Hyuuga-sensei [Neji x tú]

¿No te es suficiente?

Pov narradora

Cuando la mujer regresó, se acercó a sus hermanos. Sus rostros estaban furiosos. Cuando le contaron lo que el Hyūga les habían dicho, no pudo contener su diversión y comenzó a reírse.

Dejando a sus hermanos, se concentró en hablar con sus dos amigas rubias, entre dientes, se reían. Ay dios mío. Algo fue planeado por esas pequeñas cabezas juntas. Y agregaron una peli-morada.

Hinata:¿Qué es tan maravilloso? –sonrió, sentándose en el regazo de la Uchiha– ¿Estamos entrenando para reír?

Sakura:¿Mm? –Se rió, acercándose a ellas– ¿Código cien?

____:Código cien... –le aseguró–. Ustedes solo síganme más tarde

Temari:A veces me asustas, no sé qué cincuenta y cinco, pero está bien

Código de amigas a... ya veremos qué pasa después.

Al comprobar que nadie escuchaba, regresaron con sus hijos, estaban armando un rompecabezas con la ayuda del joven Uzumaki. Bueno, en realidad les estaba dando orden de que piezas encontrar y darle. Eso sí, unos críos de 3 años, hicieron el mejor caso del mundo y sin lloriquear las piezas que les arrebató.

Menma:¡Allí no va! Préstame, Boruto

Boruto:¡Cla'o! Va-qui

Inojin:No e'toy tan sheguro –sacudió la cabeza–

Sai:Si mi hijo no está tan seguro es porque no va allí

Los adultos se rieron de su rostro frustrado. La mujer de cabello negro le hizo un gesto a su amiga para que se bajara, cuando lo hizo, se acercó con cuidado a su pequeña sobrina, sorprendiéndola por la espalda, atrayéndola hacia ella.

La acostó en el suelo haciéndole cosquillas por todo el torso, las pequeñas risas inundaron la habitación, llamando la atención de todos. Y, más de sus padres.

Sasuke:¡____, Sarada no es trapo! No la jales así!

____:¡Tú cállate! ¿Te gusta, verdad, cacahuatito?

La niña rió más fuerte. Su otro sobrino de sangre, se acercó con intenciones de sorprenderla por la espalda, sin embargo, este fue atrapado por su tío Hyūga.

Neji:¿A donde crees que vas, pequeño bribón?

Hitomi:Oh no –nego con miedo–. ¡Cosquillas no!

Eso es lo que normal hacían ambos esposos cuando cuidaban a sus sobrinos, les hacían cosquillas hasta cansarse. Era muy divertido.

Ambos, sin duda alguna, serían unos excelentes padres.

En la mesa, todos disfrutaban conviviendo tranquilamente. Ya habían pasada el tema de las felicitaciones, claro, ya había pasado una semana desde la mujer hizo público su embarazo. Entonces, tenía seis semanas de gestación.

Cada quién estaba en su mundo, algunos platicando, otros comiendo y solo escuchando la conversación de al lado.

Ella tenía dos cosas en mente, la primera alguna broma para no perder costumbre y el otro asunto es...

Mikoto:¿Como te ha ido en el trabajo, ____?

Fugaku:¿Como te van con tus pacientes, mejor? Sabes que si no te gusta, hay espacio para ti en nuestra empresa

En el pasado, cuando decidió su carrera su familia, toda, —a excepción del castaño— no le hizo gracia para nada. Como una Uchiha, querían que siguieran sus pasos, siendo contadora o administradora de empresas, abogada, incluso diseñadora, y, ya pasable modelo. Sin embargo, ella se fue por la psicología, no les gusto para nada. Tuvieron una discusión y termino mudandose con el Hyūga. Y, aunque dejaron las diferencias de lado. Mm, no aceptan del todo su trabajo. Por eso, no visitaba tan seguido su casa. Le recordaba los meses sola ahí.