no fue planeado ser padre. Cro X Eli (terminada)

37 temp 2 📍

narra Elizabeth

Me desperté  de la siesta sintiendo nerviosismo en mi estómago. Hoy era el día en que Tomás y yo íbamos a cenar en uno de los restaurantes más elegantes de la ciudad.

después de pensar en eso me di cuenta que tenía que ir a bañarme ya antes de que se me haga tarde como siempre. Luego sali del baño ya lista

Me miré en el espejo y suspiré. ¿Qué me ponía? No era muy buena para vestirme elegante, pero sabía que tenía que impresionarlo.

De repente, mi teléfono sonó. Era Tomás.

- Hola mi amor, ¿cómo estás? - preguntó.

- Estoy bien, gracias. ¿Y tú?, seguís en el estadio? -

- sisi acá sigo. Estoy emocionado por esta noche. Escucha, ¿te importaría arreglarte un poco más elegante? Este es un restaurante bastante elegante y quería que estuviéramos a la altura.-

- Claro, no hay problema. -

Colgué el teléfono y comencé a buscar algo bonito en mi armario. Finalmente encontré un vestido que era lo suficientemente elegante para la ocasión.

Un vestido blanco con unos toques dorados lindos, él vestido era ajustado dejando notar mi panza. Toqué mi panza acariciando a mi hijo que estaba ahí adentro.

tocaron la puerta y fui a atender. Ahí estaba el amor de mi vida.

- lista? - me preguntó con su mano en el aire - bueno, listos? - preguntó devuelta mirando a mi panza, con una sonrisa

- estamos listos - agarré su mano mientras que con la otra acariciaba mi panza.

entramos al auto para poder ir al restaurante, sinceramente hace mucho no íbamos a un restaurante. Miraba a Tomás y se veía en serio muy nervioso.

- estás nervioso por los niños? - le pregunté mientras él arranco.

- Los niños? No, sé que están bien en la casa de su tío - respondió con una sonrisa

Cuando llegamos al restaurante, me di cuenta de que Tomás había hecho una gran reserva. Me impresionó lo elegante que era el lugar y me sentí agradecida de haber encontrado el vestido perfecto.

Nos sentamos y ordenamos nuestra comida.

Comimos cosas riquísimas, estoy segura que mi bebé estaba más que agusto por lo que comió. Mientras que tocaba mi panza Tomás agarro mi mano

Después de unos minutos de conversación, Tomás dijo:

- Elizabeth, hay algo que quiero hablar contigo. -

- ¿Qué pasa? - pregunté, sintiéndome algo ansiosa.

- Bueno, como sabes, hemos estado juntos por un tiempo y hemos pasado por mucho juntos. He estado pensando en esto por un tiempo, y quería preguntarte si te gustaría ser mi esposa. -

Me miró directamente a los ojos y esperó mi respuesta. Me sentí abrumada por la emoción. No podía creer que esto estuviera sucediendo. Teníamos un embarazo de 5 meses, 2 niños y ahora Tomás me estaba pidiendo que me casara con él.

- Por supuesto que sí -, dije, con lágrimas en los ojos. - Te amo mucho. -

Él se levantó y se arrodilló frente a mí, sacando un hermoso anillo de su bolsillo.

- Entonces, Elizabeth, ¿quieres ser mi esposa? -

- Sí, sí, sí -, dije, abrazándolo mientras me ponía el anillo en el dedo. Me sentía la mujer más afortunado del mundo.

El resto de la noche pasó en un torbellino de emoción y felicidad. Nos reímos, comimos y disfrutamos de una noche increíble juntos. En ese momento, sentí que nada podía arruinar nuestra felicidad.

Este capítulo fue una de las mejores sorpresas de mi vida. Me sentí muy emocionada y feliz después de que Tomás me pidiera que me casara con él en un restaurante elegante. Nunca olvidaré ese momento por el resto de mi vida.