LEYENDO: NARUTO X DXD

CAP. 45

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Ingrid aún seguía en shock al ver la espada que sostenía le rubio en sus manos, ella simple mente creyó que era un simple sueño, pero resultó ser verdad, ahora ella era la sucesora de cavaliere, aunque tenía un largo camino que recorrer si deseaba llegar a ser tan poderosa como lo fue el caballero negro voltaico.

Edwin black estaba sonriendo su plan se iba tomando forma cada vez, y una vez se cumpla nada podrá detenerlo, ni las propias taimanin y las demás organizaciones podrá darle fin a su plan, si tan solo viera su alrededor y ver los horrores que se ocultaban en el lugar, bestias que devoraban planetas como si fuesen dulces, razas desconocidas y no olvidar lo profundo que llega a ser el cosmos.

Con las taimanin.

Estas estaban algo preocupadas por ver la espada que le rubio sostenía y más al ver a Íngrid entre sus manos, algo n estaba bien y más si prestaban atención a black que tenía una sonrisa de oreja a oreja que estaba desfigurando su rostro.

Con dante sparda.

El cazador de demonios, estaba sonriendo la pequeña Verona, había mejorado su control sobre su artefacto sagrado y acompañado de sus habilidades vampíricas y su fuerza física y agilidad, una nueva guerrera había surgido, ahora sol debía de pulir sus habilidades.

__ vaya has mejorado mucho pequeña, sin duda dentro de unos cuantos años serás alguien fuerte, pero no olvides siempre entrenar para mantener tus habilidades__ fue el consejo que le dio dante a la pequeña Verona que agradeció por ello.

Con vergil y Nero.

Padre e hijo, estaban tomando un descanso tras su lucha de entrenamiento, vergil veía su hijo con orgullo, pronto también sería igual a él y a su hermano dante, y para ello vergil entrenan aria su hijo hasta que supere el poder de su abuelo.

En la sala.

Ingrid estaba tratando de tomar la espada de las manos de Acnaél, que solo jugaba con la mujer, que estaba ya molesta por las burlas del rubio, esa espada era el legado del fundador de los caballeros infernales, no dejaría que este rubio idiota manche aquel legado.

__entrégame la espada rubio, oh te...__

__ oh que, que harás preciosa... matarme a besos...oh... mejor aún a sentones___ dijo Acnaél sonriendo mientras veía la cara de enojo de Íngrid, la pobre estaba apretando sus puños y si esto seguía así iba a enterrar su puño en la cara del rubio.

__ lo digo en serio, rubio entrégamela, es una reliquia de mi mundo__ dijo Íngrid.

__ oh ya veo.... Pero que me darás a cambio de esta reliquia__ preguntaba Acnaél con una sonrisa en su rostro viendo la cara de Íngrid.

__ yo... no tengo nada que ofrecerte... solo puedo darte mi cuerpo a cambio__ dijo Íngrid algo cabizbaja por ello.

__ interesante, es un buen trato, pero.... No deberías ofrecerte a ti misma como un objeto, eres alguien interesante y por ello te devuelvo la espada de cavaliere__ dijo Acnaél entregándole la espada a Íngrid que sonrió por ello

__ahora, continuemos donde se quedó la historia, señorita podría hacer los honores__ dijo Acnaél hacia Íngrid que solo sonrió y tomo el libro de las manos de albedo que solo sonrió por verla nuevamente.

__así que cavaliere la eligió a ella que interesante__ pensaba albedo viendo la espada que estaba en poder de Íngrid.

__capitulo 45__

ya habían pasado los días desde el encuentro entre la heredera Gremory y el heredero bael, y ese encuentro había dejado a todo el mundo sobrenatural de cabeza los demonios se estaban fortaleciendo bastante lo cual era una mala señal para el resto de otras facciones y los ángeles con Gabriel al mando sus fuerzas habían aumentado en gran medida y nuevos ángeles nacían y lo más preocupante para ellos era que estos nuevos ángeles no caían fácilmente.