capitulo 5. recuerdos

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Jisung no pudo concentrarse en la conferencia ni en el resto de sus clases. 

Su mente solo estaba ocupada en Minho, la forma en que los dedos cálidos rozaron sus mejillas y como se dio cuenta que llevaba la bufanda. 

Tal vez Minho no lo recuerde, también tal vez ni siquiera fue un momento memorable para él. Pero aquella bufanda azul que ahora estaba impregnada de su propio aroma una vez le perteneció a Minho y su aroma. 

Para Jisung, fue ese el día que convirtió su gusto unilateral por Minho en amor. Algo floreció en su pecho en un día lluvioso después de haber sido abandonado en una cita. 

También fue el día en que se convirtieron en mejores amigos y la primera vez que Felix se enojó con él gracias a Minho. 

La cita que creyó que podría ayudarle a olvidar a Minho después de haber pasado por la etapa de negación respecto a sus sentimientos. 

Claramente esa cita nunca sucedió y es como si el destino se empeñara en ser un hijo de puta cruel. Minho lo encontró con lágrimas en los ojos sentado en una banca mientras la lluvia lo mojaba. 

Minho ni siquiera le había dicho una sola palabra, solo se sentó a lado suyo, lo cubrió con su paraguas, le entregó el abrigo que llevaba puesto y enredó la bufanda azul cielo alrededor de su cuello. 

Olía a él, a sándalo y cítricos con un ligero toque almizclado. 

Era embriagador y era estúpido, porque todo iba a terminar mojado debido al agua que cubría el cuerpo de Jisung y aún así, era como si Minho le dijera en silencio "estoy aquí para ti" y Jisung se permitió llorar con Minho a lado suyo. No porque estuviera herido por la estúpida cita que había planeado con antelación, lloraba porque se había rendido a sus sentimientos con el novio de su mejor amigo, su pecho crujía de dolor y desesperación pero el pelinegro no tenía ni idea de su verdadera agonía. 

"Quiero ir a casa" le había dicho cuando se calmó. Minho tomó su mano. Jisung se había sorprendido mucho por el contacto. Por supuesto lo recuerda porque fue la primera vez que Minho tomaba su mano, era tan cálida, encajaba perfectamente con las manos de Jisung. 

Minho lo subió a su auto y condujo hasta su departamento, tomó las llaves que Felix le había dado y abrió la puerta. 

El rubio no estaba cuando llegaron. 

Jisung simplemente se había volteado a ver a Minho, quien todavia dudaba en irse, parado en la puerta con las cejas fruncidas. Le sonrió pero era una sonrisa vacía. 

"Gracias por traerme Minho Hyung" le había dicho. "Puedes irte ahora" Porque de lo único que tenía ganas en ese momento era de llorar en su habitación sintiéndose ahora más culpable de amar a alguien que no debía. 

"¿Quieres que me quede?" le había respondido Minho y Jisung quiso decir que no, que tenerlo ahí iba a doler pero no pudo decir que no, asintió mientras se quitaba los zapatos, dejando un rastro de agua a su paso con Minho siguiéndole detrás. 

Pensó que ir a su habitación sería incorrecto, así que le pidió que por favor lo esperará en el sofá. 

Se cambió por su pijama favorito, se puso un abrigo encima porque tenía mucho frío o quizá el temblor de su cuerpo se debía a Minho, tal vez ambas; y se dejó la bufanda azul puesta, era cálida y olía bien, tampoco se había mojado así que siendo egoísta quiso mantenerla en su cuello. 

Tomó una frazada y se dirigió al sofá donde Minho lo estaba esperando. 

Se sentó cerca de Minho y suspiró abatido. 

"Minho hyung, no es necesario que me hagas compañía, estoy bien" 

Minho había negado con la cabeza. 

"No soy bueno consolando a alguien, pero se que no estás bien y quizá mi compañía no signifique nada pero quiero que sepas que puedes confiar en mí, ¿somos amigos, no? "

Jisung derramó lágrimas silenciosas, mientras decía "si, somos amigos" rompiéndose, ahogándose con el nudo en su garganta. 

Recuerda que Minho había estirado su mano, recostando la cabeza de Jisung en su hombro mientras él se permitía llorar en él. 

No tenía que decirle que tener su compañía solo lo estaba lastimando, Minho no tenía que saberlo, no cuando estaba siendo tan dulce. 

Jisung se había quedado dormido en el hombro de Minho después de haber llorado no sabe por cuánto tiempo. Pero Felix los encontró así, con Jisung dormido en el hombro de Minho y Minho dormido en la cabeza de Jisung. 

No debía ser agradable encontrar a tu pareja dormido en el sofá con tu mejor amigo, él lo sabe. Por eso entiende porque Felix grito un "que carajo" despertando a ambos. 

Jisung se había alarmado tanto que saltó, levantándose del sofá y tratándose de justificar. 

"No es lo que piensas Felix, no, yo no… " 

Felix quería explicaciones y Minho le explicó con paciencia que había pasado y aunque Felix todavía mostraba un poco de irritación, de inmediato se lanzó a abrazarlo por su cita fallida. 

Después, Minho se había ido y la bufanda se convirtió en parte de su armario por mucho tiempo. 

prohibited -minsung-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora