Capítulo 10

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La noche siguiente, Jungkook cena con Hoseok y Yoongi antes de patrullar. Seokjin se fue a clase a primera hora de la tarde, y envió un mensaje al chat del grupo para decir que llegaría tarde a casa, así que Jungkook termina lo que queda de la comida de anoche sin sentirse demasiado mal por ello. Está tomando una taza de té para digerir -Yoongi y Hoseok comparten una cerveza, ya que no es como si tuvieran que ir a trabajar después- cuando Yoongi lo mira de repente.

"¿Qué?", dice Jungkook con recelo.

Yoongi entrecierra los ojos. "¿Qué piensas hacer con Encanto?".

Jungkook se sobresalta un poco. "¿Qué pasa con él? ¿Por qué sacas el tema de repente?".

"Sólo estoy pensando", dice Yoongi, en un tono que deja claro que no es sólo curiosidad inocente. Hoseok mira entre los dos con cautela, pero no dice nada. "Antes dijiste que tenían un acuerdo de trabajo, pero ahora te está evitando, ¿no? ¿No estás enfadado?"

"Bueno, sí", responde Jungkook, con los hombros contraídos a la defensiva, "pero ¿qué puedo hacer al respecto? No puedo hacer que hable conmigo. Ni siquiera tengo forma de contactar con él, salvo a través de Heeyeon-noona".

Yoongi hace una mueca, toma la cerveza de Hoseok malhumorado y le da un trago. "Creo", dice, "que no quieres hablar con él porque tienes miedo".

A Jungkook se le calienta la cara. "¿Qué? No, no tengo miedo. ¿Por qué iba a tener miedo?"

"Creo que tienes miedo de por qué te evita", dice Yoongi con seguridad, y Jungkook se pone rojo vivo.

"Jungkook-ah", interviene Hoseok, con voz demasiado cuidadosa para la comodidad de Jungkook, "¿pasó algo... esa noche? ¿Entre ustedes dos?"

"¿Como qué?" pregunta Jungkook, maldiciéndose por lo aguda y defensiva que suena su voz. No le ha contado a nadie más que a Jimin y Taehyung lo que pasó esa noche, y ni siquiera les ha contado cuántas veces ha pensado en ello desde entonces. Hace dos noches se despertó en mitad de la noche, casi a punto de correrse, porque había soñado con ello. Es humillante.

Hoseok le mira. "No sé, ¿algo para que tú también quieras evitarle?".

"No quiero hablar de eso", dice Jungkook, buscando apresuradamente una forma de cambiar de tema. "¿Por qué Namjoon-hyung está enfadado contigo?". Esa mañana, Namjoon había estado normal con todos ellos, pero rígido con Hoseok, sin llegar a ignorarlo, sin llegar a rehuir sus caricias, pero incómodo al fin y al cabo.

"Jungkook", le amonesta Yoongi, mientras la cara de Hoseok decae y Jungkook se muerde el labio con culpabilidad.

Hoseok guarda silencio un momento. "No creo que esté enfadado conmigo, exactamente", dice, un poco demasiado tranquilo. "Pero tampoco creo que quiera que te diga por qué. Quizá podrías preguntárselo más tarde". Intenta sonreír burlonamente y casi lo consigue. "¡Buen intento de cambiar de tema! No hace falta que me lo digas, capto las indirectas. Pero nunca te tomé por un cobarde, Jungkookie".

Jungkook se pone rojo. "No lo soy", dice en voz baja. "No lo soy, es sólo que... no lo sé. Él me hace tan estúpido", confiesa. "Tal vez sea mejor que no lo vuelva a ver".

"Eso", dice Yoongi, "suena como una idea de mierda. Trabajan bien juntos, tú mismo lo has dicho".

Hoseok añade: "Y él cuida de ti, lo que es una ventaja en mi libro. Mi trabajo es mucho más fácil así", añade secamente, y Jungkook le frunce el ceño con desgana. "Aunque te hace pensar", reflexiona. "Si tú no estás, ¿quién está cuidando de él?".

Jungkook se queda quieto. "Yo...", se atraganta, con el estómago revuelto, y ambos lo miran con complicidad. "Lo pensaré". Mira su teléfono, se toma el resto del té y se levanta. "Debería irme".

Sobre caballos hechos de palos -Jinkook-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora