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Hyunjin y Minho observaron en silencio como el chico rizado se pegaba todo lo posible a Chan, queriendo esconderse de ambos chicos.

"I-innie no quiere ver a Hyunnie..." Le susurró a Chan, a pesar de ser pequeño aún recordaba como lloró durante casi una hora por la poca amabilidad que Hyunjin le había mostrado.

Chan chasqueó la lengua y pasó sus brazos pasando por el cuello de su hermano menor, Jeongin se escondió en el pecho del rubio.

"Esto es una pérdida de tiempo." Hyunjin se sentó en el sofá de la sala, a pesar no haber recibido el permiso de Chan para hacerlo. Sacó el teléfono del bolsillo y empezó a jugar con su teléfono bajo la mirada de Chan y Minho.

Jeongin aún mantenía su rostro en el pecho de su hermano mayor.

Minho y Chan se miraron entre sí, el rubio en un movimiento separó a su hermano de él y lo acompañó a sentarse en el sofá individual de la sala. Jeongin acomodó sus piernas y se encogió en el sofá sin quitar el puchero de sus labios, mientras Chan se agachó a su altura y tomó sus manos.

"Minho y yo iremos un momento a la cocina a charlar, te traeré un batido de chocolate con galletas, ¿Vale?" Jeongin soltó un pequeño gimoteo pero aceptó.

Chan se levantó y con solo hacer un gesto con la cabeza Minho ya le estaba siguiendo hacia la cocina del apartamento. La sala se quedó en silencio. Jeongin, cada cierto tiempo, observaba a Hyunjin quien no apartaba su mirada del teléfono, sus manitas se refugiaron entre las mangas de su suéter y así rascó su nariz dejándola un poco rojiza.

"Deja de mirarme." Mencionó Hyunjin después de estar sintiendo esa mirada zorruna encima de él durante casi treinta segundos. Jeongin obedeció, con sus manos se tapó los ojos y aquello hizo reír a Hyunjin "Bastaba con que mirases a otro lado, Jeongin."

"H-hmm..." Jeongin destapó sus ojos y observó al castaño, Hyunjin sonreía burlón pero a pesar de eso las arrugas de sus ojos estaban ahí. El rizado también sonrió mostrando sus hoyuelos, herencia de su madre.

Quizá el ambiente no estaba tan tenso ahora.

Hyunjin, con toda la comodidad del mundo, se acostó en el sofá boca arriba y pasó sus brazos por debajo de la cabeza. Jeongin ladeó un poquito la cabeza, como lo haría un pequeño cachorro, al ver a Hyunjin empezar a silbar.

El menor, completamente curioso, llevó su mirada bizca hacia sus labios los cuales los había puesto como si fueran morritos. Intentó silbar, como Hyunjin lo hacía, pero a él solo le salían pedorretas y saliva.

"Tienes que doblar tu lengua." Hyunjin tenía la mirada sobre Jeongin, el menor asintió ante lo dicho por el castaño más no logró silbar pero sí consiguió hacer reír a Hyunjin en más de una ocasión "Definitivamente silbar no es lo tuyo."

Cuando Hyunjin terminó de hablar Minho y Chab estaba volviendo de la cocina, el rubio tenía un paquete de galletas en su mano y un vaso con batido de chocolate en otro.

"¡Batido para Innie!" Jeongin chilló emocionado y alzó los brazos hacia Chan pidiendo por su comida.

"Calma Jeongin, o todo se caerá por tu ropa." Chan se acercó a Jeongin y dejó que el menor tomase del batido por la pajita de este "Despacio."

El menor obedeció y bajó el ritmo de succión.

Minho, por su lado, se sentó a un lado de Hyunjin y le dio un pequeño zape en la frente a su amigo el cual frunció el ceño.

"¿Cuál es tu problema?" Hyunjin gruñó ante el golpe de su amigo.

"¿De dónde sacas tanta confianza? Este no es nuestro apartamento."

"Pues-" Hyunjin cerró el pico cuando se escuchó un ligero silbido en la sala, el castaño dirigió su mirada hasta Jeongin quien mantenía los labios hechos morritos con partes manchadas de chocolate "¡Eso es Jeongin!"

El menciono soltó una risita y seguidamente volvió a silbar, tal y como Hyunjin le había dicho que tenía que hacer.

"Eres un chico muy inteligente, Innie." Chan coronó el cabello rizado de su hermano con un bonito beso, Jeongin volvió a beber de su pajita.

"Hyunnie enseño a Iinnie." Dijo Jeongin después de comerse la galleta que le había ofrecido Chan.

"Vaya... Entonces creo que esa es su manera de disculparse contigo." Chan sonrió y no pudo enviar reír al ver el ceño fruncido de Hyunjin. Internamente el rubio agradecía porque Hyunjin no hiciese ningún comentario hiriente sobre el comportamiento de Jeongin.

Su hermano era lo más sagrado para él, nunca dejaría que nadie le hiciera daño.

"Bien hecho." Murmuró Minho a Hyunjin el cual tan solo cerró los ojos y soltó un chasquido.

"Cállate Lee, no me dejas oír como Jeongin silba." Respondió en voz alta, el rizado sonrió ante eso y, de nuevo, empezó a silbar.

ᘍ   છ   ᯇ   𝗟𝗜𝗧𝗧𝗟𝗘 𝗥𝗔𝗜𝗡𝗕𝗢𝗪𝗦  ︵ㅤ.  ( 𝓱𝓳 )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora