CAPÍTULO XXIII

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Ona

El tiempo pasaba.Mi hijo crecía.Las estaciones cambiaban.Los días avanzaban.Pero mi cuerpo en cambio no avanzaba.Estábamos a 20 de enero del 2024.Casi dos meses después del nacimiento de mi hijo Gabriel.El crecía súper rápido,tanto que me daba miedo.Los partidos de fútbol de Pablo avanzaban bien,muchas victorias y muchos goles que celebrar.

Mi cuerpo en cambio no avanzaba.El porcentaje de la doctora sobre padecer cáncer o no se había cumplido.Tan solo un mes después del nacimiento durante mi revisión del médico,me detectaron la enfermedad.

Pablo en cuanto se enteró me consiguió un hueco en uno de los hospitales más prestigiosos de toda Cataluña.Yo encantada con él y con todo lo que estaba haciendo.

-Ona.Como has dormido esta noche?-me pregunta una enfermera entrando por la puerta-

-Bueno.Mejor que ayer.Hoy tengo día de paseo?-la pregunto.El día de paseo es un día a la semana en el que puedo estar tranquilamente en mi casa o en cualquier sitio-

-Si.Hoy mismo es el día de paseo.Han venido a buscarte tu hermana y Pedri-responde y después de sonreír y subirme a una silla de ruedas salgo del cuarto-

Me saludo con algunos enfermeros que andan de haya para acá.Antes admiraba el trabajo de ellos pero ahora simplemente son como mis superhéroes que salían en los cómics cuando éramos niños.

Llego a la puerta y me encuentro a Pedri y Alicia sonriendo.Son la suerte de mi vida.Todo mi entorno es la suerte de mi vida y lo demuestran con su apoyo incondicional.

-Hermanita-me dice mi hermana cuando me ve-

-Hermana-la saludo sonriendo-

-Como avanzas Ona?-pregunta Pedri-

-Bueno.Voy avanzando cada día mejor.Pero aún queda un largo camino por recorrer-explico y el me sonriendo-

Andamos hasta su coche y deciden subirme con los ojos vendados.

El canario conduce durante varios minutos y llegamos.Oigo ruido de gente y después de oír una indicación de mi hermana para poder quitarme la venda me la quito.

Observó donde estamos.No reconozco donde estamos hasta que veo el escudo del Barça.Estamos en la ciudad deportiva del club

-Que hacemos aquí?-pregunto curiosa-

-Aaaa -responde Pedri y yo casi salgo corriendo del coche-

Entro junto con la pareja hasta llegar al campo de entrenamiento.Lloro al ver a Pablo con mi hijo en brazos.Este pequeño si que tiene melena rubia como la mía que ya no está.

Corro hacia ellos dos sonriendo.

Nos abrazamos y yo sonrío.Hacia mucho que no veía a mi pequeño.

-Mami te ha echado de menos -digo cuando al fin le tengo en brazos-

-Nosotros dos a ti-responde Pablo y yo sonrío-

Se unen al abrazo Pedri,Alicia y Ansu

-Ona.Que sorpresa!-grita Ferran cuando me ve-

-Ferran-le abrazo.De verdad este chico es más bueno que el pan-

Estamos todos hablando un rato largo.Decidimos despedirnos y Pablo me lleva junto con mi hijo en coche a casa.

-Echaba de menos este olor-explico mientras entró en el salón-

-No huele a nada

-Claro que si.Huele a casa.A felicidad.Y también a familia.

Me besa y yo sonrío.El me esta apoyando muchísimo en esta etapa y soy la más feliz dentro de lo que cabe.

Mi novio y padre de mi hijo me venda los ojos y me vuelve a meter al coche.Esta vez conducimos un largo rato y llegamos a lo que supongo que es una playa ya que puedo oír el sonido de las olas.

Me quito la venda y me sorprendo al ver un altar con un cura y delante una fila de asientos donde está todo el equipo y mi poca familia junto con al de Pablo

-Que es todo esto?-pregunto sorprendida-

-Hemos pensado tu hermana,Pedir y yo que sería muy dificl hacer una boda por todo lo alto así que hemos montado una boda pequeña.

-Pero no tengo vestido

-Tranquila-dice mi hermana viniendo hacia mí con un vestido blanco súper bonito-

Me lleva a un pequeño baño y después de que entre Camila y mi hermana me peinasen y maquillasen salí del baño.Estaba todo precioso

Caminé junto con mi padrastro al altar mientras miraba a mi alrededor toda la gente que había venido.En ese momento me di cuenta de que hay familia y luego hay amigos pero hay amigos que se vuelven familia.Me di cuenta de eso al ver que los padrinos de la boda eran Pedri y Ferran que estaban bien elegantes.

Llegué al altar y sonreí a Pablo.Estaba demasiado guapo

La ceremonia comenzó y llegó el momento de los votos

-Ona.Cuando nos volvimos a reencontrar ya dos años atrás era un chico metido en un lío.Un chico que buscaba el verdadero sentido de su vida pero aún no lo encontraba.Hasta que apareciste tú para darle un nuevo y hermoso sentido a mi vida.Ahora las circunstancias no son las mejores que podríamos pedir pero seguimos tan unidos como siempre.Ona quiero que seas tú la mujer que camine conmigo de la mano por la calle.La que me vaya a apoyar a mis partidos.La que elija el nombre de mis hijos.Quiero que seas la mujer con la que cuando seamos mayores pueda decirte que fuiste el amor de mi vida-eso mismo dijo y yo lloré de la felicidad-

Muchos lloraron de la felicidad incluso Ansu que nunca ha sido muy de llorar

-Pablo.Bueno Gavi como todos te conocen.El día que te vi entrar por mi puerta no me podía creer que estuvieses tan tranquilo hablando conmigo como si nada.Poco a poco fuimos retomando la amistad que tuvimos cuando éramos dos niños que jugaban en el patio del colegio.Al final esa amistad se volvió en un amor.Un amor que ha superado muchos pero que muchos obstáculos.Pablo siempre te quise,te quiero y te querré,no lo dudes.Me has demostrado que si podía vivir feliz junto a un hombre.Eres mi apoyo incondicional no te has separado de mí ni un minuto y eso se agradece.Por muchísimas razones más te quiero y quiero compartir mi vida contigo el resto de mis días.

Otra vez los invitados llorando

-Muy bonito todo.Con todo esto Pablo Martín Páez ,aceptas a Ona como tú esposa?-pregunto el cura-

-Acepto

-Perfecto.Ona Prado aceptas a Pablo como tú marido?

-Acepto

-Puedes ahora si.Besar a la novia.

Y así lo hizo.Nos unimos en el beso más bonito de mi vida.El que representaba que nuestro amor era inquebrantable.El que me demostraba que no estaría sola nunca más en mi vida.El que demostraba que estaba casada con el que un día siendo adolescente había sido el amor de mi vida y que ahora lo seguía siendo

Nuestra justicia ||Pablo Gavi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora