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Con las cubetas llenas de agua, ZiHao y ShuYang se ayudaban mutuamente, siendo cuidadosos para no derramar ni una gota. El camino era seguro y lo suficientemente amplio para llevar las cubetas sin problemas. Mientras tanto, JiaBao llegaba tarareando una melodía suave y lucía contento por regar su jardín.

— Después de regar las flores, ¿qué haremos? —preguntó el pato Qiqi con cuidado al pisar el suelo—

— Debemos asegurarnos de que reciban suficiente luz solar para que crezcan —Respondió HanYu, Qiqi no entendió la respuesta pero hizó como que si lo entendió, se puede decir que éste pato no era muy inteligente que digamos—

— ¿Y por qué regamos las flores?

— Se acerca la temporada de abejas, así que JiaBao y yo queremos embellecerlas para atraerlas y que hagan mucha miel.

— ¡Ah, ya entiendo! ¿Podré probar un poco de miel también?

— Claro que sí

Los tres amigos se acercaron al terreno, un lugar encantador con una casa rodeada de maderas, plantas y amigos sonrientes. Además, se escuchaba música alegre proveniente de la radio del Pardo, que siempre ponía buena música para disfrutar.

— ¡Miau! ¿A quién tenemos aquí? —XinLong, acostado en el borde de la ventana, observó al nuevo invitado—

— ¿¡Es un intruso!? —el cachorro se puso alerta y se levantó del suelo—

— No, es Qiqi. Mira —XinLong saltó al césped y se acercó a MingRui, mostrándole al pato que estaba ayudando a su amigo ShuYang—

— ¡Oh! ¡Es Qiqi! ¡ShuYang! ¡ShuYang! —Gougou ladró emocionado mientras corría hacia su amigo—

Los ladridos alertaron a los demás que estaban llegando a la casa. JiaBao, conociendo a MingRui, sabía que no se detendría, no lo pensó dos veces y tomó la cubeta llena de agua antes de que sea tarde.

Y ¡zas!

Gougou ya estaba encima de Ren, ansioso por jugar.

— ¿Qué haces? —Rió a carcajadas el niño—

— ¡Vamos a jugar! ¡Encontré la pelota!

— MingRui, lamento interrumpirte, pero Yanggie y yo tenemos cosas que hacer. Podrán jugar después —intervino el Oso, apartando al niño del perro—

•••

— ¡Buen trabajo, ShuYang! —felicitó HanYu al humano mientras le daba palmaditas en la espalda— Así es como se debe regar una planta.

— Ahora que hemos regado, vamos en busca del sol —insistió Li—

— Tienes razón, buscaré la escoba para mover las nubes —El sol estaba rodeado de nubes grises y debían hacer algo antes de que arruinaran las flores—

Mientras el oso Pardo fue a buscar la escoba dentro de la casa, ShuYang se acercó con cuidado a las plantas, procurando no lastimarlas ni ensuciarse, ya que la tierra estaba muy húmeda.

Una vez cerca, se agachó ligeramente para tomar una flor con mucho cuidado, sonriendo mientras admiraba su hermoso color. En su mente pensó: "Debe oler delicioso". En su imaginación, cruzaron sus snacks favoritos como el chocolate, las papas fritas o alguna golosina.

La flor llegó frente a la nariz de Ren y él la olió.

Su expresión cambió de admiración a confusión mezclada con asco. ¿Qué estaba oliendo?

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Una vez más, el niño solitario se encontraba en el mismo lugar de siempre, con la mente en blanco mientras sostenía un cigarrillo usado y sucio entre sus dedos.

𝗚𝗔𝗥𝗗𝗘𝗡 𝗢𝗙 𝗗𝗥𝗘𝗔𝗠     RSYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora