Puppy gyu || Beomgyu harem ✓

Woof

-Buenos días bebés.

Los mininos despertaron al escuchar la voz de su dueño que entraba a la habitación propia de los cuatro. El humano abrió las ventanas para así hacerlos despertar, maullaron molestos por esto.

Niki bostezó y los miró, estaban hechos bola unos sobre otros mientras dormían plácidamente pero ahora que la luz entraba estaban molestos.

-Despierten para que desayunen y estén listos, hoy llega Sunghoon y dijo que traía una sorpresa.

El mayor salió de la habitación y fue momento para que todos despertaran, transformandose para más comodidad.

-Así que una sorpresa. - exclamó sonriente Yeonjun yendo por su mejor ropa para la ocasión -

-La última sorpresa que trajo fue el mejor pastel de carne que he comido en toda mi vida. - dijo con felicidad Hueningkai poniéndose sus pantalones, no les importaba verse desnudos, ya se conocían lo suficiente, a demás, son solo niños a penas cumplían 9 añitos -

-Espero que sea un filete, o pescado frito. - comentó Taehyun saboreandose mientras pensaba en los alimentos, los cuatro asintieron -

-Pero solo quiere ganar nuestro cariño porque se va a quedar a vivir aquí, ya verán que cuando tenga confianza nos va a traer pero cubetazos de agua. - exclamó Soobin como siempre pesimista, eso les bajó los ánimos -

-Claro que no, Sunghoon-hyung no es así. - se negó Hueningkai mirando feo al gato blanco quien negó de lado a lado -

Ellos querían mucho al novio de su dueño pero no querían que viviera con ellos, no recordando las veces que hacían mucho ruido cuando se quedaba a dormir en la habitación de Niki, les molestaba escuchar como se movía la cama y golpeaba la pared, robándose sus sueños, pensaban en porqué no simplemente Sunghoon dormía en la habitación de invitados. En fin.

Salieron de la habitación una vez se acicalaron entre sí y ya estaban limpios y perfumados, fueron a la cocina donde los esperaba Niki quien sirvió en sus platos su amada comida para gatos, comieron gustosos. A los segundos el timbre sonó y el humano se apresuró a ir a abrir.

-Hoon-hyung, me alegro de verte. - saludo abrazando a su novio el menor, Sunghoon sonrió y al separarse ambos entraron al departamento -

-Hola niños, se ven bonitos con sus trajecitos. - saludó el mayor a los gatos, casi siempre usaban ropas en conjunto para verse más lindos - Les traje pollo asado para la comida. - dijo con una sonrisa enseñando la bolsa con la comida mencionada -

-Tú siempre consintiendo a mis bebés con sorpresas. - dijo con una sonrisa el rubio besando la mejilla de Sunghoon quien sonrió -

-Pero esta no es la sorpresa, se van a sorprender de verdad, Beomgyu-nie, sal querido.

Los cuatro miraron con curiosidad la mochila que Sunghoon señalaba, unos segundos se tardó el pequeño perrito en salir con timidez mirándolos a todos para después ocultarse detrás de su dueño. Niki jadeó de la sorpresa.

-Sunghoon, no me dijiste que tenías un perrito. - dijo estupefacto el humano menor, el mayor sonrió y cargó en sus brazos al cachorro de Golden retriever -

-Sí, no lo creía necesario porque sé que eres un chico de gatos, pero lo adopté hace un mes porque era de la calle, y no tengo a nadie quien lo cuide, espero no sea un problema que lo traiga conmigo.

Niki miró a sus gatos quienes estaban atentos mirando al perrito quien se ocultaba de ellos entre los brazos de Sunghoon. Suspiró, él nunca se negaría a ningún animalito, y sus bebés no eran tan malos como para rechazar una nueva compañía.

-Está bien Hyung, claro que se puede quedar, no es problema, ¿Verdad chicos?. - los mayores miraron a los gatos quien asintieron al instante, emocionados de tener un nuevo compañero -

-¿Escuchaste Beom-ie?, Tendrás nuevos amigos. - dijo el mayor haciendo que el perro lo mire y este solo bajó la mirada apenado - También es híbrido pero es un poco tímido, anda Beomgyu, transformate para que saludes.

El perrito lo dudó unos segundos pero finalmente se transformó, pegándose al pecho de Sunghoon para que no lo miren, el mayor rió y lo meció con suavidad para tranquilizarlo. Cuando levantó su mirada los cuatro gatos fueron flechados por la belleza de aquel híbrido de dorados cabellos el cual huía de sus miradas con pena.

-¿Cuántos años tiene?. - preguntó Niki jugueteando con las mejillas del pequeño quien lo miró con sus ojitos brillantes -

-Tiene 7, pero aún está un poco pequeño para su edad, saluda Beom-ie.

-... Ho-Hola. - exclamó bajito con pena para después ocultar su rostro en el pecho de Sunghoon, los humanos rieron -

-Bebés, saluden a Beomgyu. - pidió Niki señalando al pequeño y los gatitos corrieron para acercarse al cachorro quien los miró con curiosidad -

-Hola Beomgyu. - saludaron las unísono y Beomgyu agitó levemente su mano como saludo, Hueningkai tomó su manita -

-¿Quieres ser nuestro amigo?. - preguntó el gato de manchas café, los ojitos de Beomgyu brillaron y su colita se movió de lado a lado -

-S-Si, ¡Sí!.

Sunghoon dejó en el piso al perrito y este abrazó su pierna aún con un poco de timidez.

-Ve a jugar con ellos Beomgyu. - pidió Sunghoon acariciando la rubia cabellera del perrito quien poco a poco se soltó de la pierna del mayor -

-¡Vamos!.

Los cuatro llevaron a Beomgyu con ellos a su cuarto lleno de juguetes y torres de rascadores donde les gustaba jugar.

Niki y Sunghoon fueron juntos al sillón donde se abrazaron con cariño viendo a la nada.

-¿Tus gatos están castrados?. - preguntó Sunghoon de la nada confundiendo a Niki quien rió por la repentina pregunta -

-No, ¿Por qué?.

-Porque Beomgyu es un doncel.

-¿Y eso qué significa?.

-Que si se enrrolla con otro híbrido puede quedar embarazado, por eso estaba en la calle, porque sus dueños no lo querían por eso.

-Oh... Pues aún son bebés, no creo que hagan esas cosas.

-Bueno eso espero, solo... Hay que mantenerlos con una pequeña distancia en caso de eso.

Mientras ellos hablaban, los cuatro gatos se dedicaron a olfatear discretamente a Beomgyu, sintiendo el peculiar aroma que indicaba la fertilidad del perrito a pesar de aún ser un bebé, eso los hizo sonreír y pegarse más a él con cariño.

Esos gatitos eran un poco traviesos.