la teoria de Aslan, el reflejo de tu amor

capitulo 5: novedades en el plano

Hola lindxs advierto que hay un punto en el que hay sex así que si no te gusta te puedes saltar la anotación dos, me disculparán si no está bien escrito, porque no soy muy buena escribiendo escenas más 18. Habiendo dicho esto, espero disfruten mucho este cap.
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Perspectiva de Ash

El día de hoy amaneció nublado y probablemente vaya a llover, imagino que ese es tu estado de ánimo querido eiji; no puedo perder ni un segundo, y menos ahorita; he ido por la libreta y la he empezado a llenar con anotaciones, la anomalía del clima, la conexión que sentí con eiji, la anomalía del lago, todo, necesitaba respuestas

Anotación 1: después de estar en el mundo celeste de eiji, porque si estoy en alma de eiji. Todavía no termino de comprender todo. Ayer pude sentir una conexión con eiji, la conexión más fuerte que he sentido con él, porque he sentido cierta conexión con su alma antes, obviamente esto es mucho más grande. El lago guarda un plano cartesiano en su interior y tengo la hipótesis de que el lago es un objeto desconecta del alma de eiji, bueno, no diría desconectado, más bien como un término independiente que no eiji no su alma pueden controlar, pueden influir más no controlar, diría que es una fusión entre ambos mundos y que trabaja independiente de su mundo sensible, podría ser un portal de regreso a casa con él.

Anotación 2: anoche ví lo más extraño y lo más tierno que pude ver en mi vida, anoche me quedé más tiempo de lo normal despierto, admirando ese cielo estrellado tan hermoso que hace que todo lo que viví se opaque, la luna redonda y completa no se dejaba eclipsar, estaba a la par de hermosura con sus finos trajes de nubes tímidas que apenas la cubrían. Pude ver un brillante cometa que se estrellaba en el lago, cuando caí en cuenta de lo que hacía me halle arrodillado en la orilla del lago y veía perplejo como un dulce, lindo y tierno bebé japonés emergía del lago envuelto únicamente en una hoja de nenúfar y con una flor de Victoria regia cubriendo su nobleza, estaba sumergido en un profundo sueño, lo recogí del lago y lo acune en mis brazos, quise cantarle una canción de cuna y de mi boca salió un soneto que nunca antes había escuchado

-once there was a way to keep back homeward - el pequeño bebé abrió los ojos, eran los ojos más grandes, lindos, cálidos y comprensivos que yo halla visto en un bebé y que solo los había visto en otra persona, en la persona más importante para mí, tú, mi amado eiji- once there was a way to keep back Home, sleep pretty darling and do not cry, and i Will sing a lullaby

Las manitas del bebé se dirigieron a mi cara, que al hacer contacto con mi rostro pude sentir las manitas más suaves y rosaditas que yo pude haber palpado con mi curtida piel manchada y maltratada por las duras calles de Nueva York. Sus ojos se dirigieron a los míos y en sus ojitos se reflejaron las estrellas

Golden slumbers fill your eyes! Sleep pretty darling do not cry and i Will sing a lullaby- lo abracé mientras el agarraba suavemente mis mejillas, lo estreche delicadamente contra mi pecho, el pequeño podía escuchar los latidos de mi corazón, poco a poco yo sentía que el pequeño se volvía más grande y más pesado hasta que me tocó dejarlo en el suelo y pude ver a un niño de dos años de cabello negro y piel trigueña, de grandes ojos marrones, estaba sentado mirándome muy tiernamente y extendiéndome sus bracitos, lo alcé y se aferró a mi cuello, sus ojos infantiles despertaban en mi un instinto paternal, o más bien un instinto de protección incondicional hacia ese ser tan puro, tan inocente y tan frágil ante este mundo tan duro y cruel. Apenas su peso volvió a cambiar lo volví a dejar en el pasto, está vez me encontré al frente de un niño de cinco años quien al verme se le iluminación sus ojitos y se aferró a mis piernas en un fuerte abrazo

-Ash! Ash! Estás bien Ash!- gritaba lleno de alegría
Luego pasó de abrazar mis piernas a abrazar mi torso, poniendo su carita en mi pecho, estaba vestido con pantalones cafés, una camisa blanca manga larga, un poco grande para su talla, y un chaleco tejido de lana café, pase mis manos lentamente por su cabello, y separó su carita de mi pecho, y pude ver a un eiji de trece años, era hermoso, tenía un carisma y una carita angelical, definitivamente lo protegería sin importar que.