Amor entre partidos || Pablo Gavi ||

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Unas semanas más tardes

La casa nos gustó a los dos así que rápidamente nos pusimos manos a la obra para tenerla rápido y poder vivir ya allí.
Estábamos felices porque mañana nos íbamos a casar.
Además, con la casa íbamos super rápido, somos los dos muy cabezones pero nos gustaba casi las mismas cosas (cosa que agradezco).
Ahora me encontraba con Sira, Sofía, Aurora y Ana en mi nueva casa.

—estoy super nerviosa — digo

— tía tranquila, todo va a salir bien. Ya verás — me dijo Aurora mientras me daba un abrazo.

Yo asentí agradeciendoselo y me fui a la piscina. Hacía mucha calor y los nervios no ayudaban para nada.
Después de mí, vinieron todas las chicas para acompañarme menos Sira que se quedó en una tumbona.
Estaba embarazada, nos los había estado escondiendo mucho tiempo, pero eso ya no sé podía más ya que se la notaba un montón y nos lo dijo.
Estaba de 6 meses, y aunque parezca raro la barriga se la empezó a notar hace relativamente poco.

Oímos unas llaves así que supuse que Pablo había llegado del entrero, pero lo que no sabía era que también venían todos los chicos.

— holaa holaaa— dicen ellos saludando

— holaa — decimos

— hemos aprovechado ya que estabais juntas y podemos cenar en casa— dice Pablo — pero no hasta muy tarde porque  mañana es nuestro día — dice sonriendome

Yo le miré y sonreí nerviosa.
Al final terminamos aceptando todos.
Así que nos salimos de la piscina y comenzamos a hacer la cena.
Hablamos un rato mientras que cenábamos hasta que ya eran las 12 y se despidieron de nosotros para irse a su casa.

Pablo y yo recogimos todo y cuando terminamos nos metimos a la cama para dormir.

— que tal estas??— dice sonriendo

— muy nerviosa

— porque amor?

— y si me dejas plantada porque no te quieres casar de repente?

— no digas tonterías, eres la mejor persona que he conocido. Nunca te voy a dejar plantada.
Me encanta que en estos años hayamos formado todo esto nosotros dos solitos, y estoy seguro que esto va a durar mucho tiempo.
Además falta lo mejor — dice cogiendo mi cara y besando mis labios

— te quiero muchísimo Pablo

— y yo a tí Martína.

Después de esa charla tan emotiva, nos abrazamos los dos y nos quedamos dormidos.

  •••

Era hoy, hoy era el día más especial y el que más queríamos que llegara a nuestras vidas.
NUESTRA BODA.
Solo dormí 6 horas pero me daba igual.
Pablo ya no estaba conmigo, no podía verme, daba mala suerte.
Habia quedado en media hora con las estilistas.
Así que me levanté rapidísimo y me fui a duchar.
Cuando terminé justamente estaban llamando al timbre mis amigas.
Las abrí y pude ver unos albornoces rosas que ponían " TEAM NOVIA".
Yo me reí y las dejé pasar.
Después de un rato felicitándome y volviendose locas, llamaron al timbre otra vez, era mi madre, mi hermana y las estilistas.
Las dejé pasar con una sonrisa y se pusieron manos a la obra.
Mientras que mis amigas se ponían sus vestidos (no sin antes habernos echo una foto todas con nuestros albornoces) yo me maquillaba y me peinaban.
La boda era a las 12 y ya eran las 10 de la mañana, así que teníamos que darnos prisa.
Las ví arregladas y se me congeló la mirada, iban preciosas.
Sira de azul, Sofía de rosa, Aurora de verde y ana de amarillo.
Parecían el arcoiris.
Cuando llegó mi turno de ponerme el vestido, todos se quedaron mirando.
Era un momento precioso.
Me miré al espejo y me quedé boquiabierta, me encantaba como iba, al igual que a todas las que estábamos en mi habitación.