XI

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Desde aquella ocasión Build y Bible compartían besos a cada momento del día, al despertar, al desayunar, al estar tranquilos en la sala, al ir a dormir, siempre.
No cabía duda que por esto el más feliz era el mayor, quién realmente sentía que su vida era color rosa, tenía que esperar, sanar el corazón de su amado con dulzura y comprensión, frustración extra no sería bueno para él, mucho menos para el bebé.

Suspiró, adoraba ver aquella barriga cada día mas grande, una parte de su mente se había convencido de ser el padre de la criatura, mientras la otra seguía retorciéndose al saber que era biológicamente parte de Pongtiwat, para su fortuna no había tenido que ver la cara del chico en un buen tiempo, puesto que ahora todos los negocios los hacía Kim, el hombre de mirada fría y pensamiento cruel.

Kim tenía mala fama, no sólo por sus malos ingresos, sino también por estar involucrado con el mercado negro y sus productos, Bible no era detective, no, pero los rumores a voces eran cosa peligrosa, y atando cabos todo tenía sentido, explicaría el exceso de dinero.

—Estás en una nube. — Job entró por la puerta, tenía unas ojeras prominentes debajo de los ojos, Bible salió de su ensoñación. — Pareces feliz

—Tú pareces todo lo contrario. — Rió levemente. — por cierto, la próxima vez, toca la puerta, puedo estar ocupado.

—¿En qué? — Él alzó una ceja, genuinamente curioso, arrojando si largo cuerpo sobre el cómodo sofá. — Dudo encontrarte follando cómo conejo con tu pareja, para eso viven juntos.

—No somos pareja — Se encogió de hombros. — Y dado el caso sólo pondría el seguro, me refiero a otras cosas.

—¿Cómo qué?—

—No sé, somos empresarios, hay que mantener nuestros secretos.— Job se incorporó, serio como nunca.

— Por favor Bible, somos amigos, la única diferencia que hemos tenido son esos  centímetros de altura, que si bien sabes son pocos.—el otro sonrió.

—Por supuesto, en realidad quería hablar contigo sobre una inversión... No me calzan las cuentas.— Su mirada se ensombreció levemente, el chico sonrió de lado.

—Sé de lo que hablas.

—No aquí. — Se apresuro a decir.— Más tarde, te veré en la "Takoyaki's" debo pasar por Biu.

—De acuerdo. —

(...)

—Vuelve a explicarme, ¿por qué le pusiste el nombre de un platillo a una cafetería? —Reclamaba Us por milésima vez, JJ rodó sus ojos.

—Porque suena genial.— Jeff enarcó una ceja.— No entiendes esto de ser una mente maestra.

—Creo que tú menos.—

La suave risa de Build tras la barra se hizo presente, ambos lo miraron y el calló rápidamente, fingiendo volver a su trabajo.

Jeff solía ir a menudo, cada día para ser exacto, pedía un Latte, molestaba a JJ y luego se iba así sin más, era agradable tenerlo, hacía que Build se sintiera más en casa, aunque claramente ya lo sentía así.

JJ le recibió bien, le dio el trabajo menos pesado de todos (preparar el café) tranquilo podía estar tras la cocina medio abierta/cerrada y entregar las ordenes por una ventanilla, a todos les había fascinado su café, el alto había hecho una buena "inversión" al contratar al menor, puesto que su belleza aniñada traía jovenes lindas de la escuela cercana, unos cuantos chicos incluso.

Takoyaki's era reconocida por su bello personal, no sólo Build y Us, había otro chico llamado Fourth y un chino apodado "Code" por JJ, extrañamente lo acosaba a cada instante, no solía toparse con ellos por la diferencia de turnos, sin embargo sabía que ellos trabajaban ahí.

Baby, Bibs and Me <ADAPTACIÓN>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora