Extra : La Amenaza Hacia El Cuervo Dorado

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—Hermano ¿Dónde esta mi lámpara de loto? No la puedo encontrar — dijo la mujer mientras buscaba lo nombrado.

—Sesupone que es tuyo. Está en el segundo cajón debajo de tu mesita de noche ¿por qué? — el Emperador de Jade miro a su hermana quien sacó la lámpara del lugar indicado y lo hecho a una maleta.

—Me diste esta linterna porque dijiste que me protegería, el reino mortal puede ser peligroso. No trates de detenerme, ya tome mi decisión, vendré a visitarte cuando no tenga nada que hacer y pasaremos agradables momentos — Zhang Yunhua miro a su hermano quien no parecía saber como reaccionar. Se acercó y le dio un beso en la frente.

—¡Mamá! ¡Mamá! — gritaba el pequeño macaco feliz mientras hiba a buscar a su madre.

—Mi pequeño Liu Er — dijo la mujer mientras veía a su hijo aparecer por la puerta de la habitación.

—¡Papá! ¡Mamá! Miren lo que encontré — mostró su mano donde había una mariposa.

—Pero que maravilla, es muy hermosa — dijo Yunhua tratando de no llorar.

—¿Qué pasa mamá? ¿Por qué lloras? — fue tomado y acunado en el pecho de la mujer.

—Mi pequeño, mamá tiene que ir se, pero prometo venir a visitarte cuando tenga tiempo, lo prometo — junto su frente con la del menor quien la miraba confundida.

—¿Adonde te vas? ¿Por qué me abandonas? — fue dejando en el suelo y la mujer empezó a caminar fuera de la habitación con su maleta. El primate la miro y trato de seguirla dando pequeños saltitos mientras caminaba tratando de llamar la atención de su madre pero su padre lo tomo en brazos cuando estaba llegando a la puerta.

Liu er miro primero a su padre confundió y depues a su madre, bajo sus 6 orejas y se apoyo en el pecho de su padre mientras miraba como por acidente había matado a la hermosa mariposa con sus manos.

Nunca más la volvió a ver hasta ese día.

[...]

El rey de los monos reia mientras jugaba con los menores de la tribu, era un día hermoso y el sol daba pequeños toques cálidos junto a suaves brisas.

La mostaña se empezaron a sacudir haciendo que algunos monos se calleron de sus ramas y también frutos.

Todos los monos de Flower Fruit Mountain se empezaron a desesperar.

—Tranquilos, tranquilos, voy a ver que esta pasando — dijo el pequeño rey mientras salía de detrás de la cascada y se dirigía a las afueras de la montaña.

Allí se encontró a una criatura en una madera flotante, un ser extraño que caminaba en dos patas, con pelo solo en la cabeza y una cara nada amistosa.

El mono de piedra fue donde el chico cuando este zarpó.

El Rey mono empezó a hablar, pero por más que trataba de modular bien sus palabras, el mayor no parecía entenderle.

—¿Tú quién eres? — fue lo único que pronunció la criatura y aun así el mono de piedra no entendió.

Derepente la criatura hizo un sello que abarcó a el mismo y al mono. Cuando el brillo dejo de aparecer el niño humano hablo.

—¿Sabes donde puedo encontrar al sol diez? — esta vez el primate si lo entendió, o a medias.

—¿Hay un sol diez? — pregunto el primate.

El Dios De La Audición (AU LMK) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora