XV. El plan de la diosa

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Becky abrió su florería el martes a media mañana, el cielo estaba despejado asegurando un día soleado y caluroso, el aroma de las flores llenó sus sentidos, haciendo que se sintiera menos triste, una semana había pasado desde que su amiga falleció...

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Becky abrió su florería el martes a media mañana, el cielo estaba despejado asegurando un día soleado y caluroso, el aroma de las flores llenó sus sentidos, haciendo que se sintiera menos triste, una semana había pasado desde que su amiga falleció, aún le costaba aceptar su perdida

Revisó los girasoles con cuidado, acarició algunas petunias y acomodó los tulipanes, Freen no sabía lo feliz que la hacía todos los días al permitirle disfrutar de su mayor pasión, todos los días pensaba en élla cuando veía los hermosos colores.

Medía hora después llegó su ayudante, un joven atento de 20 años que se había acercado a ella para pedirle empleo cuando apenas recibían las primeras macetas. Ambos regaron con agua fresca las bonitas plantas mientras organizaban los quehaceres del día, tenían mucho trabajo, rato después se subió en una silla para limpiar los cristales del local mientras que él otro lavaba la banqueta y la fachada del local.

La puerta sonó y élla sonrió esperando ver a un cliente, pero fue Non el que entró con un aura de prepotencia, ahora mismo no le apetecía tener una plática con él así que siguió limpiando.

- Buenos días Becky.

Hasta su voz sonaba extraña como si estuviese trabada, élla se volteó con el trapo en la mano y lo saludó solo con un gesto del rostro, siguió limpiando esperando que con su frialdad entendiera que no quería hablar con él.

- He traído la llave de tu departamento.

- ¿te vas? - que alivio.

- Me tomé el atrevimiento de guardar las cosas de tu amiga en cajas, espero no te moleste.

Becky dejó de limpiar y bajó de la silla, tomó las llaves y las puso en el mostrador, sonrió triste.

- Muchas gracias, no había pensado aún en ellas, no sé que voy a hacer con el departamento.

- Podrías conservarlo si algún día decides volver.

- No sería mala idea.

Un largo silencio se instaló entre ellos.

- Bueno, nos vemos en la aldea, ojalá que todo salga bien con tu... novia.

Su cara de asco hizo que a Becky se le revolviera el estómago ¿en verdad él era el mejor prospecto de alfa que había?

- Espero que cumplas tu promesa.

- Lo haré, aunque yo que tu andaría con cuidado.

- Sé qué hablaste con Freen.

- ¿Élla te lo dijo? Maldita cobarde...

- No, élla no me dijo yo lo deduje.

- No pretendía lastimarte yo solo le dije la verdad.

- Pues lo hiciste, así que te pido que guardes distancia de aquí en adelante.

- No soy yo él que te está quitando la sangre Becky. No te quieres dar cuenta que te está manipulando.

Magic Blood || FreenbeckyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora