One shot| Teen wolf

Se acabo | Peter Hale

Desde hace unos días notó a Peter distante, al principio pensé que era por lo de Derek. Pero desde que volvimos de Mexico, sigue igual o peor de distante. Así que descarte esa opción.

Se que a Peter siempre lo verán como enemigo, pero yo siempre lo veré como mi héroe. El me salvo de la oscuridad y de los pensamientos negativos que tenia, y me da miedo perderlo.
Tal vez es mi culpa que el este así, se que no soy perfecta. Tengo muchas cicatrices, como físicamente e internamente.
Sabia que el se cansaría de mi, pero jamás pensé que seria tan pronto.

—¿Señorita?— el doctor me saca de mis pensamientos.

—Perdón me quede pensado, ¿me decía?— el doctor se aclara la garganta y lo que me dice a continuación, me deja muda.

—Lo lamentó mucho, usted tiene cancer pancreático. Lo que le proponemos es que se someta a un tratamiento, para así aumentar sus días de vida.— suelto un sollozo y se que se acabo

—¿Es doloroso?— el alza una ceja no entendiendo lo que quiero preguntar.— El tratamiento ¿es doloroso?—

—No le mentiré, lo es... bastante. Pero aumentaría los días de vida.—

—¿Y si me niego? ¿Cuanto me quedaría de vida?—

—Lamentablemente detectamos el Cáncer muy tarde, está demasiado avanzado. Podrían ser meses, o semanas.— le doy las gracias al doctor, y me voy al departamento que comparto con Peter.

Al llegar al departamento las luces están apagadas, abro la puerta y me encuentro con pétalos y velas haciendo un camino al comedor.

Ahí me encuentro a Peter vestido de traje, y con un ramo de lirios.
Con una sonrisa en la cara, demonios lo extrañare.

—Amada mía, toma asiento.— me mueve la silla y me siento.

Quiero llorar por que no soy suficientemente buena para el, el es perfecto.

—Ok cariño, sabes que amo cocinar pero no hay gas así que pedí comida japonesa. Así que a comer ramen mi amor.— me da un beso y empezamos a comer.

—Peter, ¿me dirás por que hiciste todo esto?— se ahoga con el fideo y empieza a toser, le doy agua y palmadas en la espalda.

—Siempre eres tan impaciente amor, pero así te amo.— se pone de rodillas y saca una cajita de su saco.

—Pedro, ¿que haces?— le pregunto, espero que no sea lo que creo que es.

—Maria se que nuestra relación no es como la de los demás, tú eres demasiado joven y yo soy un anciano a tu lado. Se que yo soy el malo y tú eres la buena, se que tú eres el sol y yo la luna. Se que tú eres luz y yo oscuridad, pero donde hay oscuridad hay luz, donde está la luna está el sol. Donde hay mal existe el bien, por que tú me complementas quiero pedirte que seas mi esposa.— para la primera letra que salió de su boca, yo ya estaba llorando.

—Peter, yo... no... lo siento. Pero no estoy lista para comprometerme. Se feliz Peter encuentra a alguien que te ame, ten una familia. Esa persona ideal no soy yo.— tomo mis cosas y decido que es hora de irme, escucho el sollozo de Peter detrás de mi. Me rompe el corazón rompérselo.

•UN MES DESPUÉS•

Cada día estoy más débil, se que es cuestión de tiempo para que esto se acabe.

Alguien toca la puerta del cuarto de hotel donde me estoy quedando, me paro y abro.

Peter empapado hasta los pies, con lágrimas en los ojos es lo que mis ojos ven.