Amor Prohibido

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La mala noticia estoy castigada hasta nuevo aviso, la buena es que no fue por quedar embarazada. Esa noche no hicimos nada.
O eso es lo que te dice
Cállate, déjame confíar solo un poco en él.

-Vamos a una fiesta - habló Laura
-Ya quisiera, pero estoy castigada - le dije
-Y no es la única - dijo Eilidh

-Beatriz, te busca un chico - gritó Kevin. Un chico mulato, con el pelo rizado y ojos cafés, además está bien bueno. En seguida los del salón empezaron a decir que era mi novio.
Me levanté de la mesa y fui a la puerta- Que quieres
-Necesito hablar contigo- el miró por detrás de mí - pero no aquí
-Ven Bryan - salimos del salón y subimos al techo.- que quieres
-Que me ayudes en Historia - lo miré fijamente, iba a hablar pero el siguió - bueno necesito que me ayudes en todas las materias, mi padre va a salir de la cárcel y se va a molestar si salgo mal en los exámenes.
-Está bien
-Por favor, te lo sup...- casi me río - espera dijiste que sí - asentí y el me abrazó
-Ya vale, no me gustan los abrazos -lo separé -en la tarde voy a tu casa- dije y me fuí

Estupendo, cómo vas a ir si estás castigada
Mierda es verdad, ya lo resolveré

                     ***
- Por favor mamá, de verdad que necesito ir a estudiar a casa de ese amigo - estaba intentando convencer a mi madre
-Que no, tu estás castigada, si tienen que estudiar que venga él.
Ahora que hago, no le puedo decir que no puede porque ella le echará al ver que es el chico de la casa de enfrente.
-El tiene un pie fracturado mamá- valla, la verdad es que no sé si eso servirá
Ella iba a negarse de nuevo, así que puse mi cara tierna- de verdad quieres que suspenda una materia solo por qué estoy castigada.

Fue difícil convenserla
Pues claro que sí

-Hola, que bueno que viniste- me saludó la señora, la verdad es que no me parece mala- el está arriba.
Subí las escaleras y toqué su puerta.
-Hey- dijo cuando me abrió- pensé que no ibas a venir
-Estuve a punto de hacerlo- dije y entré con él.
Él se empezó a quitar la camisa que llevaba.
-Pero que haces- me tapé los ojos
-Hay calor- se acercó a mí, yo lo observaba entre los dedos, la verdad era muy díficil quitarle la vista de encima- además no es algo nuevo para ti- se siguió acercando
-Que haces, aléjate - intenté empujarlo pero el lo hizo antes y caí acostada en su cama y el encima de mí, mirándome fijamente.
Concéntrate concéntrate
Tarde, mirada cayó en sus labios y lo bien que me había besado el otro día