Te conozco?

Capitulo 11

Betty llega a la empresa, junto con todas las chicas del cuartel. Estaba muy triste, es como si de golpe hubiera chocado con la realidad y estaba sufriendo mucho. Sus amigas se dieron cuenta y deseaban ayudarla, asi que iban a hacer todo lo posible para que ella no sufriera más. Empezando por hacer que no tuviera ningún problema con doña Marcela o don Daniel, se terminarían las juntas del cuartel. Platicarian sobre los acontecimientos o chismes mientras iban a la parada del bus, trabajarían codo a codo con ella para que le vaya estupendamente bien y la dejen fija como presidenta de Ecomoda.
Eso lo decidieron el día anterior, cuando hicieron por última vez un 911 y el voto fue unanime. Hasta Inesita quedó sorprendida gratamente por el accionar de las chicas y las felicitó por ser realmente unas grandes amigas para Betty y su bebé.

Betty se asombra de que las chicas se dirigen cada una a sus respectivos escritorios ya que pensaba que irían al baño a platicar sobre la ceremonia, pero no fue así. Eso la hizo poner un poco feliz ante tanta tristeza y fue a su oficina a trabajar, al rato Aura María le avisa que llegó Catalina Ángel y la hace pasar.
Catalina:" Ay Betty, le sienta bien ésta oficina"
Betty:" Gracias doña Catalina, llegó justo a tiempo. Ya están todos reunidos en la sala de juntas, don Mario se tiene que ir rápido"
Catalina:" Si pero dígame en qué me ha metido Betty?"
Betty:" Tiene toda la razón doña Catalina, bienvenida al infierno de Ecomoda"
Le cuenta un poco como fue todo ayer, la gran mayoría lo había hablado pero le faltaba un poco y también le contó sobre las ideas de ella que les gustaron muchísimo. También como se sentía por la ceremonia de hacía unos minutos y ahí se desmoronó. Catalina la ayudó a ir al baño de presidencia y se arregló para ir con ella a enfrentar a los ejecutivos.

En la sala de juntas ya estaban Marcela, Gutiérrez, Mario Calderón, Nicolás y Hugo. Éste último se sentó en la silla que se sienta Betty y se ponen a platicar sobre quién iba a presidir el comité y esas cosas, Marcela siempre atacando a Betty y Mario enojado porque no iba a permitir que trataran mal a la mujer que su hermano amaba, ese mismo día se lo prometió en el cementerio.
Nicolás fue a buscar a Betty y después entraron los 3 a la sala de juntas, Marcela, Hugo y Mario saludan alegremente a Catalina.
Hugo:" Cata divina, me imagino que te habrás enterado de todas las cosas ocurridas aquí? De las aberrantes cosas hechas por el ex presidente y por el absurdo nombramiento. Cómo te parece que ésta Dra, se cree la reina de las guarachas ya que tuvo una transformación" se ríe
Catalina:" Me parece perfecto Hugo, porque fui yo quien la ayudó con su cambio "
Hugo se quedó helado, como el resto de los ejecutivos. Marcela estaba que ardía de bronca, pero pensaba que había sido mejor que Armando no estuviera porque seguro que volvería con ella. Le alegraba pensar que jamás estarían juntos y eso la ponía feliz, hasta que también razonó que ella tampoco y ahí ya no le gustó nada.
Catalina:" Podemos empezar?"
Gutiérrez (mirando a Hugo):" Don Hugo, está sentado en la silla de la dra Pinzón "
Hugo:" Usted me toca y yo lo vuelvo buen mozo a cachetazo."
Betty rodea a Hugo y le dice a Gutiérrez;
Betty:" No se preocupe Dr Gutiérrez, la cabecera de la mesa está donde yo esté sentada. Doña Catalina, Nicolás por favor sientensen aquí " ambos se sientan a los lados de ella y empieza el comité.
Betty les cuenta sobre la estrategia de ventas y luego Marcela pregunta porque ve en la carpeta que no hay bodega en Palm Beach pero si en Miami. Betty le explica que es más económico en ese lugar y sólo tener las tiendas en la otra ciudad. Luego Nicolás les dice que esa bodega tiene un área administrativa y si ellos lo aprueban, alguien deberá hacerse cargo. Lo que a ésto Mario sugiere que vaya Marcela, a ésta no le gusta mucho y él le explica que tampoco es para quedarse definitivamente allí. Si no que pueda organizar todo, dejar una persona a cargo y ella puede ir y venir para controlar todo. Eso la dejó más tranquila, no quería dejar que Betty estuviera manejando su empresa sola. Aunque sabía perfectamente que también era la de Betty, porque esa mañana ya había ido al abogado y había firmado todos los papeles correspondientes a la herencia de don Armando. Legalmente ya era la dueña de las acciones de Ecomoda, del club, del apartamento y del carro. Cómo también de todos los ahorros que Armando tenía en su cuenta bancaria y era mucha plata, ese día se mudaría al apartamento como estaba escrito.
Al salir de la empresa, iría a su casa para recoger lo que más podía en el carro de don Armando y luego al apartamento de él.
Eso ya lo había hablado con don Hermes la otra noche cuando también estuvieron los Mendoza.