génesis; yeongyu

ii

Habían pasado varios días desde aquel encuentro abstracto, una génesis que se había derivado de un par de lamentos fugaces y Choi Beomgyu había estado conviviendo con el bosque mucho más de lo que se había adentrado hasta entonces. Trataba de recordar el camino que anteriormente lo había llevado hasta aquel avión abandonado pero todo en él era incierto, cada paso que daba le resultaba pretencioso y por instantes se pensaba que avanzaba en círculos que lo condenaban a una perdición casi eterna.

Se detenía a contemplar el sendero con sus huellas marcadas y se preguntaba si aquellos pasos le habrían adelantado, se encontraba perdido sobre el paso del tiempo y no comprendía la forma en la que su alma se habría hecho durante aquel instante, no se encontraba, ni encontraba el avión abandonado en medio de la maleza poética llena de cicatrices, y aunque cerrase sus ojos y rezara, sus plegarias no eran escuchadas, y los tenues sollozos de aquel chico eran imperceptibles, invisibles, inexistentes, ya no estaban, como Choi Beomgyu ya no estaba.