No correspondido 1 | Stiles Stilinski

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Me ponía nerviosa al saber que lo vería en una fiesta, o cuando me mandaba un mensaje, claramente producto de mi enamoramiento hacia el.

A veces me hacía pensar que era recíproco, pero luego la mayoría del tiempo sabía que era unilateral. No lo culpaba, nunca pude ser honesta con el, pero...¿como podría? No es como que vas contándole al amor de tu vida que tan jodida estás.

—Rose, entonces ¿vienes o no?— Mi amiga Lydia me pregunta.

—Perdón, claro, solo mándame la ubicación y la hora.—De nuevo nervios, sabía que Stiles estaría ahí.

—Ok, te veo al rato.—se despide de mi y se va caminando hacia su salón.

Volteo a ver a Lydia, con su cabello pelirrojo fresa, el como caminaba y simplemente la gente volteaba, así de hermosa es Lydia.

Oh claro, y no hacía falta decir que media escuela está enamorada de ella, incluyendo al chico de mis sueños, no puedo culparlo, Lydia es todo lo que nunca podré ser.

Camino hacia mi salón, tratando de entender por lo menos algo de la clase, pero es como si las palabras estuvieran en otro idioma.

Al fin es hora de la salida, después de tanto quemarme el cerebro tratando de resolver unas ecuaciones que parecen jeroglíficos, camino con mi bolsa sin detenerme en mi casillero, porque solamente ya quería irme de aquí.

Las horas pasan y recuerdo que tengo que arreglarme para la fiesta, suelto un suspiro de cansancio y me levanto del piso, el cual estaba muy cómodo debo decir.

Veo mi clóset, con la cabeza de lado, luego el otro lado, ya que no tengo idea de que ponerme.

Me quejo una vez más con un suspiro, ni buena en la moda puedo ser, así que simplemente agarro lo que siempre utilizo en fiestas.

Me miro en el espejo y niego con la cabeza, ¿quien mierda gustaría de mi? ¿Quien si quiera voltearía a verme?

Me maquillo lo más rápido que puedo, tratando de tapar cada imperfección, cada detalle que no me gusta, haciendo mis labios más grandes y con color.

Me apresuro a llegar a la fiesta, donde parece que todo el pueblo está, bajo de mi coche después de ponerle seguro.

Con mi mirada busco a alguien que conozca, y no necesito buscar mas cuando tengo a Lydia agarrando mi brazo y sonriendo.

—¡Viniste!— lo dice con un tono animado, así que simplemente le sonrió de vuelta

Me jala de la mano y llegamos con su grupito, siento que mi corazón se acelera, y mis labios se resecan, Stiles está sentado ahí con Scott hablando de algo que mis oídos no captan por prestarle atención a él.

—Rose llegó— Lydia le dice a todos y voltean a verme.

Me siento un poco incomoda por las miradas pero sonrió, inmediatamente Malia agarra mi mano para que me siente a su lado, todos me saludan con la mano o solo con la cabeza asintiendo.

Nos pasamos un rato bebiendo, refresco porque digan no al alcohol, luego otro rato bailando.

No creí que esta noche me la iba a pasar bien, todo este rato tuve una sensación de que algo malo iba a pasar, me dolía el pecho, pero es sólo mi ansiedad como siempre.

Todo está yendo de maravilla, o eso creo hasta que volteo para decirle algo a Lydia.

Stiles y Lydia se están besando, mi corazón se detiene y podría jurar que escuche como se rompe, mis ojos empiezan a arder, y no puedo decir nada.

Parecen almas gemelas, la luz de la fiesta pasa por sus rostros, mientras ellos se aferran uno al otro, como si sus cuerpos pidieran calor, como si sus corazones se conectaran.

Trato de contener las lagrimas, volteándome y le sonrió a Malia

—Tengo que ir al baño— ella asiente mientras sigue platicando con Scott

Camino primero lento, después cuando estoy alejada, mis pasos se vuelven rápidos, llego a mi coche y abro la puerta, dejando que al fin me derrumbe en mi coche.

Mis sollozos solo llenan este silencio en mi coche, no se por que me duele tanto, yo sabía que nunca tuve una oportunidad, pero aún así había un poco de esperanza, tal vez todo fue producto de mi imaginación.

Me sobresalto cuando alguien toca mi ventana, me limpio las lagrimas y volteo a ver quien es, mi corazón se estruja cuando es Stiles.

Me muerdo el labio y quito el seguro, a lo que el camina hacia la puerta del pasajero, sentándose al lado mío

—Te desapareciste, Malia dijo que fuiste al baño, pero Lydia no te vio ahí, entonces todos nos pusimos a buscarte— su respiración es agitada, como si hubiera estado corriendo, y trata de verme a los ojos

—Perdón, solo no me sentía cómoda en la fiesta— trato de sonar convincente sin mirarlo a los ojos

Lo que me toma desprevenida es cuando toma mi mano, y me jala hacia el, abrazándome y poniendo su nariz en mi cabeza

—Está bien, simplemente nos asustaste— me acaricia la espalda y yo solo trato de no llorar

—Perdón.— murmuro y lo abrazo.

Puedo sentir como respira, como inhale el olor de mi shampoo, y yo simplemente escondo mi rostro en su cuello.

One shot| Teen wolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora