⠀ . . 𝒢⠀ bittersweet : chanjin.

O4

— ¡Jisung, por favor! me desperté temprano para ésto. — rogó el rubio detrás del su teléfono celular mientras intentaba convencer a su amigo de prestar la dirección de su casa.

Sí, aunque eran mejores amigos Hyunjin no conocía la dirección exacta de Jisung, hacía poco que se había mudado a la ciudad y las reuniones entre ambos se frecuentaban en la Universidad, en el depa de Hyunjin, o en lugares públicos sobre todo para comer.

— ¡No, no, y no! además ni siquiera me dijiste para qué es específicamente "Nicisiti li diricciin di ti cisi piri in pinti di inciintri", sí claro ¡sueña! Necesito más información o me niego. —r epitió como había dicho un par de veces atrás al chico que se encontraba desesperado frente a su espejo. Jisung se negaba a prestar su dirección sin un motivo exacto. Decir que era para un punto de encuentro no era suficiente en lo absoluto y se consideraba un motivo convincente.

— Bueno entonces... acompáñame hacia la cafetería que vamos siempre. Usamos esa calle como punto, pero no me dejes solo, Hannie. Por favor, eres mi amigo. — rogó el chico de rostro bonito mientras simulaba sollozos. Sabía que su mejor amigo no se negaba cuando el pequeño Hyunjin comenzaba a sollozar, sus actuaciones eran pésimas, sí, pero Jisung era de corazón sensible y su pequeño Jinnie era su debilidad.

— Aish está bien. Pero solo puedo ir en la tarde, así que eso o nada. — formuló entre suspiros y bostezos, había sido despertado por la desesperada llamada del menor y eso le enojaba mucho. Hyunjin ahora maldecía por dentro, un cambio de planes, lo detestaba, pero era la última opción y no era tan mala después de todo.

— Está bien... — aceptó finalmente y colgó la llamada para así dejar que su compañero continuara con sus horas de sueño normal. Mientras él había perdido todo el deseo de dormir.

(...)

Se había pasado sus horas buscando una prenda adecuada. Aún si iba a ser secuestrado deseaba verse de forma presentable; sí, la exageración de Hyunjin participando de nuevo, podía pensar que iba a ser secuestrado aún si la situación no denotaba ese suceso.
Había optado hasta por la idea de maquillarse pero no llegaba a ese punto. En realidad era alguien muy descuidado y el hecho de que se estuviese probando prendas por horas ya era demasiado.
Si levantaba sospechas de su amigo, era específicamente su propia culpa.

Llegó el horario indicado por Jisung, unas horas antes había finalmente despertado de su profundo sueño, y al menos se dignó en dejar una hora fija a su encuentro.

(...)

Allí se encontraba el castaño, para su suerte. Sorprendentemente había llegado antes al lugar de encuentro, algo que no sucedía muy a menudo, de hecho algo que no sucedía jamás.

En esos segundos Hyunjin combatía en su mente con la idea de salir corriendo de allí, olvidarlo todo, desaparecer del sitio y posiblemente del planeta tierra; pero no había vuelta atrás. Además pensaba que si secuestraban a su amigo, iba a ser específicamente su culpa. Oh no, no deseaba traerse un problema de ese tipo, no podía sobrevivir con la conciencia sucia aunque obviamente no fuese a pasar. Otra vez creando películas en su cabeza, tal vez su instinto de estudiante de cinematografía y artes, para no decir que se trataba de su característica paranoia.

— ¡Ya era hora! —exclamó Jisung al verlo acercarse a su mesa y rodó los ojos. Hyunjin simplemente le sonrío, de forma nerviosa, sobre todo porque veía a Jisung totalmente cómodo en aquél asiento, dispuesto a tomar algo cuando en realidad la idea propuesta era esperar a "CB" en la salida.

— Debíamos vernos afuera... —murmuró mientras se sentaba lentamente frente a su amigo y soltaba un gran suspiro, acompañado de un rápido movimiento de manos que golpeaba la mesa de forma desesperada.