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Después de aquella extraña conversación con Aphelios, Sett se dirigía en carro hacia la casa de su madre donde lo esperaba su pequeña hija quien tenía que darle una buena explicación sobre lo que paso en su escuela, y seguramente asistir al otro día para platicar con los maestros y los padres del niño.

A veces se arrepentía de que ella fuera tan parecida a él, y no a su difunta progenitora.

Al llegar a la hogareña casa de su madre entró con las llaves que tenía y se encontró con su madre sentada en el sofá y la pequeña acostada sobre las piernas de su abuela.

Sett al cerrar la puerta observo como la pequeña se cubrió la cabeza con la blusa de su abuela provocando que está riera y acaricio la cabeza de la niña a través de la tela.

-Hola madre.- Al hablar vio como su madre volteaba a verlo con una gran sonrisa.

-Settrigh ¿Qué tal fue tu día? - Extendió la mano a su hijo quien la tomó y se acerco para dejar un beso en la cabeza de su madre.

-Todo bien, creo que mejor que a esta pequeña. Con quien tengo una platica pendiente.- Observo como la niña no cedió ante su padre, así que se sentó en el otro extremo del sofá.

Minnie se hizo bolita tratando de desaparecer entre las ropas de su abuela.

-MinMin habla con tu padre, sabes que no se enojara si no hiciste nada malo.-La animo quitando su blusa de la cabeza de Minnie.- Tu puedes cariño.-

La niña tenía una bandita en la mejilla y otra en la frente, su padre abrió los ojos en grande y tomo con suavidad el rostro de su hija.

- ¿Minnie que te paso? - Sett verifico su rostro.- ¿Te duele cariño? -

Minnie negó con la cabeza.- Estoy bien.- Miro sus pies y jugo con ellos apenada.- Qrow me dijo que mi cabello parecía zanahoria y que mis ojos daban miedo.- balbuceo tratando de explicarse.- Yo no quería hacerle nada porque tú y mamá Lauren siempre me dicen que debo ignorarlos, pero el me jalo de mis coletas y me hizo tirar mi jugo.- El ceño de la niña se frunció al recordarlo.

-¿Tu lo golpeaste? - Sett miro a su hija asentir.- Minnie...-

-El siempre molesta a los otros niños y eso me enoja. Es un niño feo, se come los mocos cuando nadie lo ve y tampoco habla bien.- Su hija se cruzo de brazos al recordar a aquel niño.

Sett no podía evitar ver orgulloso a su hija aunque su madre enarco una ceja al ver que el pelirrojo no iba a reprender a su hija.

-Minnie aunque ese niño se lo haya buscado, no significa que debiste ser tu la que lo golpeara, usar la violencia desencadena más cosas además de solo unos golpes y moretones. Y debemos hacernos cargo de nuestras acciones ¿Lo comprendes? - Tomo las manos de su hija acariciando el dorso de estas.- Mañana arreglaremos las cosas con sus padres y aunque pienses que hiciste lo correcto debes pedir perdón.-

Minnie miro a su padre con las cejas juntas demostrando que no se sentía feliz con ello.- Pero el es muy malo, y dices que la gente mala debe pagar.-

La mujer de cabellos blancos abrió los ojos sorprendida por las palabras de la niña haciendo que Sett se pusiera nervioso por ello.

-Si nena, pero a veces debemos dejarlo así y ellos recibirán su castigo de otra forma.- Sett cargo a su hija al ver el rostro serio de su madre.- Ma, nos gustaría quedarnos pero ya es tarde y mañana tengo que arreglar esto.- Se despedía con prisa mientras tomaba la mochila de su hija y le daba otro beso a su madre ahora en la mejilla.

La mujer simplemente se levanto del sofá negando con la cabeza para darle un beso a su nieta.- Cuídense, supondré que mañana no tengo que ir por ella.- Su hijo negó con la cabeza.- Muy bien.- Abrió la puerta de su hogar y se despedía con la mano de su nieta quien no dejaba de sacudir su mano hacía su abuela.

MinMin - SettPheliosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora