Aprender A Sentir | Fanfic Frey Stein | +18 |

Capítulo 2 - He vuelto a ella

Amelie Stein:

El sonido de la alarma en mis oídos era una tortura. Odiaba levantarme temprano. En especial si es que era para atender una ronda de prensa.

Sí, leyeron bien, otra jodida ronda de prensa.

Sentarme, sonreír y hablar de las cosas más superficiales para contentar a la industria y a mi público.

A los 19 años he logrado formar una importante reputación en la industria de la moda y del espectáculo, y es en estos momentos en donde me arrepiento de mis propias aspiraciones personales.

Joder. Como odio las mañanas.

Una última ronda y volverás a casa junto a tu familia. — Me anima mi conciencia.

Sentía mi cuerpo débil por todo el ajetreo de esta última semana. Estaba harta de las sesiones fotográficas y las pasarelas, sin contar el trabajo por redes sociales o las campañas en donde prestó mi imagen de manera pública.

La semana de la moda era sin lugar a duda una experiencia laboral exhaustiva. Beneficiosa para mi carrera pero no para mi salud.

Quería volver a casa con mamá, papás y hermanos.

Los extrañaba demasiado.

Sabía que se habían mudado a un pueblo llamado Wilson, ubicado en Carolina del Norte. Era un nuevo caso a tratar. Papá Mason me platicó sobre este y sobre el papel que tendría cada integrante de la familia. Al parecer se trata de una especie de secta religiosa que hace uso de la manipulación para tratar abusos sexuales.

Menudos enfermos.

Estaba sumamente emocionada, ya que fingir era especialidad mía. Quería tener un papel importante en el caso. Mi carrera era reflejo de la habilidad que poseía. Me dedicaba a hacer de pantalla para cubrir la reputación de mi familia frente al resto del mundo.

Una familia perfecta. La familia Stein.

Heist, mi hermano mayor descubrió este caso mediante una de las chicas que parecía formar parte de aquel culto. Según él, el nivel de sumisión que presentaba ante la situación era increíble. La chica se negaba a hablar, imposibilitando el acceso a la información requerida por mi hermano.

Conocía a Heist como la palma de mi mano, por lo que puedo afirmar con seguridad que fue aquella sumisión lo que capturó su atención. Sin duda, el que la chica se negara a facilitarnos información sobre un posible caso de trata sexual frustró a mi hermano, el cual no dudó en hablarlo con el resto de la familia.

En menos de una hora mi familia había invertido todo su tiempo en investigar la ubicación, religión y división social de aquel pueblo.

Era interesante y divertido. En más de una ocasión he sido el salvoconducto de mis hermanos. Amo las cámaras tanto como hacer justicia por mis propias manos. Considero que es algo peligroso cometer delitos ante la justicia y al mismo tiempo ser una figura pública. ¿Quién creería que la cara de la industria del modelaje estaría envuelta en crímenes de alto impacto? Nadie. Exacto.

Así funcionamos, cada integrante aportaba seguridad a la familia.

Sin embargo, lo que parecía un plan perfecto, comenzó a pasarnos factura. Mi familia en general llamaba mucho la atención. Las cámaras ya no solo estaban en mí sino también en el resto. A papá Mason le molestó mucho la idea, mientras que mamá estaba encantada con las visitas diarias y las solicitudes que recibían mis hermanos.

Fue gracias a la intercesión de mamá que pude seguir con mi carrera. La decisión de mi mamá obligó a mi padre a tomar medidas. Con ayuda de papá Pierce, papá Mason ideó un plan de división. Cada uno termina un personaje, alimentando la idea de "familia perfecta, no solo frente a la alta sociedad, sino también a las cámaras"