I- Regulus Black

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Capítulo uno: Regulus Black

YOU'D SAY YOU'D STAY BUT THEN YOU'D RUN

Lo único que se oía en Grimmauld Place aquella noche del 29 de junio de 1975 era el chirrido de unos columpios viejos, proveniente de un parque cercano

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Lo único que se oía en Grimmauld Place aquella noche del 29 de junio de 1975 era el chirrido de unos columpios viejos, proveniente de un parque cercano. La noche era fría y oscura, la calle estaba casi vacía, a excepción de un pequeño zorro de oscuros pelajes que deambulaba malherido. Pero aquel pequeño zorro no se apartaba del número 11 y el 13 de Grimmauld Place, era como si estuviera esperando algo o a alguien. 

El viento comenzó a hacerse notable y el pequeño zorro opto por tumbarse en el frío suelo, acurrucándose contra su cola para intentar entrar en calor. El pequeño animal comenzó a quedarse dormido mientras esperaba. Sus orejas se levantaron, un ruido como de ladrillos moviéndose comenzó a sonar y en el momento que sus ojos se abrieron se encontraba en brazos de un chico. El animal era incapaz de ver su rostro, pero su cuello era pálido y su cabello era rizado de color negro.

El pequeño zorro comenzó a cerrar sus ojos de nuevo, invadido por el cansancio que sus heridas le producían. El joven de negros cabellos colocó al pequeño animal sobre su cama, al darse la vuelta en busca de algo con lo que ayudar al pequeño animal una voz femenina sonó a sus espaldas.

━¿Sirius?━Preguntó aquella voz femenina, en su tono se podía apreciar el cansancio y el dolor de su cuerpo.━

El joven se dio la vuelta un tanto sorprendido, aquel pequeño animal ahora era una joven a la que reconoció al instante; se trataba de Adhara De'ath, la mejor amiga de su hermano mayor.

━No soy Sirius.━Contestó el chico acercándose hasta la joven de oscuros y largos cabellos.━

El chico se acerco a ella con un pequeño frasco en sus manos, con la intención de ayudarla.

━Se que no soy Sirius, pero puedo ayudarte.━ Dijo el chico acercándose a la malherida y desnuda espalda de la chica.━

El chico abrió aquel bote entre sus manos y coloco su contenido sobre la espalda de la chica. La chica se sentía incomoda, a pesar de conocer a Regulus desde pequeño nunca entablaron conversación, y ahora se encontraba curando las heridas de su espalda desnuda.

Una vez termino de colocar la crema morada sobre la espalda de la chica, Regulus le ofreció una bata para que se colocara. La chica se puso aquella oscura bata que él le ofrecía lo que ella no entendía era por que aquella noche la atendió el pequeño Regulus y no Sirius como ya era costumbre.

━¿Dónde esta Sirius?━Preguntó preocupada mientras se sentaba en el borde de la cama del chico.━

En el momento en el que hizo esa pregunta pudo notar a Regulus tensarse frente a ella, y con el rostro molesto y el ceño fruncido respondió:

Sirius se marchó.━Dijo molesto Regulus.━Pensé que lo sabias, que se encuentra con los Potter.━

Esa noticia produjo un nudo en el estomago de Adhara, Sirius la había dejado tirada, rompiendo la promesa de que escaparían juntos del infierno en el que vivían. 

La pelinegra no podía generar palabra, su mirada se centraba en el suelo mientras sus dedos se aferraban a la tela de la bata.

━A ti también te ha abandonado, ¿Verdad?━Murmuró Regulus sentándose en una silla frente a Adhara.━

Adhara no dijo nada, simplemente levantó la vista en dirección al menor de los Black.

Ambos se quedaron mirando en silencio, compartiendo la misma mirada de dolor y decepción.

No había necesidad de decir nada, sus miradas hablaban por si solas, ahora tenían algo más en común y era que él los había abandonado.

Regulus tuvo que ver cómo su hermano se iba de la casa sin siquiera despedirse, como sus padres quemaban su cara del árbol genealógico y de como empezaban a hablar basura de él.

Por otro lado Adhara ni siquiera había sido avisada de eso, todo ese tiempo estuvo pensando en que su mejor amigo estaría en casa y se encontrarían cada noche como siempre lo hacían. Que él la ayudaría con las heridas provocadas por la varita de su madre y que ella estaría para él en otro de sus momentos de ira y tristeza provocados por su familia. Pero nada. Ahora estaba sola, ella sola no podría irse a ningún lado.

La luna brillaba a través de la ventana de la habitación del joven Black, donde poco a poco comenzó a formarse una especie de amistad ya que ambos buscaban lo mismo; consuelo.

¹𝐀𝐬𝐭𝐮𝐭𝐞 {𝑆𝑖𝑟𝑖𝑢𝑠 𝐵𝑙𝑎𝑐𝑘}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora