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Soy Marina una hija de pescaderos inmigrantes por eso viene mi nombre Marina "la que nace en el mar", naci en el año 1519, fui secuestrada por los trataron a mis dos años de edad y me vendieron al mercado.
Por suerte el Sultán Suleiman me vio y me llevó a su Harem pero no para participar en este, me cuido como una hija y me trato con respeto a diferencia de mi color de piel.
Y mi vida cambió un poco desde que llego la muchacha rusa
—La llegada de Hurren—
Era un día soliado en el palacio de el gran sultán, por los pasillos de este se encontraba una niña de 3 años paciando por este, su camino se detuvo cuando vio a la sultana Mahidevran.
—Buenas tardes sultana, sabes donde se encuentra el príncipe Mustafa?—pregunto la morena de tres años mientras se inclinaba hacia la sultana—.
—Sultana Marina, mi hijo Mustafa está en el patio principal si quieres puedes ir a jugar con el—menciona con una sonrisa en su cara mientras se inclinaba para donde Marina—.
—Gracias—mencionó la pequeña para dirigirse así donde se encontraba su amigo el príncipe Mustafa el cual le llevaba 3 años adelantados a la pequeña morena—
Marina comenzó a caminar hasta el patio principal para poder encontrar a su amigo, esta cuando llegó al patio sintió unos brazos intentando cargarla.
—Marina que bueno que viniste a aquí a jugar conmigo— Dice el pequeño Mustafa intentando cargar a Marina es sus brazos—.
—Si estoy muy contenta Mustafa digo príncipe —dice Marina saliendo de los brazos de Mustafa para inclinarse, ya que el sultán dijo que tenía que hacer eso y ella le tomó mucho cariño a ese señor calvo—
—Sabes que cuando no hay nadie me puedes llamar Mustafa, tranquila si —dice Mustafa subiendo la cabeza de la morena mientras se acercaba a abrazarla—.
—Claro Mustafa —dice Marina sonriendo y atrayendo a Mustafa con sus manos para jugar—.
El tiempo pasa y para estos dos niños era como si el tiempo se detuviera, entre risas de inocencia y alagos de cariño se trataban estos pero lo que ellos no saben es lo que los espera en el futuro.
✩
El sultán comenzó a caminar adelante Marina ya que este salió de una pequeña reunión y quería pasar tiempo con su "hija".
Cuando pasaban por ahí pudieron ver a las nuevas chicas que vinieron, todo estaba normal hasta qué...
—¡Sultán Suleiman!—menciono una chica de pelo rojo intenso llamada Hurren una nueva concubina para el sultán—.
Los dos se detuvieron y se quedaron viendo a la chica hasta que ella se desmaya, el sultán lo sostuvo sobre sus brazos para que no se callera.
Después de todo ese problema, el sultán y Marina se dirigieron hasta los aposentos del sultán.
—¡Sultan! —dice Marina para caer en los brazos de el sultán—.
—Marina mi querida hija como te fue el día de hoy —dice el sultán poniendo a Marina en el regazo de el —.
— Estaba jugando con el príncipe Mustafa, señor — decía Marina con un brillo en sus ojos—.
— Qué bueno —dice dándole palmadas en la cabeza—.
Después de un rato llego Ibrahim y Marina se tuvo que ir, esta comenzó a dirigirse a donde están las nuevas ya que le dio pena que se desmaya pero en realidad ella lo que quería es que alguien jugara con ella.
Esta la vio y se sentó al lado de ella.
—Hola?—pregunta Hurren con un poco de confusión—.
—Hola soy Marina, me dicen que soy la sultana de la estrella bueno eso lo dijo mi papá el sultán, oye quieres jugar conmigo? —dice eylin a recostándose en Hurren—.
—Claro sultana —dice Hurren para cargar a Marina en sus brazos—.
—Tienes un pelo muy lindo—Dice eylin mientras topaba el pelo de Hurren mientras está la llevaba al patio—
—Y usted también sultán y un color de piel muy bonito—dice mientras llegamos al patio— que tal si jugamos las atrapadas?
—Y cómo se juega eso?—mencionó Marina—.
—Tú tienes que correr y si te atrapo pierdes—dice Hurren con una sonrisa para comenzar a correr—.
Marina comenzó a correr para intentar atrapar a Hurren la cual no estaba corriendo solo estaba trotando.
—¡Te atrape! —dice marina topándole la pierna a Hurren—.
—Qué rápida eres—dice Hurren fingiendo tristeza mientras miraba a Marina—.
Esta jugaron por un tiempo hasta que a Marina la tuvieron que llevar ya que era la hora de la cena.
Si ella supiera que este es el inicio de un lindo infierno en el cielo