¿Seguirás tomando mi mano? [BakugoxTu]

Capitulo 12

— Serán unas hermosas fotos para los recuerdos.

— ¿Estará bien que las tomes...?

— Shhh, si sigues hablando se van a despertar, Ochaco.

Unas cuantas risas sonaron en la parte delante en el momento que la chica de cabellos rosados y supuestos ojos de mapache tomaba fotografías en la parte delantera del autobús, con distintos ángulos que apreciaban la cercanía entre el rubio explosivo y su más reciente amiga, se sentía como una casamentera y lo disfrutaba ¿Como no hacerlo si se lo ponían tan fácil? y todo el tiempo que invertía en ello tenía un doble propósito, ya que podría pasarlo junto al pelirrojo, era como las ofertas 2x1 de los supermercados.

Pero fue el rubio quien despertó primero cuando el autobús se estaciono de manera poco cuidadosa en los establecimientos, un gruñido suave y bajo salió de sus labios como un suspiro al intentar acomodarse en los pequeños asientos, estiró sus músculos uno por uno, dejando para al final su hombro aún ocupado por tu cabeza. Quizás no había recuperado todas las horas de sueño que le había costado el pensar del beso, pero era un avance.

Sus ojos aún adormilados y levemente pesados comenzaron a recorrer con inquietud su alrededor, nadie se había levantado por el momento ¿Acaso lo habían visto en aquella posición? Lo más importante aún de todo eso, ¿Tu no estabas despierta?

Mierda.

Se había dejado llevar.

Quiso pensar en positivo, pero realmente ¿Como se hacía eso? Chasqueo su lengua ante la primera idea acertada que tenía en su mente, con mucho cuidado y delicadeza apoyó su mano entre tu cuello y tu mejilla para sujetar tu cabeza mientras retiraba su hombro. La comisura de sus labios se elevó hacia arriba muy sutilmente al sentir el calor de tu piel, pero no debía desconcentrarse. Ante la mínima indicación de Aizawa el bajo con ligereza del autobús.

— Cobarde — Sentenció en un susurro la pelirosa, lanzando una mirada cautelosa hacia aquel comportamiento mientras apoyaba sus manos en la cabecera del asiento delantero.

— ¿No deberías dejar que las cosas se dieran más tranquilo? Bakugo es ... muy obstinado a la hora de expresar sentimientos — Murmuró a su lado Eijiro, quien la miraba algo dudoso. — Podría acabar mal.

— Tengo todo bajo control, Kirishima. — Aseguró con entusiasmo y volteo a mirarlo— (Tu nombre) llegó hace dos meses y la mayor parte del tiempo lo ha pasado conmigo o con Bakugo. El tiempo está a mi favor. —Hizo una tenue señal con el pulgar hacia arriba.

Aunque el pelirrojo no estaba muy seguro, no obstante, asintió con pausa al ver que su compañera de asiento se levantaba para despertar a su amiga entretanto sus demás compañeros bajaban del autobús, muchos de ellos con bostezos y ojos restregados.

Aizawa no tardó mucho en separarlos en el momento que todos estuvieron con sus trajes de héroes, recreo un sistema en donde tuvieran dificultades para utilizar sus dones debido al ambiente, para rescatar a diversos maniquíes y poneros en zonas seguras, además del trabajo en equipo.

Un resoplido lento salió de todo tu ser cuando en el ambiente de arena fuiste a parar junto a Tsuyu, gotas de sudor comenzaban a caer de tu frente estaba haciendo demasiado calor, sin embargo, eso era lo que deseaban ver, ¿no? Aunque tu mente ya comenzaba a divagar sobre las opciones que tenías en ese momento, no podías levantar cada partícula de arena para pelear y tampoco podías usar el cuerpo de Tsuyu a tu antojo como si de una muñeca de trapo se tratara.

— Creo que está comenzando a hacer mucha calor'Kero.

— Solo tenemos que rescatar los ¿no? Aizawa dijo que él nos daría la señal para comenzar, Tsuyu. — Respondiste con una pequeña sonrisa, después de todo, era una de las muy pocas conversaciones que impartías con ella.