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Los días en Madrid fueron alucinantes pero hoy era el día.
Hoy era el día que se casaban Sira y Ferrán.
El día que tanto esperábamos.

— vamos amor! Que solo falta una hora y media para la ceremonia!! Que te queda?
Llevo media hora listo!

— ya salgo, me falta el último retoque y ya.

— más te vale

A los 5 minutos salí del baño.
Llevaba un vestido corto verde, con unos tacones dorados, un bolso y joyería del mismo color.
En el maquillaje llevaba algo sencillo, como siempre, no necesitaba nada más, me veía bien.
Y en el pelo llevaba el pelo liso con ondas.

— dios mío cariño, estás preciosa

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— dios mío cariño, estás preciosa. Y mira que ya te había visto con el vestido, pero con todo puesto... Estás tremenda

— Pablo tío no te pases, voy bastante normalita. Tu si que vas guapo

Iba con un traje negro, una camisa blanca y una corbata verde del color de mi vestido.
Unos zapatos negros y el pelo lleno de gomina.
Iba perfecto.

— no te pases guapa

Me acerqué a él y le dí un beso

— nos vamos??— digo

— sí

Salimos de la casa y fuimos hasta el coche de Pablo.
Entramos y pusimos el Maps para que nos llevara a la iglesia donde iba a ser la misa.
Supuestamente nos marcaba 20 minutos así que Pablo arrancó el coche y fuimos hasta la dirección que nos mandaba.

— sabes que con ese vestido te va a ver balde y se va a poner nervioso.
Al final le voy a tener que pegar una hostia como miré de más — dice sin quitar la mirada de la carretera pero con la mandíbula apretada.

— no Pablo no, Balde no haría eso

— no vaya.
Martina, le conozco mejor que tú y sé que lo va a hacer. Te hace un culazo y al final le voy a meter una hostia como miré mucho a mi futura mujer — dice tocando mi anillo

— tranquilo, yo te quiero a ti

— está bien

Después de pasar un rato hablando sobre todo llegamos a la iglesia.
Era muy bonita.
Faltaban 20 minutos para que empezara así que decidimos saludar a todos y sentarnos en nuestros sitios asignados.
Se pasó rápido porque cuando nos quisimos dar cuenta ya estaba Ferrán en el altar y empezaba a sonar la típica música de las bodas.
Se abrieron las puertas y pude ver a Sira con su magnífico vestido agarrada de si padre.
Se la veía muy nerviosa.
Pero iba guapísima
Ferrán la miraba super feliz.
Cuando pasó por al lado nuestra la susurramos "guapa" y ella nos sonrió.
Llegó al altar y el cura dijo todo el testamento ese tan aburrido pero a la vez tan emocionante.

— me aburro — me susurra Pablo

— Pablo cállate, se está casando un amigo tuyo y tu aburrido

— ya esq...

Amor entre partidos || Pablo Gavi ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora