Cinco

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Boruto

Ovalados, piel blanca y las cimas rosadas.

Cuando el vestido cayó, estas dos masas parecían rebotar.

Abri los ojos de repente, encontrandome con un par de ojos dorados.

Deberia haberme asustado, pero durante mis años en la academia y luego en mis misiones, habia vivido lo mismo.

En mis años alejado de las aldea, extrañaba esa manera extraña que tenia Mitsuki de esperar a que despertara.

Suspiré y me senté en lo que vi era una cama.

-¿Donde estoy?.- le pregunté

-En casa de Jien.

-¿Todo salió bien?.- pregunté preocipado.

¿Como pude desmayarme en medio de una misión?.

-Si, cuando te desmayaste vino la policia y detuvo a todos los involucrados. Zomi y Jien estan en el hospital tratando sus heridas, las cuales fueron leves.

-¿Y Sarada?.

-Ah a ella se le vió las tetas.

-¡Oye!.- otra vez me senti mareado.

El recuerdos de como esa parte de su cuerpo quedó al descubierto frente de mi, aparecia en mi mente.

Suspiré y me dejé caer en la cama, cubriendo mi rostro con la almohada.

-¿Ella está bien?.

-Si, solo la viste tu. Es una lastima que yo estuviera atrás porque...

Le lancé la almohada golpeando su rostro. Me miró confundido.

-¡Te dije que no digas esas cosas!.- grité.

Al parecer el pensó unos segundos y asintió.

-¿Estas celoso?.

-¿Como llegas a esas conclusiones? Claro que no, solo no me gusta que le faltes el respeto, a ella o a cualquiera.

-Ya veo, lo siento. No me di cuenta.

-Lo sé.

-Pero si me doy cuenta de que cualquier situacion sexual, lo minima que sea, te afecta asi. No se si es normal.

Mitsuki hablando de normalidad.

-Es todo muy nuevo para mi, eso es todo.

-Quizás debas acostumbrarte, debe ser muy incomodo para ti.

-Lo es.- bufé.- ¿Como haces tu para estar con mujeres sin sentir que la sangre se te sube a la cabeza?

-Es que la sangre se me baja hasta el pene y..

-Dios.- me levanté de la cama.- Preguntaba como manejas tu cabeza para que eso no te afecte.

Me encogio de hombros.- Solo me dejo llevar por el deseo.

Asentí. Tenia sentido, era como dejarse llevar por el enojo o alegria.

Emociones.

Quizás yo no tenia deseo de hacerlo y por eso no me podia acostumbrar.

Pero...

-¿Puedo contarte algo?.

-Claro.

-Pero no le vayas a decir a nadie.

-Esta bien.

-Cuando comenzamos la mision y Sarada se sentó en mis piernas, algo en mi cuerpo reaccionó.- no podia decir más, me avergonzaba.

Shy - BoruSaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora