Building A Family From The Ruins (Pacific Rim AU)

-°Austin°-

—¡Geiszler!, ¿se puede saber que demonios estás haciendo? 

Pero el científico no pareció afectado ante la mirada fulminante y el tono completamente enfurecido de su jefe, no quería pensar en eso ahora.  En su lugar sus ojos se encontraron con la expresión confundida de Hermann, quién lo miraba de arriba a abajo, cómo si lo estuviera escaneando, tratando de analizar si aquello en serio estaba pasando.

—Newt... ¿En serio acabas de...?

—No podía dejarlo así. —Cortó, evidentemente sin ganas de discutir el asunto mientras bajaba al niño de sus brazos —Se qué el Mariscal Pentecost comprenderá perfectamente porqué lo hice.

Ese tono sarcástico, esa mirada de burla y triunfo en sus ojos, ese descaro y despreocupación. Stacker deseó con todas sus fuerzas estrangularlo en ese preciso instante por tal insubordinación, pero al final Newt tenía razón, él había hecho exactamente lo mismo con Mako años antes, no tenia derecho a decir nada. Odiaba qué Newt tuviera razón.

—¿Está herido? —Preguntó, a regañadientes, tratando de disipar su molestia como sea que pudiera.

—No, por suerte no. —Aunque el escondite dónde estaba iba a derrumbarse en cualquier momento. Por suerte llegué a tiempo, ¿no, chico?

El niño asintió un par de veces con una ligera sonrisa, evidentemente más calmado y relajado.

—Sí, gracias.

Pentecost regresó su mirada al resto de trabajadores antes de dar una orden con un gesto de su mano mientras soltaba un silbido. Todos supieron perfectamente qué significaba: Stacker se iría, pero el trabajo de recolectar muestras continuaba.

—¡Y no quiero escuchar que hubo problemas! —Añadió, antes de girarse hacía el par de científicos, con la misma expresión sería y fría de siempre —Ustedes dos, al helicóptero, ahora.

Hermann y Newt intercambiaron una mirada de complicidad antes de subir al helicóptero, con Geiszler llevando al niño de la mano. El piloto del helicóptero tan solo le dirigió una mirada de extrañeza a estos dos últimos cuando subieron al transporte, pero no dijo nada; Hermann simplemente se sentó al lado de ellos mientras observaba al menor con curiosidad, Pentecost se sentó frente a ellos, fulminándolos con la mirada. 

—Muy bien, escuchen ustedes dos. Esto es lo qué pasará: Llevaremos al niño al Shatterdome para hacer el papeleo correspondiente y asegurarnos de qué este bien, luego intentaremos contactar con algún familiar suyo, si no tiene lo llevaremos a un orfanato y esa todo, ¿entendido?

—¡¿Qué?! ¿Un orfanato? —El niño dejó escapar un chillido de miedo al decir esto, aferrándose a Newt y agarrando su ropa con fuerza —¡No! ¡No quiero ir ahí!...

—Bien hecho, jefe. Acaba de asustar al niño  —Geiszler abrazó protectoramente al niño. —Gracias.

—Pero si yo no....

—Newton a veces es un idiota, pero esta vez tiene razón. —Añadió Hermann —No es conveniente hablar de eso con el niño aquí. 

—¡Bah, genial! Mis empleados me dan órdenes ahora.

Todos permanecieron en silencio unos minutos  mientras el helicóptero despegaba y se dirigía de vuelta a Hong Kong , con el sonido de las hélices batiendo el aire de forma incesante de fondo.

Stacker seguía callado, mirando por la ventanilla del helicóptero, Hermann permanecía anotando ecuaciones en una pequeña libreta de notas y ambos parecían no tener interés en seguir hablando,  por lo que fue Newt quién decidió romper el silencio.

—¿Y cómo te llamas? 

El menor miró a Newt, ladeando la cabeza cómo si fuera una perrito confundido, cómo si le extrañara qué alguien le hiciera esa pregunta. Sin embargo, no tardó en sonreír  de oreja a oreja, antes de responder.

—....Austin, me llamo Austin.

—Austin, ¿eh?. Buen nombre.

Luego de eso todo se volvió  a sumir en un silencio ligeramente incómodo por varios minutos más, antes de qué Austin fijara su atención en las notas que Hermann estaba haciendo.

—¿Ecuaciones diferenciales?

—Oh, si. Te diste cuenta. —Hermann asintió, ligeramente sorprendido —¿Cómo lo notaste? 

—Bueno... es que mi papá era maestro de matemáticas.

Esta vez Hermann sintió una pizca de genuina tristeza por Austin. Por lo qué dirigió su mirada hacía Newt, pensando en qué iba a pasar con el menor. Newt respondió asintiendo en silencio, sintiéndose exactamente igual que su pareja.

—Bueno... Tu papá crío a un niño muy inteligente —Mencionó, sonriendo reconfortablemente y revolviendo su cabello—Chico listo...

Al azar su vista, se encontró con Newton sonriéndole de forma algo burlona e infantil, evidentemente feliz de que Hermann se encariñara con el niño. Al matemático le molestó aquello, si, pero no podía molestarse con esa sonrisa y esos ojos tan encantadores.

—¿Qué? —Preguntó con un tono molesto, pero ligeramente sonrojado ante las acciones de Newt.

—Oh, nada. Es solo qué luces bastante adorable cuidando niños, Herms.

Gottlieb puso los ojos en blanco mientras suspiraba y apartaba la mirada, avergonzado de que el científico usara ese apodo con él, y justo enfrente de Pentecost.

—Cómo sea, solo estaba siendo amable, nada más. —Aseguró, ocultando lo más posible su rosto poniéndose la capucha de su enorme abrigo.

—Nenas, nenas, las dos son bonitas —Interrumpió Stacker  —Ahora, ¿pueden guardar silencio? 

Los dos se callaron, volviendo a lo suyo mientras Hermann  continuaba haciendo operaciones y cálculos y Newt revisaba las notificaciones de sus redes sociales.

—Je, ¿quién lo diría? Una linda chica acaba de invitarme a salir en facebook.

—Si aceptas no amaneces vivo mañana, Newton. —Gruñó el matemático —Estás advertido.

—Yo también te amo, cariño.

Austin se aclaró la garganta.

—Oigan, el jefe dijo que guardaran silencio.

Está vez, Stacker fue quién sonrió, complacido con la respuesta del menor.