Ron & Luna/One-shots (Traducidos)

10-Una buena noche para la fantasía o el amor

                     Por:thafrancakes

A pesar de la oscuridad de la madrugada en el exterior, la cabaña rebosa de luz desde el interior.

Ron se ríe mientras se mueve por el patio delantero, siguiendo el camino designado para no pisar ninguna criatura invisible o juguetes de niños. Puede sentir ojos sobre él, pero en el momento en que mira a la ventana abierta, el pequeño observador se agacha.

Las risitas llenan la noche a su alrededor.

La puerta principal se abre de golpe, y el golpeteo de pequeños pasos corre hacia él; si esto no hubiera sucedido un millón de veces antes, lo más probable es que se hubiera caído de culo. Sin embargo, sabe cómo prepararse y atrapar la bala de cañón de cinco años que se dirige hacia él.

-Oye, ¿no deberías estar en la cama? Son casi las dos de la mañana- pregunta, colocando a la niña en su cadera y comenzando su camino por el camino de nuevo.

-Mamá dijo que podía quedarme despierto si los gnomos decían que estaba bien,- le dice Gaia con naturalidad. Es mucho más pragmática que su madre, pero sus alas de hada y su guardarropa de botas de astronauta la delatan como una Lovegood. El brillante cabello rubio blanquecino tampoco ayuda mucho.

-Por supuesto que lo hizo,- resopla Ron cuando entran. La cabaña es todo Luna. Desde el mural pintado a mano en la pared de criaturas mágicas que ni siquiera puede comenzar a nombrar hasta cómo todos los muebles son de segunda mano y tienen alguna historia de fondo de donde provienen. La mayoría de esas historias de fondo incluyen muerte y fantasmas.

Le recuerda a la Madriguera, pero mejor porque es suya

Patea la puerta detrás de él y escanea la sala de estar en busca de signos de vida. Bueno, vida humana. Ve una pila de Puffskeins en la esquina, vibrando ante la posibilidad de que un nuevo amigo se acuerde de darles de comer.

-¿Donde esta tu mamá?- pregunta mientras de alguna manera se quita la mochila mientras la niña todavía se aferra a él ridículamente fuerte. Está seguro de que le quemará la alfombra alrededor del cuello por lo fuerte que ella lo está agarrando.

Gaia se encoge de hombros, su cabello rubio canoso rizado brilla en las luces de hadas que decoran todo el techo de la habitación. Ella va a ser una Ravenclaw; es obvio. Con Fred, supongo.

-Esperemos. De lo contrario, tendremos que llamar por flu al tío Harry con un caso de personas desaparecidas- dice, haciéndola chillar con más risitas mientras se dirigen a la cocina. -¿Me perdí algo emocionante?

Gaia titubea y él levanta una ceja rojiza. -Rose Malfoy quiere ser mi novia.

Su otra ceja se levanta, y ahora su rostro está lleno de sorpresa. -¿Sí? Espero que le hayas dicho que eres demasiado joven para tener citas.

Gaia se pone todo tipo de rojo y sonrojado. No sabía que a Gaia le gustaban las chicas de esa forma, pero no importa. También le dará un buen grito a cualquiera que tenga un problema con eso.

-Dije que sí,- murmura en su hombro.

-Bien, pero sin besos,- suspira. Esto iba a ser Problemas con P mayúscula cuando llegara a Hogwarts. Pobre McGonagall.

Todo se ve igual que cuando se fue hace dos semanas. La mesa de carnicero de madera todavía no tiene sillas, y todos los manteles individuales y la configuración de la mesa están debajo de ella en lugar de donde deberían estar. Todavía hay platos en el fregadero, limpiándose solos con burbujas moradas.

Los dibujos de Gaia están en cada centímetro del refrigerador en la esquina; ya ni siquiera puede encontrar el mango. Ella lo ayuda en la lucha por abrir la puerta y encontrar una cerveza.