Tonight, tonight

Go Fuck Yourself – Two feet

Sergio sabia que Charles no era el adorable piloto que aparentaba ante todos, claro que no después de que ganara en Mónaco unos tragos y una cama se los puede constatar donde ambos hombres terminaron enredados, Charles era un hombre sumamente sexual vamos era mas joven que el y bueno el ya no podía seguir su ritmo.

No eran una relación como tal, Charles se lo había dicho eran mas bien amigos con derechos o des estresantes a palabras del mexicano.

Cada GP que acaba no importando el resultado terminaban envueltos en sabanas con el mayor gimiendo por la excesiva energía del monegasco. Mas cuando era algún mal resultado por alguna de las partes así había pasado toda la temporada pasada ahora esta Charles estaba mas energético sus primeras carreras no habían sido la mejor e incluso cuando termino tercero en Bakú, el mexicano termino con un montón de mordidas en su cuello dejando en ciertas partes morados y después fue el parón. Se verían en Italia pero se cancelo a ultimo momento.

Sergio mentiría si no le dijera que en sus encuentros con Charles se había vuelto adicto a las manos del joven monegasco ahora esperaría hasta Mónaco la casa del piloto de Ferrari, la semana paso llegando al aeropuerto Charles le había dicho que lo pasaría a recoger. Y así fue estaba esperándolo en su precioso Ferrari negro.

-Alguien estaba desesperado por verme? – pregunto irónico

-Oh no soy el único, tu también me extrañas – guiño el ojo coqueto condujo hasta su nuevo departamento en Mónaco, se había cambiado después de que se filtro donde vivía y todo se fue al carajo.

Al entrar al nuevo edificio mas discreto pero no menos lujoso y con una privacidad cuidada en extremo. Llegando al levador Charles no aguanto mas acorralo al mexicano en una esquina del mismo para comerse esa boca que había extrañado durante mas de dos semanas amaba la textura y el sabor del mexicano. No mentiría el sabor del latino era adictivo. No podía esperar a tenerlo en sus brazos que estuviera rebotando en su entrepierna ver su piel caramelo con pequeñas gotas de sudor y su cabello mojado por todas las actividades que hacían juntos. Con cierto disgusto se separo de el.

Entraron tomaron una copa de vino hablaron de la semanas que estuvieron separados de los planes de sus escuderías. Cuando vio la mirada traviesa de Sergio, amaba cuando el mexicano tomaba la iniciativa. Con su sensual andar se acerco al monegasco sentándose en sus piernas empezando a besar su cuello dejando suaves mordiscos.

- Charlie me e sentido algo solo.... – con fingida tristeza comento el mexicano – no e tenido nadie con quien estar.

Un enojo creció en su pecho y con fuerza agarro las caderas del mayor. Nadie debería tener ese privilegio.

- Pues ya estoy aquí Mon soleil – acariciando suavemente la espalda del mayor, sentir esos pequeños temblores que el otro hacia al momento de su toque. Un beso brusco fue su inicio los labios del mexicano tenían el sabor del vino sado que habían degustado subiendo de intensidad.

Charles amaba como sus bocas encajaban bien una a la otra le encantaba morder los labios color cereza del mayor, sus manos inquietas empezaron a desprender las ropas del mexicano. Invirtiendo posiciones el mexicano quedo recostado en aquel mullido sillón mientras el joven piloto bajaba con desesperación los pantalones deportivos del mayor llevando una sorpresa.

- Oh alguien sabia a lo que veníamos – mientras abría las piernas del mexicano que había sido coqueto y no traía ropa interior – así venias en el avión Sergio? Tan sucio y travieso – decía entre besos en los muslos del mexicano