El duque diabólico no puede dormir

Capítulo 133: En esa fiesta, ese día (2)

Kahel estaba releyendo la carta de Lena que Sid le había entregado en secreto el día anterior, una y otra vez, y luego se obligó a comer algo que no estaba dispuesto a hacer.

– ...... Para mejorar, necesitas comer bien, recibir mucha luz solar y moverte. Debes dormir bien. Si te duele el cuerpo, me dolerá mucho el corazón.

Su carta, escrita con cariño y preocupación, palabra por palabra, se convirtió en un rayo de luz en su corazón deprimido y frustrado. No supo cuál era el sabor del trozo de carne que se llevó a la boca, pero lo masticó y lo tragó por deber porque Lena se entristecería si adelgazaba. Comenzó a entrenar con los caballeros nuevamente y trató de dormir un poco por la noche.

Solo para Lena. Para no hacer que se preocupe.

Lo pensó varias veces, pero no pudo evitar ser codicioso por Lena, quien era el estándar para todo en su vida.

No puedo dejarte ir pase lo que pase.

No podía evitarlo incluso si estaba maldecido por ser codicioso. No sabe si moriría mientras bloqueaba las hordas de monstruos, pero al final sobrevivió, por lo que esta vida no podía continuar sin Lena, por lo que no podía dejar ir a Lena mientras estaba vivo.

Por un lado, estaba resentido. Nunca había sido codicioso por nada en su vida. Solo ha vivido para su familia, para la Reina y para su país. Aunque su constitución no le permitía ni siquiera tener a una sola persona a su lado, cumplió con su deber. Luego, cuando estaba codicioso por una sola cosa, eso no se le permitió. Fue tan injusto y desgarrador.

- Te amo. con toda mi vida

Ese corazón amargado fue sanado en esta frase. El cariño tierno y cálido que se derrama hacia él.

Había oído hablar de confesiones de amor que pusieron en peligro su vida a causa de la maldición diabólica, pero ninguna que llegara tanto a su corazón como esta.

Lena también estaría nerviosa. Ni siquiera una sola persona en el Palacio la ha conocido. Aún así, ella dijo que lo superara primero. Lamentó no haber podido considerarla y cuidarla primero.

Entonces, de repente, recordó un día en el pasado. Fue en ese momento cuando estaba aterrorizado de que si esta rara doncella era conocida por el mundo, alguien se la llevaría. En ese momento, se había decidido por las palabras de Gerard.

'Está bien si no la pierdo.'

Kahel tocó suavemente con su mano la línea de 'Te amo' y sus ojos se iluminaron. Nadie debería atreverse a quitarle la de Kahel Luave. Tenía que dejarlo claro esta vez.

Tocó el timbre llamando a Arder después de mucho tiempo.

"¿Ha llamado, Su Excelencia?"

A Arder, que parecía haberse apresurado, Kahel le dio una orden con voz seca.

"Llama a los fabricantes de ropa y calzado. Llama al joyero. No tengo tiempo, así que date prisa".

* * *

Se ha levantado el telón del gran banquete. Dado que era el primer gran banquete que se realizaba desde la ascensión al trono de la nueva Reina, la atención de todos llamó la atención en la medida en que toda la capital estaba emocionada. Sobre todo, corría el rumor de que 'era para elegir al Gran Duque', por lo que a diferencia de los banquetes ordinarios, los hombres solteros se esmeraban mucho en vestirse.

Por lo general, la vanidad era un lujo para las mujeres. Era gracioso ver a hombres arrogantes decorándose como pavos reales, pero para los nobles, incluso eso era entretenimiento.

No eran solo los hombres los que estaban emocionados en el gran banquete. Debido a la maldición diabólica, no habían podido acercarse a Kahel Luave todo este tiempo y él apareció. La maldición se levantó y Damián se opuso a la unión entre él y la Reina.