Capitulo 10

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Aventuras con Usagi (y Sentimientos en Alcohol)
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El tiempo va pasando, la vida se siente como algo tranquilo después de las palabras que la tortuga y el conejo se dedicaron en el fin del otoño.

Había pasado poco tiempo, quizás una semana antes de que se tomara la decisión de dejar a Leonardo quedarse una semana en la dimensión de Usagi.

Fue algo hablado, meditado, observado, muy planeado.
Hasta ese día el joven Leonardo no se había quedado más de una noche fuera de su hogar y era un poco la preocupación de todos por al menos tres días antes de la inminente despedida.

Sprinter le pidió a Usagi que estuviera afuera del portal solo para que Leonardo no se perdiera en algún momento, mientras que la tortuga estaba claramente ofendido por aquel hecho.

"No va a pasar nada"

Dijo Leonardo, con ni una pizca de miedo en su voz.

Donatello el día en que Leonardo se iba le entregó una bolsa con cosas que le iban a servir. Un artefacto que podía poner debajo de su ropa por si hacía demasiado frío, una linterna y un montón de otras cosas que no podría usar sin una fuente de poder que llamara demasiado la atención en el frío monte... cosas que claramente Usagi no aprobaría a la hora de estar en su dimensión, o todo menos el calentador que claramente sería de ayuda para el reptil.

La tortuga en morado tuvo que abstenerse de entregar sus suministros esa vez.

Cuando el día finalmente llegó Leonardo se fue en el momento que estaba anocheciendo en su dimensión, para llegar de día junto Usagi...

No espero que las cosas empezaran como empezaron-

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Leonardo fue como un niño bueno.
Vestido con su hakama, un kimono azul que si le cubría la mitad del pecho... una capa y su kaza que hacía destacar mucho menos.

Eso estaba bien, claro que sí.

Ahora... ¿Dónde estaba Usagi?

Pues... no muy lejos.
Leonardo pensó que se había teleportado a otro lugar, pero luego al ver hacia abajo vio sangre en el piso, un cuerpo de lo que parecía un joven local, el daishō de Usagi tirado en el piso junto con el sonido de aleteos alejándose del lugar.

—Oh mier... —no alcanzó a decir nada antes de levantar la mirada y ver a los lejos lo que parecen murciélagos llegando el cuerpo de Usagi entre cuerdas. — ¡Sagi!

Fue lo único que salió de él antes de ir corriendo a ver si podía hacer algo.
Verlos meterse a través de la montaña.

Dando un suspiro Leonardo dejó de correr al momento de ver que estaba dejando las espadas del conejo detrás... apretó un poco los labios y suspiro para relajarse, debía estar tranquilo, todo saldrá bien.

Ahora con cuatro espadas, unas sin fundas y dos en su espalda pensó en lo que debía hacer para salvar al joven conejo que claramente estaba inconsciente cuando lo vio en aquella situación.

Por medio segundo pensó en correr de nuevo hasta que escuchó la voz de cuerpo tirado que estaba cerca de las espadas de Usagi. Miro hacia otro lado... pero la voz sonaba casi como un cachorro en dolor.
Leonardo trago saliva y se agacho al lado del cuerpo.

— Pa... padre... pa...dre —susurraba el joven.

Leonardo sintió su pecho apretarse.
Pudo ver la sangre escapar de la herida a un costado del joven.

Diferencia Horaria | LeosagiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora