POR FAVOR

8 2 0
                                    

20:00 ☆ Bello

☯︎

Salió con prisa de la mansión y a pasos acelerados caminó hacia el edificio de Sherlock.

Una fuerte brisa amenazó con despeinar su rubia cabellera y por reflejo puso ambas manos sobre su cabeza, cuando amainó el viento y se quitó las manos con cuidado, suspiró, pensando en dar la vuelta y volver para renovar su seguramente despeinado pelo dorado.

Rendido ya, solo avanzó con apidez hasta llegar a la esquina en la que se encontraría con el detective, efectivamente al girar la esquina ahí estaba él, zapateando sin dejar de ver su reloj, creyó que habia llegado tarde por haberse perdido en sus pensamientos sobre su cabello, curioso miró su reloj de muñeca el cual marcaba las 19:59, muy confundido se acercó al peliazul con una ligera sonrisa y alzando una de sus perfectas cejas alineadas.

- ¿A quién esperas? - Preguntó despertandolo de su distracción en la muñeca.

- A ti, llegas tarde, son las 20:50. - Respondió Sherlock con algo de seriedad.

William le agarró de la mano y miró su reloj. - Está estropeado... - Comprobó su reloj. - Ahora son las 20:01. - Sonrió con la mirada baja y ojos cerrados. - Está tan nervioso que no se dio cuenta, y su pulso... - Pensó alzando la mirada hacia sus zafiros.

- Oh, no me di cuenta. - Permaneció unos segundos más observando el reloj antes de desviarla hacia el frente con un ligero rubor que William no se perdió.

- Vamos. - Dijo comenzando su caminata hacia el restaurante italiano, hasta que recordó que a lo mejor no llegaría a ser de su agrado. - ¿Teee gusta la comida italiana? - Preguntó mirando hacia los lados con desinterés hasta acabar observandolo de reojo.

El rubio se quedó mirando sus zapatos, pensando que su vestimenta si pegaba con un italiano.

- Sí, me gusta. - Respondió mirandolo del mismo modo.

GUIADOS POR EL CORAZÓN   ▪2▪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora