Mi atardecer. [Hipo x Male reader]

I • Start a new era.

Recordatorio.
"____" ahí iría tu nombre.
"Khasgen" tu apellido.
P.O.V - Point of view/Punto de vista

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P.O.V
____ Khasgen.

Quizás no siempre fuiste fan de seguir las reglas que te encargaban tus padres, para ser sinceros, perfectamente podrías decir que nunca las respetabas. Allí se encontraba un joven _____, de tan sólo 15 años, sentado sobre un risco que daba al océano abierto. El sol a punto de ocultarse te brindaba una hermosa vista del paisaje, observabas con calma la manera en la que los colores en el cielo cambiaban poco a poco, fundiéndose entre ellos en perfecta armonía. Pasando de tonos celestes a unos amarillos, ámbar, rojizos, rosados. Tintando el mismo cielo cómo si una obra de arte fuese, eso te dejaba atónito.

Se suponía que ahora mismo debías de estar con tus padres trabajando cómo un buen guerrero, pero a pesar de ser un vikingo, y a decir verdad uno muy bien dotado por tus características físico-corporales (a tu edad, eso resultaba algo fantástico) no eras gran fan de.. Bueno. Basar tu vida en cazar.. Cómo decirlo? Ah, cierto.

Eres _____, _____ Khasgen. Un vikingo de Berk, muchos ya han de conocer tal lugar. Repleto de grandes y fornidos vikingos, aunque no podías decir lo mismo de la inteligencia de estos (salvando a unos pocos). Usualmente un pueblo repleto de nuevas construcciones gracias a las pestes. Mientras otros tienen artimañas tales cómo ratas, mosquitos, aquí hay.. Dragones. ¿Fantástico, no? Ni lo piensen.

Para _____, la vida aquí era monótona y no mucho menos aburrida. Sin embargo solía ayudar en lo que podía, pues tampoco quería ser un reprimido social en su pueblo. Era bastante conocido por su característica fuerza física, habilidad y.. Por supuesto, su personalidad sumamente SINCERA. Haciendo énfasis en la palabra "sincera", _____ mayormente decía las cosas rectas y sin rodeos. Sin filtros podría decirse, eso a veces resultaba o muy bien o muy mal, pero a él no le molestaba. Era su forma de ser, ¿Quién lo iba a juzgar?

El atardecer había llegado a su fin tras varios minutos en los que _____ estuvo perdido en sus pensamientos, en el momento que optó por levantarse, una brisa chocó contra su rostro moviendo sus cabellos azabaches. Este tomo una profunda bocanada de aire, y exhaló con cansancio. Aún con su mirada fija en el océano y cielo, captando cómo los puntos brillantes en el cielo iban apareciendo simultáneamente uno tras otro. Un pensamiento había inundado tu mente, uno que por lo general se paseaba en ti como si no quisiera irse.

— " A veces, de verdad envidio a las bestias voladoras. Pueden gozar de la libertad que poseen, y yo aquí, arraigado a una aldea en la cuál nada es para mí. " — Murmuraste en un tono demasiado bajo, por más que nadie estuviera cerca.

Esa idea siempre, pero siempre, estaba presente. Berk a pesar de ser tu hogar no lograbas sentirlo cómo uno. Claro, naciste allí, eras respetado, querido por tu familia, y de algún modo varios vikingos te daban halagos cuando hacías bien tu trabajo ayudando a los mayores. Inclusive, alguna que otra chica te pegaba el ojo de vez en cuando.

Pero no era suficiente.

No era suficiente para ti, eso creías. ¿Pero qué más podrías hacer al respecto? ¿Tomar un barco e irte a explorar el mundo por tu cuenta con solamente 15 años? Quizás hacía falta más tiempo para descubrirte a ti mismo, tu propósito, tu verdad.