Park Jimin un chico de 24 años, un doncel hermoso, humilde y hogareño tiene 2 hijos por ellos haría lo que sea.
El siempre soño con darles una buena vida a sus pequeños lamentablemente no puede.
Min YoonGi un empresario exitoso de 27 años, cuenta co...
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Jimin estaba enojado se encontraba secando su cabello, la perra de Jennie se atrevió a mojarlo.
Pero le dió un poco de satisfacción de que le dió una buena bofetada.
No sabía que había pasado después de que salió de la cocina. Conociendo a YoonGi de seguro la está consolando.
Jennie ya lo tenía harto si se quedaba ahí todavía, mejor que no se metiera con el; porque ahora sí no solo sería una bofetada el la sacaría de la casa.
Escucho que abrieron su puerta y dió la vuelta vío que era YoonGi; tal vez ya venía a decirle que no molestara a Jennie.
—¡Si vienes a reclamarme pierdes tu tiempo! No me voy a disculpar– le dijo con voz suave ni siquiera tenía ganas de pelear.
—Solo quiero saber que sucedió para que reaccionarán así! Y no estoy buscando que te disculpes al cabo Jennie actuó mal.
Jimin mantenía la mirada baja el encerio ya no quería hablar de eso, solo pensar le daba más coraje.
—La verdad no quiero hablar de eso, ya tuve bastante estoy harto enserio ¡Tu permitiste que ella entrara aquí! Y no lo digo porque quiero que me respetes; al menos respeta la casa.
>>Tu puedes estar con quién tu quieras, pero lo único que te pido es que no traigas a nadie aquí. Al menos hazlo en el tiempo que dure el contrato.
YoonGi solo escuchaba, el admitía que hizo mal en aceptar que su amante se quedará en el mismo hogar que su esposo.
Pero no pensó que Jennie solo quería venir a causar conflictos.
—¡Si se que hize mal, y lo acepto! Pero no era la manera de que la golpearas y antes de que me reclames, ella también tuvo la culpa. Las cosas se resuelven hablando no así.
—¡Es que ese es el problema! Ella era la que me molestaba y yo no decía nada. Pero si comprendes que todo tiene un límite.
—¡Si lo sé! Pero ya no tienes de que preocuparte; Ya corrí a Jennie de la casa. Y no volveré a meter a nadie más en la mansión.
Jimin quedó sorprendido no pensó que YoonGi haría algo así, el pensó que la defendería y la consolaria por el drama que hizo en la cocina.
Pero al menos ya no tenía de que preocuparse la perra se había largado.
—¡Tienes algo más que decirme! La verdad quisiera cambiarme de ropa.
YoonGi se fijo y se dió cuenta que Jimin tenía su playera mojada. Jennie si que se pasó pero tenía una buena vista de los pezones de Jimin.
A pasos lentos se acercó a Jimin y le tocó sus pezones, Jimin se estremeció por el toque de la mano de YoonGi.
—¡¿Q-que haces?!– le pregunto Jimin con su voz titubiante.
