Los retos de Blu.

Capitulo 2, Cambios de Vida.

Aún cuando la realidad era que, les hubiese encantado levantar a Blu, casi de inmediato, solo para poder revelarle la gran sorpresa que su suegro decía tenerle, también tenían algo de compasión y consideración en sí mismos, y por esto mismo fue que tampoco se animaron, a ir y despertarlo por la fuerza. Simplemente no era correcto, después de todo.

Sin embargo, no hubo necesidad de que nadie lo levantara, ni de que Perla, quisiera el intento poder levantarlo mediante ciertos cariñitos especiales que ella le hacía, ni tampoco que ninguno de sus hijos le jugara una broma pesada. Al final de cuentas, y luego de ver lo muy agotado y acabado que había vuelto después de aquel día de trabajo, en compañía de su suegro Eduardo y de su ahora amigo Roberto. Verlo en un estado, que solamente era exhausto, finalmente le valió a aquel guacamayo azul, para que todo el resto de su familia le tuviera por tanto un poco de consideración. Cosa que desde luego él agradeció más que nada, y que por primera vez en mucho tiempo sus hijos lo dejaran dormir a gusto.

Pero para cuando se levantó no tenía ni idea de cuánto tiempo había pasado, horas o minutos, pero el caso es que, se decidió a pararse, se encontró completamente solo en su nido. Por lo visto su familia, su esposa y sus hijos aún seguían afuera en la selva. Pero esto desde luego que no le molestaba en lo más mínimo. De echo, este suceso en su vida le acabó por dar una idea, decidió tomar y aprovechar esta oportunidad que no tenía en mucho tiempo. Puesto que no recordaba cuándo había sido la última vez que había ido. Y ahora esperaba volver cuanto antes y que nadie se diera cuenta de su ausencia.

Se aseguro de tomar su siempre característica e icónica cangurera, y una vez que la tuvo lista, también tomó la precaución de cepillarse su pico. Solo, para luego salir volando rápidamente por el hueco de su nido dirigiéndose a un lugar que solamente él sabía. Era claro que mientras nadie lo hubiera visto, tampoco nadie podría encontrarlo. Y por supuesto, el contaba con que eso sería así. La verdad, era que no esperaba que fueran a volver tan pronto. Pero lo hicieron. Y cuando lo vieron inmediatamente decidieron seguirlo, te pusieron llamar pero el al parecer, no pudo escucharlos.

A la vez que él iba saliendo del nido, siendo ya las 2 de la tarde, inmediatamente iban a su vez llegando, Perla, pero sin sus tres hijos. En su lugar se había aparecido con los amigos característicos de la familia, es decir, el tucán Rafael, su esposa Eva, y el dúo dinámico Pedro y Nico. El pájaro petirrojo, y el canario amarillo.

Se puede decir de cierto modo, que quedaron el grupo de cinco, completamente extrañados e intrigados, tras verlo salir, justo en ese momento, porque teniendo en cuenta que ya se había levantado considerablemente tarde no tenía mucho caso que decidiera salir justo ahora. Desde luego que a lo lejos intentaron gritar su nombre, pero no tuvo caso, de una forma bastante rápida, él se desapareció.

-Eva: ¿A donde fue?

-Perla: No tengo ni idea, hoy no tenía que trabajar con mi padre.

-Nico: Entonces, ¿a donde creen que se dirige?

-Pedro: No lo se.

-Perla: Pero yo sí quiero averiguarlo.

-Rafael: No pudo escucharlo, tal vez ahora solamente nos queda intentar alcanzarlo.

-Perla: Si, definitivamente tenemos que hacer eso, después de todo, hay algo muy importante que él tiene que saber.

-Nico: Entonces sigamoslo veamos a dónde va.

-Eva: O podríamos esperar también, para ver si vuelve.

-Rafael: La verdad es que eso es muy poco probable en realidad.

-Eva: ¿Que?, ¿y porque?

-Pedro: Porque yo pude ver que salió con demasiada calma al menos, se ve que va a tomarse su tiempo para lo que va a hacer, en el lugar que deba de estarse dirigiendo.