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Seokmin no quería levantarse esa mañana de su cama, su cuerpo se sentía demasiado agotado y triste; la semana anterior en la pequeña comida familiar que tuvieron con SoonYoung su cuñado, Jihoon anuncio que se casarían. Su hermano era 6 años mayor que él, fue muy planeado por sus padres, le dieron la mejor educación y lo trataban como el mayor de sus logros, lo que provocaba que ahora que se cansaría ellos estuvieran más que emocionados, por ejemplo su madre le había dicho a Jihoon que ya tenían que empezar a buscar algún salón para el evento.

Mientras que SeokMin fue un error para sus padres, no habían planeado tenerlo y si lo hicieron era porque no querían sentirse culpables después, a Seokmin siempre lo dejaron de lado, incluso ahora, solo pagaban su universidad porque era la mitad lo que aportaban y no toda la colegiatura completa; cuando se enteraron que salía con Jun, solo le dieron un tonto anillo de castidad, tenían miedo de que saliera embarazado a temprana edad por salir con alguien mayor, y de esa manera arruinara el poco esfuerzo que hacían por él.

En pocas palabras, se avergonzaban de Seokmin y la carrera que estudiaba, mientras que a su hermano que era productor de música, lo tenían en un pedestal, en lo más alto.

Se levantó dispuesto a bañarse, tenía un proyecto importante que entregar. Escucho a su madre tocando su puerta anunciando que el desayuno estaba apunto de ser servido y tenia que bajar; Seokmin se metió rápido al baño, se lavó los dientes en tiempo récord para poder bajar a tiempo. Si no bajaba rápido, su madre lo dejaría sin desayunar, porque así era ella, quería que todo estuviera siempre perfecto y eso implicaba no tener platos servidos por más tiempo del que debían.

Mientras tomaba sus alimentos, tratando de comer rápido bajo la atenta mirada de su madre, pero a la vez tratando de no recibir un regaño por la rapidez con la que ingiere sus alimentos, su padre hizo una pregunta que los hizo guardar silencio “¿Y que me cuentas de Jun cariño?” Seokmin quería levantar la voz, decirle a su padre que si podia poner más atención a lo que el le decía, pero no podría.

No importaba cuántas veces le dijera a sus padres, ellos no prestaban atención a nada que tuviera que ver con él, por eso siempre terminaba recordándoles que él y Jun habían terminado.

Apenas terminó de comer, su madre le dió un leve regaño por comer tan rápido y no comportase como el “Señorito” de casa que era, su madre siempre le decía lo mismo en cada oportunidad que tenía, haciendo que su autoestima empeorará; subió a su habitación para darse una ducha rápida y emprender su viaje a la universidad, aún tenía que entregar su proyecto, y eso le servía como la distracción suficiente ante los problemas de su hogar.

{Algunas situaciones de la vida, nos llevan a decisiones complicadas.}


En cuanto estuvo en la universidad se dió cuenta que no había llevado nada para cubrirse de la lluvia que amenazaba con empezar a caer, tal vez podría enfermar, o tal vez podría llamarle a su padre para que le hiciera el favor de ir por él, aunque Seokmin prefería enfermar.

-Seungkwan buenos días -saludo a su amigo cuando tomo asiento a su lado, agradecía que la mayoria de sus clases las tomaba con Seungkwan y no con Seungcheol, el mayor le agradaba y eran buenos amigos, pero solía hablar mucho de su "no-noviecito", en realidad a nadie más en su clase les gustaba hablarle a el mayor, decían que daba demasiado miedo, y tenían razón, SeungCheol lucía demasiado imponente –¿Aún no llega Cheol? –Inquirió mirando a su amigo rubio que bebía de un café frío.

La Historia de un Matrimonio. [En Edición Y Revisión.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora