Bnha boys x Male Reader

bakugo katsuki

Advertencias: Lector autista, ataque de pánico, mención de temas delicados.

Aclaración: no soy psicóloga, pero me informe lo más que pude para llevar a cabo este capítulo, no tengo la intención de ofender a nadie, si hay algún error no duden en avisarme y lo voy a corregir. Por favor no insultarme si me equivoqué en algo.

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Te encontrabas fuera del edificio donde trabajaba Mitsuki. ¿Porque?, Porque su mamá había olvidado su almuerzo y llaves, y le había pedido a bakugo que pase por la oficina y se las lleve.
Bakugo te había dicho que aguardes afuera, que sería rápido, porque si su madre te veía empezaria a charlar contigo y tu novio quería irse lo más rápido posible a casa para mirar la película que les había quedado pendiente.

Apoyado en un muro, mirando tus pies y aveces haciendo pequeños saltitos esperabas a tu novio.

Oye tú - te giraste a la dirrección de dónde venía esa voz.

Mierda.

Cuando tú y tu pareja llegaron al edificio, un indigente los quedó mirando, se notaba a kilómetros que el hombre estaba ebrio o drogado, quizás ambos. No le diste importancia porque creías que si no lo mirabas no te notaría. No pensaste que cruzaría de calle para acercarse a ti.

No es que fueras clasista, te gustaba ayudar a la gente de bajos recursos, pero el hombre tenía fama de ser violento, era mejor evitar problemas.

Si señor? - dijiste intentando ser lo más educado posible, la gente bajo los efectos de sustancias solía ser muy impredecible.

Tu...tu y el otro chico..el que entró hace un rato al edificio..son novios - Te pusiste muy nervioso, recordaste que antes de entrar, katsuki te había dado un pico, además llegaron de la mano.

La gente como tú me da asco - dijo en hombre acercándose a ti.

Tomaste distancia.

Señor, alejese de mi, en ningún momento yo le falte el respeto a usted ni hice algo q lo molestará, fue usted quien se acercó en primer lugar -

Maricon de mierda, se creen los dueños del mundo cuando en realidad son unos afeminados - tomo fuertemente tu muñeca.

Su mano apretaba la tuya con fuerza mientras intentaba arrastrarte a un callejón, tu forcejeabas y te dolía por la fuerza que el hombre aplicaba en tu mano.

Debías mantenerte calmado, tu quirk se suele descontrolar cuando tienes emociones fuertes o muy negativas.

Te desesperaste al notar no te podías soltar y q el hombre era más fuerte que tú.

Suelteme! Suelteme ahora! - gritaste y empezaste a sentir una fuerte ráfaga de viento correr. Era tu quirk que se estaba descontrolando.

La calma se desvanecio, el hombre no te soltaba y tu quirk estaba por descontrolarse, tu respiración comenzó a agitarse.

La gente pasaba como su nada estuviera sucediendo y evitaba meterse, cobardes.

Eres idiota?! Sueltalo! - escuchaste la voz de tu pareja seguido de una explosión.

El hombre te soltó de golpe y caíste al suelo, hecho un bollito y aturdido, tapando tus oídos con tus manos hechas puños mientras los golpeabas levemente.

Viste a la seguridad del edificio llevarse al hombre y sentiste un par de brazos fuertes rodeandote con firmeza ayudandote a levantarte.

Bakugo te llevo rápidamente a una oficina vacía cercana a la entrada y te sentó en el suelo para ayudarte a calmarte. Pues sabía que no ibas a poder calmar tu ataque de ansiedad si veias que tu quirk se seguía descontrolando.

Shhh, está bien, todo está bien, tú estás bien, si? Lo siento por la explosión, pero debía separarlo de ti, se que estás aturdido, pero no te golpees, aprieta mis manos, está bien? - dijo en un tono sumamente suave y bajito.

Tomo tus manos y con ayuda de su quirk las calentó un poco, para darte calor.

Te sentó en su regazo, con cuidado de asegurarse de que tú mirada siga conectada con la suya.

Escucha, juguemos un juego muy simple, se llama encontrar lo que tu novio te pide, entendiste? Es muy simple, vas a buscar con tu mirada un objeto que cumpla con lo que yo te pido, si no encuentras nada puedes imaginar uno -  ese tono tan cálido te hacía sentir protegido.

Busca un objeto color verde - pasaste tu mirada hasta un cactus decorativo que estaba arriba del escritorio y lo señalaste.

Puedes decirlo en voz alta? - no te queria forzar, quizás en este momento no podías o no querías hablar, además se había encargado de investigar y sabía que las personas autistas podían pasar por momentos en los que se les había muy difícil mantener una comunicación verbal, encontrarse saturado sensorialmente era un ejemplo.

Cactus -

Eso es mi amor, ahora algo que cuando lo escuchas te hace muy feliz-

Tu- bakugo sintió sus mejillas colorearse.

Bien, ahora algo que te guste sentir con tu tacto-

Cosas suaves - katsuki sonrió, tenías una mini obsesión con coleccionar cosas que considerabas suavecitas, el solía regalarte calcetines, bufandas o abrigos hechos de materiales suaves para que puedas agrandar tu colección.

Ahora algo que te guste oler-

Lo pensaste unos segundos - tú

Río y se tranquilizó al ver qué tú también lo hiciste.

Si bien ahora estabas más tranquilo, volvió a empezar el juego de nuevo solo para asegurarse de que te encontrabas completamente bien.

Estaba agradecido de que no se haya desencadenado una crisis, si bien casi sucede, no sucedió. Definitivamente odiaba con todo su ser que tengas crisis, porque te golpeabas intentado regularte, y el no podía permitir que hicieras eso, entonces tenia que acostarte boca arriba en tu cama y tomar tus manos e inmovilizarlas a los lados de tu cabeza. Y tú te retorcias intentando liberarte hasta que te calmabas.

Era horrible, y le dolía el corazón de verte sufrir.

Ahora estaban en la puerta del edificio.

Antes de salir Katsuki te ayudo a colocarte tus audífonos para aislar el sonido, y te dio un barbijo q tenía en su mochila para que no te afecten los olores, ya que eras increíblemente sensible a esos estímulos.

Estabas bastante bien y calmado, pero de igual manera se aseguraba de parar en lugares poco transitados cada cierto tiempo, pues no quería que ver el ajetreo de la calle te vuelva a hacer colapsar.

Cuando llegaron a su nidito de amor, como llamabas tú a su departamento, se aseguro de traer toda la colección de cosas suavecitas.

Metieron mantas y almohadas dentro del clóset, pusieron una pequeña lámpara, y ubicaron la laptop. Siempre construían sus fuertes de almohadas en su clóset, debido a que era muy espacioso, debido a que era un clóset walk-in.

Tenían la tradición de construir un fuerte cuando podían, meterse ahí, mimarse y luego dormir ahí. Era mucho más comodo de lo que parecía.

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