Capítulo 10.

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Cuando llegaron a casa lo primero que vieron eran como ambos niños salían por la puerta, corriendo tan pronto como escucharon el automóvil estacionarse afuera. Se vieron por última vez antes de salir al exterior y cada uno se encargó de cargar a cada niño, dirigiéndose todos al interior de la casa con la intención de ponerse al día.

Su hermana salió, despidiéndose rápidamente al tener que ir a un lugar tan pronto como llegaran y con algo de prisa. Fueron a la sala, ambos niños en sus regazos mientras se sentaban en uno de los sillones grandes.

—¿Cómo les fue con la tía Ann?—Cuestionó Jungkook mientras tenía a Haneul entre sus brazos.

—Bien, horneamos galletas y les dejamos poquitas, están en la cocina.—Junwon mencionó, señalando la cocina que se encontraba a espaldas de donde se encontraban.

—¿Y tú, cariño? ¿Te divertiste quedándote con Junwon?—Fue turno de Taehyung de preguntar, sonriendo hacía su hija.

La pequeña asintió.—¿Cuándo puedo volver a quedarme? Pero ahora que estemos todos juntos, como una pijamada y hacer poder jugar y comer todos juntos.

Los dos adultos se sonrieron de forma cómplice, llegando el momento de la verdad.—De hecho, queríamos hablar con ustedes de algo importante.

Ambos niños compartieron una mirada curiosa, prestando atención a lo que tenían que decir.

—Estuvimos hablando Jungkook y yo, pero la decisión es de ustedes.—Murmuró, viendo las expresiones de cada uno.—Y por eso queríamos preguntarles si les parece bien que formemos una familia, nosotros cuatro.

Junwon abrió la boca en sorpresa, mientras que Haneul fruncía la nariz captando las palabras dichas por su madre. El pequeño se sentía en un sueño, ¿Realmente estaban preguntando eso? ¿Su sueño se estaba haciendo realidad? Quería pellizcarse para comprobar que no se trataba de un sueño.

—¿Serás mi mamá, y Haneul será mi hermana?—Cuestionó con un brillo acuoso en sus ojitos, viendo a los dos mayores con una expresión de ilusión.

—¿Lo puedo llamar papi ahora?—Haneul se aferró al suéter de lana que llevaba puesto, sonriendo.

—Si ustedes aceptan seremos una familia, ustedes tendrán su propia habitación y todos viviríamos en la misma casa, ya no tendrían que hacer nada por su cuenta porque nos tendrían nosotros. Junwon y yo estaremos para cuidarlos, nos tendremos mutuamente.

—¿Sigo soñando?—Junwon pasó el dorso de sus manitas por su rostro, tratando de quitar todo rastro de sueño.

Taehyung negó con una sonrisa y se inclinó, depositando un beso sobre su sien.—No, cariño. Esto es de verdad, me gustaría poder ser tu mamá, así como Haneul quiere ser tu hermana.

—¿Nos contarán cuentos antes de dormir? ¿Podremos preparar galletas todos juntos y pasear a ese lugar donde papi nos llevó la otra vez?

Los adultos no se acostumbraban con la forma de referirse de Haneul a Jungkook, pero lo tomaron como una buena iniciativa a su nueva forma de vivir.

—Haremos todo eso y más, todo lo que quieran hacer lo cumpliremos, ya no tendremos más momentos solitarios porque ahora somos una familia.

Y con una sonrisa en cada uno de los rostros, pasaron el resto del día haciendo planes sobre la nueva forma de vida que vivirían como una familia, los cambios estarían por venir y no podrían estar más que emocionados por vivirlos.


(...)


Fue cuestión de un par de semana cuando poco a poco las cosas se iban trasladando, solo lo que se consideraba lo más suficiente para el día a día; Habían decidido que se instalarían por mientras en la casa de Jungkook, por lo tanto estarían buscando otro hogar que fuera lo suficientemente grande para que cada uno tuviera su espacio, además de algunos otros planes que tenían en mente para el futuro próximo.

—Tú... ¿No has pensado en tener otro bebé?—Jungkook cuestionó cuando se encontraban en la sala viendo la televisión. Después de que fueran a llevar a los niños a dormir y que les leyeran un cuento, se aseguraron que todo estuvieran en orden y habían bajado, viendo la televisión, pero en el proceso habían iniciado una conversación sobre los sueños que tenían en mente.

Taehyung lo estuvo pensando antes de responder.—Siempre quise tener dos hijos, pero cuando pasó lo del padre de Haneul... Digamos que tuve miedo de repetir la historia, además no tenía intenciones de buscarle un padre ni tampoco me veía ya formalizando con alguien más, suficiente tenía con lo pasado. Pero una parte de mí temía de como podría reaccionar ella, siendo hija única y teniéndome solo a mí, ¿Qué pasaría si un día falto para ella? No seré eterno, y aunque quisiera poder tenerla conmigo siempre, no tengo la vida asegurada, así que no puedo asegurar el verla crecer, formar una relación o verla siendo una gran persona, todo dependiendo de lo que quiera en la vida, pero por más que quisiera no puedo decir que estaré toda su vida a su lado. Y si esto va demasiado serio, ahora sé que tiene un hermano que la apoyará si llego a faltar, una figura paterna si algo me pasa, y si me pones a elegir, me da ilusión de volver a concebir una vida. No por nada trabajo en el área de pediatría, amo a los niños así como yo quisiera tener una gran familia.

—Una gran familia significa... ¿De cuántos hijos estamos hablando?—Ambos soltaron una carcajada, relajándose en el sillón.

—¿Y tú quieres otro hijo? ¿Has pensado en ello?—Tomó lugar sobre sus rodillas, prestando atención sobre su respuesta.

—Comparto pensamiento contigo, temía dejar solo a Junwon, pero no sabía si sería buena idea volver a formalizar con alguien. Como te dije, temía perder a quien sea que tuviera conmigo de la misma forma que pasó con ella, mas teniéndote conmigo y lo que estamos haciendo, no me molestaría volverlo a considerar, si tú quisieras que nosotros lo intentáramos cuando nos veamos como algo más que serio aquí, entonces estaré ahí.

Taehyung se inclinó lo suficiente como para tocar su nariz con la suya y sonrió, deleitándose con el momento y cerrando los ojos, sintiendo una paz entrañable dentro de su pecho.—Me alegro haber ido a ese turno aquel día, de esa forma logré conocerlos a Junwon y a ti.

—No diré que me alegro que mi hijo estuviera enfermo, pero si que me hiciera reconocer aquellos sentimientos que no sabía que podría volver a tener.—Sonrió, acunando el rostro ajeno entre sus manos.

—Aquel día no tenía intención de ir, pero una de mis compañeras enfermó y me pidió cubrirla. Luego pidió una incapacidad y por eso me encontraban cada que iban, no imaginé que sería una bonita coincidencia que las cosas sucedieran de esa manera, ahora lo agradezco.

—¿Taehyung?

—¿Jungkook?—Rieron y bastó una última mirada para saber lo que se aproximaba.

—Te amo, Taehyung. Gracias por hacerme volver a creer que la vida no puede ser del todo injusta después de todo, después de que todo se volviera monótono, hiciste que todo volviera a tener colores en mi vida, y solo por tenerte a ti y a Haneul, simplemente gracias.

Figura Paterna | KVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora