Reacción

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Reacción de los chicos al ver qué tu quirk te lastima o te pasa factura por usarlo demasiado.

Izuku midoriya.

Tu quirk consistía en manipular las ondas sonoras, maximizando sonidos, apaciguandolos, agudizandolos y hasta creando ondas de choque con ellas.
Un quirk genial según la percepción de izuku, pero claro, como todo quirk, tenía sus desventajas. Luego de un uso excesivo de tu kosei, tus oídos quedaban muy sensibles, y el más mínimo ruido era capaz de molestarte.

Salio del baño luego de una larga y cálida ducha después de entrenar. Se dirigió a la sala donde supuestamente lo esperabas con palomitas de maíz y una película listas. Estaba lloviendo, y era viernes, lo que significaba "noche de zuzu y gatito" como se habían apodado mutuamente.

Cuando llegó a la sala y noto que no había nada preparado y tú tampoco te encontrabas cerca se desconcertó.

Camino hasta la habitación que compartían y al asomarse por el marco de la puerta noto que estabas hecho on ovillito en el suelo, con tu cabeza entre tus piernas mientras cubrías tus oídos.

Antes de que el peliverde pudiera procesar algo, un fuerte rayo producto del diluvio que se producía afuera corto el silencio que había.

Todo se aclaró en su mente en ese momento.

Habían entrenado bastante el día de hoy, pero según tú, no sentías ninguna molestia. El ruido de la tormenta seguramente rompió tu coraza de chico fuerte.

Antes de acercarse a ti, tomo tus audífonos, esos que izuku te había regalado luego de verte tener un ataque de pánico gracias a los ruidos que te perturbaban luego de usar tu kosei. Estos tenian aislación de los sonidos exteriores, por lo cual te eran sumamente útiles.

Los coloco con delicadeza sobre sus oídos.

Tomo una manta que había sobre su cama y se dirigió hacia ti para luego cargarte de forma nupcial y dirigirse hacia el armario.

El armario era el lugar de la casa donde menos se oían los ruidos exteriores.

Te sentó en su regazo y comenzó a meserte mientras limpiaba las lágrimas de tus mejillas.

Los besitos cálidos de izuku calmaron en parte tu malestar.

Todoroki Shoto.

No sabía que demonios hacer para bajar tu fiebre.

Estabas ardiendo, literalmente.

Tenías el quirk de crear fuego y controlarlo, casi como su hermano Dabi, solo que tus llamas eran de color blanco.

Shoto sabía que cuando usabas demasiado tu quirk te daba fiebre, a el también le pasaba.
Y ambos sabían que gracias a su quirk, podían presentar mas fiebre que una persona común y corriente. Mientras que para otras personas 38 grados era fiebre, para ustedes lo eran 45.

Pero está vez se les había salido de las manos, tenías 60 de fiebre y no bajaba de eso.

Se preocupo muchísimo cuando te vio desmayarte, y cuando su mano contacto tu frente la retiro rápidamente debido a que la alta temperatura le generó un leve escozor.

Bnha boys x Male Reader Donde viven las historias. Descúbrelo ahora