Amor verdadero

Te amo a ti

-¿Donde demonios has estado? -dijo el ojiazul-
-¡Takato san estas aquí!
-¿Donde más iba a estar ángel idiota? Y deja de brillar tanto que me ciegas.

En ese momento Junta corrió a abrazar a su Takato más que feliz después de tanta angustia que había pasado.

-Por un momento creí que irías a la cita con Watanabe san.
-Si me hubieran dejado hablar sabrían que iba a contestarle a Yuna que la veo como a una amiga y nada más, sin embargo sus acciones me han decepcionado mucho así que no sé si podamos serlo, de cualquier manera pronto terminaremos de filmar y ya no la veremos más y si tú me pusieras más atención sabrías lo que siento por ti y no vivirías con tus inseguridades, ya te lo dije una vez, no importa lo que pase yo siempre volveré a ti y vamos a estar juntos el resto de nuestras vidas, te amo Chunta y no voy a dejarte entiéndelo por favor.
-Takato san perdóname sé que soy un tonto pero es que tu eres tan maravilloso que a veces no entiendo como puedes esta conmigo.
-Yo tampoco pero ya ves... ángel dramático.
-Takato san- decía mientras no paraba de abrazarlo y frotar su rostro en el suave cabello de su amado- ¿y vas a hablar con ella?
-Debo hacerlo, le dire que ya tengo una relación que me hace feliz y que por ahora lo mejor será que ya no nos veamos pero que si un día esta lista para ser amigos podrá contar conmigo pero sin mentiras y respetando mi relación contigo.
-Eso es muy lindo, Takato san se preocupa por darme mi lugar.
-Ya te dije que dejes de brillar... estaba pensando que mañana después de la grabación podíamos ir a visitar una de las propiedades que nos gustaron ¿que opinas?
-Takato san me esta consintiendo y me hace más feliz con cada palabra, mañana temprano llamare al agente para hacer la cita, te amo tanto, en verdad no tienes idea cuanto.

La pareja siguió haciendo sus planes y comentando de las casas que querían visitar, en ese departamento reinaba la felicidad y el amor mientras que lejos de ahí en un restaurante al otro lado de la ciudad una mujer completamente sola en una mesa empezaba a llorar y a sentirse fracasada.

-¿Porque me haces esto Takato? ¿En serio lo prefieres a él? ¿No te das cuenta de cuanto te amo?, todo es culpa de ese maldito de Azumaya pero esto no se va a quedar así - dijo Yuna mientras sacaba su teléfono y marcaba el número de su representante-
-¿Si Yuna? - se escucho al otro lado del teléfono.
-Kobayashi san, tu eres mi único amigo, necesito que me ayudes...
-Claro que si, sabes que haré lo que me pidas...

A la mañana siguiente cuando llegaron al estudio Takato no tenía nada de ganas de encontrarse con Yuna sin embargo creía que era necesario dejar las cosas claras para que ya no hubiera mas drama innecesario sin embargo cuando la busco le dijeron que no iría a trabajar en los próximos días pues se había reportado enferma lo cual también caía muy mal pues era un retraso importante para la producción que una de sus actrices principales se ausentara por tiempo indefinido, todos parecían nerviosos, lo único bueno que salió de eso fue que como tenían que reestructurar las escenas solo filmaron unas cuantas y los dejaron irse más temprano de lo habitual.

-Takato san podemos ir a comer algo antes de ir a ver los departamentos ¡Ahhhh me siento tan feliz!
-No tienes que decirlo, se te nota a metros de distancia.

Salieron del estudio para buscar un restaurante tranquilo donde pudieran comer en paz, lo que no notaron es que otro auto los iba siguiendo y al momento de bajarse para cruzar la calle y llegar a su destino el otro conductor acelero con toda la intención de embestir a Junta, si no fuera por sus rápidos reflejos que al escuchar el rechinado de las llantas tomo a Takato y se aventó del lado contrario realmente pudo haber sucedido una tragedia.

-Chunta ¿estas bien? -dijo Takato muy asustado al ver a su pareja quien se había llevado la peor parte del golpe-
-Takato san ¿tu estas bien?
-No me paso nada solo me asuste pero tu pierna... -dijo al notar como Junta de repente cojeaba.
-Solo está hinchándose por el golpe pero nada más.
-Vamos a casa a que te pongas hielo y pomada para la hinchazón, pediré un taxi porque no puedes manejar así.
-Lo siento Takato san.
-Tu no hiciste nada, maldita gente que no sabe conducir.
-¿Tu crees que fue un accidente? A mi más bien me pareció que iba directamente contra mi.
-¿En verdad crees eso?
-No lo sé, lo mejor es que nos vayamos a casa ahora.

Tomaron un taxi y se fueron, en el camino Takato notaba como la pierna de Junta le punzaba de dolor, ademas también se veía algo mareado, aunque sabia que quería hacerse el fuerte para no preocuparlo se notaba que se sentía mal, el colmo de las cosas fue que al llegar al edificio el portero los recibió con un paquete para Takato y la típica tarjeta de su admirador secreto.

-¿Pero que...? ¿Como puede seguir haciendo esto? -dijo mientras abría el regalo que esta vez consistía en un esmoquin blanco, un traje de novio.
-Por hoy olvídalo Takato san, vamos al departamento a descansar y mañana actuaremos.
-No Chunta esto es demasiado, ¿Y si en verdad fue ella la que te intento atropellar?
-Entonces es peligrosa y debemos cuidarnos.
-Esto se acaba hoy, tu quédate descansando y yo iré a hablar con ella como debí haberlo hecho hace mucho.
-Takato san estamos diciendo que es peligrosa.
-No lo es y sobre todo se que no me hará nada, espérame aquí. - le dio un beso y se alejo
-¡Takato san! - aunque Junta le grito y trato de seguirlo no pudo hacerlo pues su tobillo estaba demasiado hinchado y le impedía correr para perseguir a Takato.

Takato llego a la casa de Yuna, conocía la dirección porque ella se la había mandado en alguno de sus primeros mensajes, iba tan molesto cargando el ultimo regalo que esta le había mandado que no se dio cuenta de la lúgubre atmósfera que rodeaba la casa, toco el timbre y a los pocos segundos le abrieron la puerta, no era Yuna como él esperaba si no su representante Kobayashi san.

-Pasa Saijou san te estábamos esperando...