ONE

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Las olas del mar chocando fuertemente, el sonido de la brisa marina que Minho tanto disfrutaba, tomaba una respiración lenta, llenando de aire sus pulmones para después de unos cuatro segundos soltarlo lentamente

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Las olas del mar chocando fuertemente, el sonido de la brisa marina que Minho tanto disfrutaba, tomaba una respiración lenta, llenando de aire sus pulmones para después de unos cuatro segundos soltarlo lentamente. Eso era vida. Tristemente esa "vida" terminaría pronto por la voz de su terapeuta.

—¿Te sientes mejor?—

—No, aún no– Solamente negó porque quería seguirse sintiendo vivo a través del audio con temática marina que le había puesto la mujer a lado suyo.

—Minho, la terapia ya casi termina y tengo otras tareas para dejarte— Se cruzó de brazos, tenía a otros pacientes que atender.

—Bien...— Se levantó de mala gana para después sentarse en la camilla.

—Escucha, sé que te gusta el mar ¿Por qué no vas? Tal vez te traiga recuerdos buenos del pasado— Empezó a escribir en la hoja del paciente esperando a que él se soltara, como siempre lo hacía.

—Es buena idea, tengo tiempo sin ver a la abuela— Colocó su mano en el mentón pensando.

—Tus padres te trajeron aquí hace mucho porque creyeron que estabas loco, yo no creo eso pero tienes algunos problemas que atender, tal vez si vuelves a donde amas seas feliz—.

—No entiendo porqué sigo viniendo aquí, tal vez es porque me siento seguro en esta habitación desde que tengo 14 años— Dudó sobre la razón mirando el reloj.

—Bien, tu tarea es encontrar un lugar seguro que reemplace este consultorio, además de ir a donde te gusta, no quiero verte dentro de tres meses— Le entregó un papelito con aquellas tareas y el pelirrojo lo recibió.

—Tres meses es mucho... Pero lo intentaré, hasta luego— Se levantó de la camilla e inició su andar hasta salir de la puerta mirando a todos los pacientes que hacían fila para ver a la psicóloga, algunos se veían mal y otros no tanto, pero cada uno tenía una historia.

¿La historia de Minho? Fácil, te la cuento ahora mismo.

Nacido en una parte de quién sabe dónde del universo, vivía con su padre, su madre y su abuela paterna con la que era bastante cercano, vivían en una isla que poco a poco se fue poblando y más gente llegó hasta hacerla un lugar enorme y lleno de vida, todos eran amigables y felices. También había sus secretos en aquella isla, criaturas marinas, pero no cualquier criatura marina, eran sirenas que muchos habían jurado con su vida haber visto, historias y rumores empezaron a rondar aquel lugar y todos deseaban ver una en persona, algunos para capturarlas y exhibirlas por mucho dinero, tal vez venderlas y hacerse millonarios, otros para ser sus amigos y preguntarles de la vida allá abajo, también estaban los raritos que las amaban y querían algo no muy decente con ellas.

Las leyendas con el tiempo crecieron hasta hacerse viejos cuentos para niños, a uno que le llegaron esas historias fue a Minho, pues, su abuela era una adoradora de aquellas historias, llegaba a pintarlas tratando de imaginar cómo eran, su casa estaba repleta de figuritas y decoraciones.

SIREN ~Minsung~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora