🎉🥳 Fiesta 🥳🎉

53 7 2
                                    

Sai entró a la casa desconcertado por la cálida bienvenida.

Recordaba a algunos héroes presentes, pero, en su universo lo miraban con miedo, odió e impotencia por no poder derrotarlo. ¡Incluso Sonic!, que se había rendido de poder ganarle y, con el miedo a su fuerza usada en ámbitos menos que heróicos, se había unido a la asociación.

Era curioso el como daba vueltas la vida.

- Sensei, ¿Está bien?- Un chico rubió se le acercó-. A estado bastante callado desde que entró, ¿Le disgusto la sorpresa?, Aún puedo echarlos si gusta.

- Todavía que te ayudamos- Sonic se quejó mientras caminaba hacía una bocina para poner otras canciones-. Y tú, Saitama, más te vale disfrutar ésto, no nos esforzamos tanto para nada.

Había olvidado lo atrevidamente grosero que era el ninja, sin embargo, le gustaba, le daba una buena nostalgia. Miró con cierta diversión como Sonic ponía pura música grosera o con trasfondos oscuros para molestar a su acompañante.

- Te voy a destruir-.  Dijo Genos ya hartó  de escuchar puras canciones depresivas, así no se esperaba que fuera ésto.

- Intentalo si puedes, hojalata- Sonic le sacó la lengua como un niño, disfrutando de sacar de quicio al Cyborg.

Fubuki los alzó a ambos con sus poderes psíquicos, los separó para decir-. Ya, ya, las dos son bonitas, ¿Podríamos iniciar está fiesta? O van a seguir peleando como niños.

- Vamos, Genos-. Un anciano salió de la cocina con un plato de comida-. Sólo por hoy, tómatelo con calma.

- P- Pero- Doctor-. Él rubió hizo un puchero, pero asintió.

Él doctor Kuseno tenía razón, ésto no se trataba de él, se suponía que era para animar a su Sensei. Maldijo internamente a Sonic y, avergonzado, dió un pasó adelante de Sai.

- Sensei, queríamos agradecerle por todo lo que a echo por nosostros, a pesar de no recibir nada a cambió-. Se acercó para tomar sus manos-. No es mucho, pero... -. Entrelazó sus dedos-. Espero lo disfrute

Sai no supo como debería contestar, pero no tenía porque hacerlo. No era para él de todas formas.

Reconocer éso le dolió.

Bastante incómodo por el contactó,   separando sus manos, se alejó del chico con algunos pasos hacia atrás. Él Cyborg ocultó su decepción detrás de una expresión neutral.

Mumen, notando la tensión entré sus amigos, decidió ser él que de inicio a la fiesta.

La comida era bastante deliciosa y abundaba a montones, él chico llamado ¿Genos?, Le había asegurado que no se preocupara por el costo, que él podía costearlo.

Tal parecía que su versión alternativa era igual de tacaño que él. -Algunas cosas no cambian- pensaba.

Con el tiempo, estar rodeado de tanta gente le asfixió, no estaba acostumbrado a lidiar con las personas desde que inicio su vida sedentaria. Bastante agotado, decide salir por el balcón, necesitaba aire y era una suerte que la casa tuviera 2 pisos.

Mientras pensaba en teorías sobre porque su antiguo departamento estaba destruido, él Chico-Cyborg salió a hacerle compañía.

- Sensei, está aquí-. Hablaba como si no hubiera entrado y salido de los cuartos de la casa para poder encontrarlo-. Me disculpó si todo ésto es demasiado para usted, creí que si lo hacía pequeño e invitaba a pocas personas podría no abrumarlo, pero me equivoqué.

Sai no se molesto en darle una respuesta,  no sabía porque él chico había hecho todo éso para intentar animar a su contraparte. Cuando intento preguntar fué como abrir un grifo, él tipo no se callaba sobre lo genial que era.

Bastante molestó por tanta palabrería, le gritó- ¡20 palabras o menos, idiota!.

- Me disculpó, Sensei, falté a la primera lección que me dió-. Dijo con cara de perro arrepentido. Sai se sintió culpable por haberle gritado, también bastante desconcertado por siquiera arrepentirse de gritarle a un Cyborg y no por golpear a humanos que eran mucho más frágiles que él rubió.

