Capitulo 6

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Capitulo VI

El sol estaba por ocultarse pero yo y pierce seguíamos en aquel acantilado conversando de cualquier cosa

- y como era ese casanova qué se cruzó en tu camino? - pregunto con interés

- el lo era todo para mi - comencé - lo conocí en mi primer año, era alto y guapo en resumen alguien que estaría muy lejos de mi alcance hasta que lo vi en el patio trasero de la escuela mientras yo leía un libro - dije

- adivino el te pregunto sobre tu libro - yo negué

- el estaba tan distraído qué cayó sobre mi topando su nariz con la mía, ese día lo empuje preguntandole qué le pasaba y el solo se sonrojo - dije con una sonrisa - después de ese día el volvió cada vez y solo saludaba y se quedaba a mi lado en silencio hasta que comenzamos a hablar y llevarnos bien - mi sonrisa se llenaba de dolor - luego me pidió que fuéramos novios y yo estaba encantada, todos nos apoyaron a pesar de ser una come libros - el sonrió - todo estaba bien..... Hasta que llego ella - su sonrisa se desvaneció - ella era bonita, un cuerpo muy bien cuidado y usaba maquillaje y amaba la fiesta y esas cosas que yo nunca hice, se hizo pasar por mi amiga y luego cuando tuvo oportunidad se metio entre nosotros y nos fue alejando poco a poco hasta que un día los vi besarse en nuestro lugar preferido, en ese momento me di cuenta de que realmente no valía la pena para el. Intento explicarme pero yo me aleje y lo entrege a ella porque sabía que yo no era lo que el necesitaba - una lagrima bajo por mi mejilla

- respira - murmuró

- el era el casanova de la escuela, el que decían que solo usaba a las chicas y se iba por otra cundo se aburrida de la que tenia. Pensé que conmigo era diferente pero no - solloce - le entregue todo pero el escogió el camino fácil - asegure - por eso no me acerco a desmond porque se perfectamente que sucederá lo mismo - dije y el bajo la cabeza

- entiendo pero el no se va a detener - yo asenti

- lose - dije - se que no se rendirá hasta que caiga en sus redes - murmure

- nunca pensé que existiría alguien tan idiota - dijo y yo sonreí - pero te digo algo - yo lo mire - desmond va enserio contigo y no creo que quiera lastimarte - arque la ceja - si se que suena estúpido más viniendo de el pero cuando ve a una presa no espera y ataca, la invita a salir y esa presa siempre cae a sus pies suplicando y el Sigue siendo frío pero contigo el es diferente así que creo que el único lastimado podría ser el - lo mire sorprendida - realmente no se porque no eres su presa

No soy una presa porque soy su escritora favorita....

- el suele decir un verso que hasta me e aprendido de memoria por tanto que la repite y dice que es su favorita " la sonrisa de aquella doncella llena de ilusión hace qué la belleza qué a de poseer resalte y-

- " por eso es tan magnífica como una rosa blanca, pura y bella como el cielo, tan radiante como una estrella es por eso que angeline iluminaba lo que yo suelo llamar vida, su amor y concentración al tocar el violín hace qué mi corazón se regocije de alegría pero ahora lamentablemente ya no está y no puedo verla sonreír angeline donde estaras?" - concluí

- como te lo sabes? - pregunto asombrado

- yo lo escribí, fue mi primer libro - asegure y el sonrió

- con razón esta más interesado en ti de lo normal, tu eres la dueña de su corazón - aseguró

- dueña de su corazón? - pregunte confundida

- el solia leer tu libro todos los días, nos obligaba a mi y a Mark a escucharlo cuando lo leía en voz alta - quejo - el decía que si algún día descubría quien eres te buscaría y no te soltaría por nada y hasta no le importaba qué si en alguna circunstancia estuvieras casada y con hijo - dijo en tono de broma - dijo que mantendría a tus hijos - comenzó a reír - lo siento pero el caso es que no eres una presa para el - en ese momento mis mejillas se calentaron

- bueno yo creo que ya es momento de irme - el sonrió y se levanto

- no estarás huyendo porque te avergonzaste? - dijo entre risas

- eh? ese no es tu asunto! - masculle antes de irme

a la mañana siguiente me levante como si nada y me arregle con una falda tableada negra y unas botas negras con una blusa gris, me lamente en el espejo por mi maquillaje y baje hacia la cocina

- ya te vas a la escuela cariño? - pregunto mi padre mientras hacia su desayuno

- si padre regreso más tarde - dije agarrando una manzana verde porque no me gustan las manzanas rojas

- espera! Tengo algo que decirte - dijo y yo le acerque - quiero que lleves tu auto, no quiero que regreses caminando tan tarde - dijo dándome la llave

- padre no tienes porque preocuparte, vienen a dejarme después - dije y el sonrió

- es un chico? - pregunto con una sonrisa y asentí - es lindo?.

- ay papá! - masculle

- que? Solo era una pregunta

- ya me voy papa - dije yendo hacia la puerta

- ten un buen día hija!

Llegue a la escuela y me dirigí a mi clase de geometría al cual no le había entendido nada y por último la clase del maestro Baker

Lo único bueno es que desmond no me apretó al muslo hasta quedar morado

Decidí no mirarlo ni dirigirle la mirada, la clase acabo y me dirigía a la salida. Escuchaba los pasos de desmond seguirme pero los ignore y camine hasta el bosque

— porque me sigues? — pregunte dándome la vuelta

— porque me ignoras? — pregunto

— no te estoy ignorando solo quiero alejarme de ti y de tus juegos! — grite intentado irme pero su mano agarro fuertemente mi cintura haciéndome quedar a unos centímetros de su rostro

- de verdad crees que estoy jugando? - pregunto acariciando mi cuello con su dedo anular - si fueras una presa no estaría muriendo por dentro con cada golpe de indiferencia qué me das, tu eres lo que más deseo - susurro - e esperado tanto tiempo en conocerte y ahora que te tengo así no pienso dejarte ir - dijo con una sonrisa acercándose más a mi rostro

Ahora como escapó de esto?

LA VEZ QUE EL CAZADOR SE ENAMORO DE SU PRESA || +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora