El caballero de Kanterbury, después de derrotar a Beth y poder viajar al pasado de la línea temporal, se da cuenta que en el transcurso del viaje sucedió una anomalía.
Apareciendo en un lugar completamente desconocido, su cuerpo sufre de repentinas...
Volando sobre Levantaviento, mirando el gran paisaje que hay al mi alrededor, disfrutando la agradable calidez que rodea mi cuerpo y el refrescante viento que sopla en mi rostro.
Así estoy actualmente, pasando la prueba de Amber.
Las corrientes de viento me ayudan a mantenerme a flote.
Es simplemente disfrutable este sentimiento...
La mayor parte de mi infancia la pasé dentro de un laboratorio, al principio no entendía el por qué, a que propósito, solo era chiquillo ignorante que solo acataba las órdenes de sus superiores.
Era un chico bastante curioso, el único entretenimiento eran los libros para leer aunque al final no me interesaron mucho y preferir salir al exterior a escondidas.
Era divertido, algunas personas me notaban y trataban de descubrir quién era yo pero al final pude escaparme de sus ojos.
También recuerdo que había una chica pelirroja con otros dos chicos que fueron los más persistentes en atraparme, pero pude huir a tiempo o eso creo...
Por suerte cuando cumplí cierta edad pude visitar el Castillo de Kanterbury, allí conocí por primera vez a la Princesita.
Era una niña tan pequeña y delicada, la Reina Camille me permitió convivir con ella por un tiempo y fueron los momentos más felices de mi vida.
Pero me tocó volver otra vez al laboratorio, desde ese entonces casi no he tenido contacto con la Princesita hasta que cumplí la mayoría de edad.
Después me enliste para ser Caballero y en mi primer día de servicio llegó la invasión....
Dejando de lado eso... Cuando explore el mundo exterior fue fantástico, era tan diferente leerlo que sentirlo en carne propia.
Aún así tenía una misión que hacer y solo tenía poco tiempo para disfrutar el paisaje.
"Oye, ¿vas a seguir volando todo el día?"
Me volteo hacia la voz, Amber me estaba siguiendo.
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"Oh, lo siento... Es solo que es refrescante"
"Ya veo, pero recuerda que te está acabando el tiempo"
"Vamos, no seas así..."
Es una pena pero tuve que aterrizar.
Lumine estaba también aquí junto con Paimon.
Amber también aterrizó y asintió satisfecha.
"¡Buen trabajo! Aunque no es de sorprender, dada la forma en que manejan sus Alas Voladoras en medio de la tormenta. La siguiente parte de la prueba es en la Ciudad de Mondstadh"
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