Se acercó a acariciar el cabello del chico con envidia pero como gestó de disculpa. Parecía funcionar, él Cyborg parecía bastante feliz con el cariño proporcionado.

Todo era tan pacífico, que le trajo náuseas a la boca.

Molesto por la muestra de debilidad, se alejó.

- ¿Sensei?

- ¿Qué?

- ¡Gracias!

Sai volvió a preguntar nuevamente porque Genos se esforzaría por alguien que no podía enseñarle nada. No había ignorando el hecho de que lo llamase Sensei a cada rato, Saitama no tenía nada que enseñarle al tipo más que fuerza física e incluso entonces sería imposible porque era una máquina.

- Es porque Sensei es increíble- Contó cuidadosamente las palabras, no quería volver a equivocarse-. Todo en él lo es.

- ¿Lo dices por la fuerza imparable?-. Preguntó-. Créeme, no es tan bueno como piensas-. Dijo recordando su perdida de motivación y emociones. Ése era el precio por el poder.

- No es sólo éso Sensei-. Éso era antes de conocer bien a Saitama, antes de saber el hombre maravilloso que era-. Es por tu humildad, bondad, su sentido de la justicia. Es todo de usted, Sensei.

Eran unas bonitas palabras, pero él no era el destinatario de estás. Se preguntó porque seguía jugando a ser alguien que no es.

No era un héroe, mucho menos bondadoso. Quería enseñárselo al Cyborg, que se equivocó de persona, que él no era el héroe que tanto aprecia.

- ¿Sensei?-. Preguntó sorprendido, sintiendo unas manos en su cuello.

Mientras tanto, adentro de la casa, Kuseno hablaba con Bang sobre sus aficiones y los adolescentes problemáticos con los que trataban.

- Charanko se esfuerza por aprender, pero sigue fallando mucho-. Bang le comentó-. Por otro lado, Garou que sigue aprendiendo demasiado rápido, sigue metiéndose en puros problemas.

- Me recuerda a Genos, siempre en pleitos-. Kuseno se rió.

Los héroes y Sonic andaban hablando sobre la falta de King.

- Ya se tardo-. Se quejó Fubuki-. ¿Dónde se fué a meter?.

- Quizas la asociación lo necesitaba para algo-. Mumen no tardó en excusar al hombre, pensaba que King debería estar muy ocupando siendo Clase S.

- Si ése fuera el caso, entonces, ¿Por qué Saitama llegó sin él?- Sonic seguía sospechando del nuevo actuar del hombre.

- Probablemente esté en una junta de la organización, por eso dije que apagarán sus teléfonos-. Se levantó de la silla para caminar al rededor-. Debería aprovechar para llamar a mi hermana, últimamente se está llevando mejor con Saitama-. O tan bien como puede llevarse Tatsumaki con alguien

- Flashy Flash también parece conocerlo-. Murmuró Sonic como quien no quiere la cosa.

- Y podríamos preguntar por King-. Mumen miró a la mujer encendiendo su teléfono

- No hay señal-. Fubuki refunfuño.

- Lo lamento, señorita-. Kuseno se acercó a los héroes-. Pero está casa sigue estando en medio de la nada-. Señaló las escaleras-. Talvez arriba puedas encontrar señal.

Fubuki asintió, camino escaleras arriba con Sonic siguiéndola de cerca. Le cuestionó pero la respuesta era buscar pelea con Saitama y enojar a la "tostadora". A ella le parecía increíble que al calvo le tuviera tanta paciencia al ninja el día de hoy, normalmente lo golpeaba de una para que se dejé de tonterías.

Mientras Fubuki peleaba con su hermana por teléfono, Sonic se acercó a las puertas del balcón, eran de vidrios pero con unas cortinas para no dejar pasar el sol. Cuando vió lo que pasaba detras de las puertas gritó.

- ¡¡Oye, Saitama!!, ¿¡Qué diablos?!-. Se acercó a separarlos, Saitama parecía estar ¿ahorcando? (¿Un Cyborg necesita respirar?) a Genos.

- ¿¡Qué estás haciendo?!- Escuchó la voz de Fubuki detrás de él.

Huevo afortunado y desafortunado *Saigenos*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora